Banxico al límite

Es importante en honor a la justicia, reconocer que Banxico está al límite de su capacidad real para disminuir considerablemente la inflación en el corto plazo. Con una tasa de interés de referencia al 11.25% que ha sido una de las causas por la que hemos visto al dólar en una inusitada cotización, lo que genera que el mundo financiero esté atónico ante estos niveles en el precio de la divisa norteamericana. Existen desde luego, otras razones empero son evidente que el diferencial de tasas entre las que se pagan en México con las de EU que alcanza 6.25% ha hecho del peso una moneda muy apetecible. Lo anterior ha conjurado la idea de que los altos niveles de precios son producto de una inflación importada. En la más reciente reunión de junta de gobierno, con responsabilidad la gobernadora Victoria Rodríguez Ceja y los subgobernadores pausaron la larga racha de alzas de tasas de interés lo que ha llevado a la referencia al día de ayer al 11.51% después de un promedio en los últimos 22 años de 6.62 por ciento. Cuando las tasas son tan altas sin que ello se refleje en movimientos claros a la baja de la inflación lo que se termina provocando una atrofia al resto de la economía al mismo tiempo que detona como es el caso, en un sobreendeudamiento de los agentes económicos incluyendo al gobierno, y, la expansión de ganancias a los bancos pero que sí tienen poca capacidad de penetración y crédito. Todo mal. Las 45 marcas de bancos han reportado impresionantes ganancias, el país sigue con 60% de su territorio sin contar con sucursales bancarias y la penetración del crédito es tan baja que realmente no aportan gran cosa al desarrollo. En esta lógica la pausa de Banxico es lo más conveniente en este momento. 

Sabemos, los efectos de la inflación son devastadores para todos sin excepción aún más que las recesiones. El por qué en este momento el banco está llegando a su límite estriba en que, mientras la inflación en buena medida sea producto de factores fuera de mercado, no hay tasa de interés que alcance a mitigarla. A qué no referimos, ejemplos hay muchos. Uno de ellos, son las extorsiones y derecho de piso que el crimen cobra a prácticamente todos los comercios en especial, restaurantes, tiendas de conveniencia, tortillerías, hoteles, lo que provoca que los dueños de estos establecimientos trasladan ese costo al precio final al consumidor, por lo que encareciendo el crédito lo único que logra en este caso es, subir el costo de la extorsión. Lo mismo ocurre con la falta de inversión y conectividad que tenemos lo que impide que bienes y servicios circulen en la economía de manera eficiente. También el gasto y endeudamiento creciente del gobierno obstaculiza a la autoridad monetaria concluir con su función en la estabilidad de precios. Entender estos y otros factores ayuda a esgrimir la tesis de que Banxico está llegando al límite en su misión principalísima.