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Afores, comisiones a la baja
El gobierno de la cuarta transformación logró comprometer a las 10 poderosas afores que operan en el país a reducir sustancialmente las comisiones que cobran a los trabajadores por administrar e invertir sus ahorros.
Es una noticia muy positiva para los trabajadores que actualmente participan en el sistema privado de pensiones, pero es mucho mejor noticia para quienes están por comenzar a ahorrar en las afores, porque desde el principio gozarán de la ventaja de pagar menos y ahorrar más.
Finalmente, se hizo oficial el anuncio que le anticipé en este espacio, respecto del inminente recorte a las comisiones que cobran las afores a los trabajadores por administrar sus recursos.
Durante la conferencia mañanera del presidente Andrés Manuel López Obrador, el secretario de Hacienda, Arturo Herrera, hizo público el acuerdo al que llegó el gobierno mexicano con la decena de afores que operan en México.
El objetivo es que, al final del sexenio, las comisiones disminuyan entre 25 y 35 puntos porcentuales y se ubiquen en alrededor de 0.70% frente al actual 0.98 por ciento.
Esto implicará una reducción de alrededor de 100,000 millones de pesos en los ingresos de las afores.
Y esa misma cantidad será en beneficio de los trabajadores que ahorran en las administradoras.
Hay que decir que se trata de una reducción histórica en el monto de las comisiones que cobran las afores.
Y también hay que recordar que aunque en el pasado se logró una reducción importante, se hizo en un intervalo de tiempo muy amplio.
Ahora, la disminución está programada para que ocurra en este mismo sexenio.
En el año 2008 las afores cobraban una comisión de 1.89 por ciento.
A partir de entonces comenzó su reducción de manera paulatina en los siguientes 10 años.
En el año 2018 llegaron a un promedio de 1.01 por ciento.
Y este año 2019, con el nuevo gobierno se rompió por primera vez la barrera de 1%; las afores cobran un promedio de 0.98 por ciento.
Reforma de gran calado
El trabajo que permitió alcanzar este acuerdo sin duda se debe a la Secretaría de Hacienda que hoy encabeza Herrera.
Pero merece un reconocimiento especial el presidente de la junta de gobierno de la Consar, el órgano regulador del sistema de pensiones, Abraham Vela. Las afores tuvieron una posición diferenciada, en función de su tamaño e intereses, pero al final se alinearon al objetivo gubernamental. El presidente de la Amafore, Bernardo González, destacó un dato relevante.
Desde el año de 1977, cuando nacieron las afores, las comisiones que cobran se han reducido en 90 por ciento. No sólo eso. Las afores han generado buenos rendimientos para los ahorros de los trabajadores. Lograron rendimientos de 11% en términos nominales y 5% en términos reales anuales. Más allá de las posiciones de las autoridades y empresas, y a pesar de la buena noticia que implica este compromiso para continuar reduciendo, lo cierto es que todavía falta la reforma de pensiones de gran calado.
Una reforma que permita aumentar de 30% actual a 70% de su último salario el monto de pensión que reciben los trabajadores. Y para ello, obligadamente tendrá que plantearse el aumento de la aportación de 6% actual a un promedio de 15% e incluso la posibilidad de aumentar la edad de retiro.
Veremos si el clima político y los intereses económicos de las partes permiten que se logre esa reforma de pensiones de gran calado. Al tiempo.
Atonía económica prolongada
La economía mexicana se estancó en el segundo trimestre del año, cuando registró tasa cero de crecimiento, pero todo indica que la desaceleración económica se prolongará en lo que resta del año y muy probablemente en el próximo año 2020.
El Banco de México, que gobierna Alejandro Díaz de León, dio a conocer ayer un nuevo recorte en su proyección de crecimiento para la economía.
Su diagnóstico es preocupante. Señala que la economía mexicana completó cinco trimestres en atonía.
Y se explica por caídas en el sector industrial, la caída de la construcción y de las inversiones pública y privada, aunadas al débil consumo. El banco central recortó sus expectativas de crecimiento para este año. Estima que el PIB se expandirá en un rango que va de 0.2 a 1.7 por ciento. Este pronóstico es inferior al que previó en abril, cuando anticiparon que la tasa de crecimiento podría ubicarse entre 0.8 y 1.8 por ciento. El nuevo pronóstico del techo previsto es inferior del piso del rango anterior.Y está lejos del que tenía en noviembre, cuando consideraba viable alcanzar una expansión de entre 1.1 y 2.1 por ciento.
Se trata del cuarto recorte trimestral consecutivo que conduce el banco central en su pronóstico. La mala noticia de la revisión a la baja del pronóstico de crecimiento anticipa la prolongación de la atonía hacia el resto del año e incluso el próximo.
Para el año entrante Banxico también recortó el pronóstico, a un intervalo que va de 1.5 a 2.5%, rango que está debajo del pronóstico previo que estaba entre 1.7 y 2.7 por ciento.
Aunque ni al presidente de México ni al hombre más rico del país les parece importante que crezca o no la economía, lo cierto es que se registra una marcada atonía o estancamiento y ello implica impactos diversos en la economía, las empresas y las familias.
ATISBOS
RELEVO. José de Luna Martínez será el relevo en la Unidad de Crédito Público de la Secretaría de Hacienda, de Gabriel Yorio, quien ocupaba esa posición, hasta hace unos días que fue designado y luego ratificado como subsecretario de Hacienda.
El presidente de México envió una carta al Congreso con la nominación de De Luna Martínez, quien, de ser ratificado, se encargará de supervisar las emisiones de deuda.
Yorio relevó en la subsecretaría de Hacienda y Crédito Público a Arturo Herrera, cuando éste sustituyó al renunciante Carlos Urzúa.