AMLO permaneció en el exterior uno de cada 136 días de su sexenio

El desinterés por el mundo, desde un país globalizado como lo es México, tendría que generar preocupación.

El presidente López Obrador visitó 8 países a lo largo de su sexenio, todos en el continente americano. Felipe Calderón visitó 42 países y Carlos Salinas de Gortari, 39, este último en el siglo pasado.

AMLO se ausentó del país únicamente durante 16 días, es decir, en promedio pasó un día en el exterior cada 136 días de su gobierno.

En cinco ocasiones viajó a Estados Unidos, donde permaneció durante ocho días. En uno de ellos visitó únicamente Naciones Unidas, 18 y 19 de noviembre de 2021.

En mayo de 2022 dejó México el mayor número de días, 4, mismos que los distribuyó para viajar a Guatemala, Belice, Honduras, El Salvador y Cuba. En un solo día, 6 de mayo, AMLO visitó El Salvador y Honduras.

El presidente mexicano no realizó viajes al exterior durante dos años de su gobierno: 2019 y 2024. El mes que tomó posesión, diciembre de 2018, tampoco lo hizo.

AMLO degradó la política exterior pese a que prometió al inicio de su Gobierno hacer lo contrario: premió a un grupo de gobernadores del PRI con embajadas luego de haber entregado el poder a morenistas. Uno de los casos más desagradables fue el de Sinaloa, Quirino Ordaz, y lo hizo en los momentos en los que AMLO decidió “pausar” la relación con España.

AMLO nunca valoró la relación con España, un país que representa para México la puerta de entrada a Europa. Por el contrario, la carta del famoso perdón a los pueblos originarios, escrita por la esposa de AMLO, Beatriz Gutiérrez Mueller, mantuvo la relación en tensión innecesaria.

Al inicio de su sexenio nombró a Marcelo Ebrard como secretario de Relaciones Exteriores “porque no le tenía confianza, pero le debía favores”, me comenta un diplomático. “O va a Relaciones Exteriores o Relaciones Exteriores o Relaciones Exteriores, no hay otra (secretaría)”, comentó el presidente AMLO al diplomático que me pide no revelar su nombre para hablar libremente.

AMLO sabía desde hace seis años que la secretaría de Relaciones Exteriores sería un florero durante su sexenio.

Al ser presidente electo, AMLO sostuvo una charla con la embajadora Martha Bárcena, a la que antes de nombrarla su representante ante Washington, le ofreció la dirección de Pemex. 

La embajadora le platicó en aquella ocasión sobre el sistema de salud en Dinamarca, país donde estuvo al frente de la legación mexicana entre los años 2004 y 2013.

Dinamarca, el modelo del sistema de salud a seguir. No hubo Dinamarca, pero sí López- Gatell, en cuya sombra murieron 700 mil personas a consecuencia del covid-19. 

Una de las garantías que ofrece el sistema de salud danés es llevar a hospitales privados a enfermos que no encuentren lugar en hospitales públicos. En efecto, es como llevar al hospital Ángeles o al Español a pacientes que no logren ingresar al hospital 20 de noviembre del ISSSTE. 

En las pasadas elecciones legislativas danesas, el principal tema de debate fue el sistema de salud; en México, el debate era la popularidad de AMLO y las encuestas.

Dinamarca se ha especializado en dos grandes temas de salud: combate al cáncer y a la producción y exportación de insulina: el laboratorio Novo Nordisk es uno de los principales del mundo. Dinamarca exigió a los ciudadanos dos pruebas de covid-19 a la semana. A través de una aplicación, podrían ingresar a lugares públicos a través de un código QR. En México, López-Gatell engañaba a la población.

AMLO despreció el mundo; no le hacía falta. Engañó y mintió sobre Dinamarca. Simpatizó con dictadores y le aplaudió a Trump. Será su legado.

@faustopretelin