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Opinión

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Adiós a Podemos, Sánchez impulsa a Yolanda Díaz

Irene Montero y Pablo Iglesias atestiguan el súbito debilitamiento del partido de izquierda radical Unidas Podemos.

En las elecciones generales del próximo 23 de julio Unidas Podemos será un partido marginal y casi absorbido por la nueva agrupación de la vicepresidenta Yolanda Díaz, Sumar.

El 20 de diciembre de 2015 Podemos lograba el mayor de sus éxitos desde su creación (febrero de 2014) bajo la estela de la crisis económica de 2009.

Podemos se convertía en la tercera fuerza política de España con un 20.66% de los votos en las elecciones generales, cifra que se traducía en 69 escaños de las Cortes Generales.

El partido de Pablo Iglesias, Juan Carlos Monedero, Íñigo Errejón y Pablo Echenique sorprendió al bipartidismo.

Podemos fue la fuerza política más votada en Cataluña y el País Vasco; la segunda en Madrid y en la Comunidad Valenciana. “España ha votado cambio de sistema”, decía Pablo Iglesias la noche electoral del 20 de diciembre de 2015. A su izquierda se encontraba Irene Montero y a su derecha Íñigo Errejón; detrás de este, Juan Carlos Monedero.

Ocho años después Unidas Podemos dejó de existir en Madrid luego de sus pobres resultados en las elecciones municipales del mes pasado.

Ocho años después, el presidente Pedro Sánchez ha vivido el pronóstico que él mismo se aventuró a señalar en las elecciones generales de 2019: Una alianza con Podemos le quitaría el sueño. Y así ha sido.

Pedro Sánchez cometió el gravísimo error de mantener a Irene Montero al frente del ministerio de Igualdad luego del fracaso de la ley “solo sí es sí”. En ella, Montero trató de que las penas judiciales fueran mucho más duras en contra de acosadores sexuales. El efecto de la ley tomó el rumbo contrario. Más de 1,000 acusados vieron rebajar sus penas a tal punto de que lograron ser excarcelados.

No existió una humilde declaración mea culpa por parte de Irene Montero. Por el contrario, ella y su esposo Pablo Iglesias se la pasaron calificando a jueces de machistas.

Sánchez tuvo que reemplazar la ley con votos del Partido Popular (PP), pero no forzó la dimisión de Montero. Las urnas, el pasado 28 de mayo en las elecciones municipales, sí le cobraron factura a la coalición PSOE/Unidas Podemos.

Pedro Sánchez está contra la pared por la acumulación de variables que dejan a Alberto Núñez Feijóo en la puerta de la Moncloa: el efecto Ayuso en Madrid; los buenos resultados del PP en las municipales; y las alianzas del PP con Vox en Valencia.

Es claro que Pedro Sánchez impulsó a Yolanda Díaz en su Gobierno para que se convirtiera en el principal referente de la izquierda que está a la izquierda del PSOE.

Adiós a Podemos. Ahora tendrá más chambitas de engaña bobos en América Latina.

@faustopretelin

Fue profesor investigador en el departamento de Estudios Internacionales del ITAM, publicó el libro Referéndum Twitter y fue editor y colaborador en diversos periódicos como 24 Horas, El Universal, Milenio. Ha publicado en revistas como Foreign Affairs, Le Monde Diplomatique, Life&Style, Chilango y Revuelta. Actualmente es editor y columnista en El Economista.

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