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CIIT, ¿banderazo al futuro?
El gobierno de México, casi al final de la administración lópezobradorista –después de decenas de proyectos fallidos, a lo largo de la historia–, inicia la última etapa del proyecto de mayor potencialidad, de entre los que hasta ahora ha impulsado: el Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec (CIIT).
Es “el banderazo” para que en un plazo de 30 años, México se convierta en una potencia económica, dice, la secretaria de Economía, Raquel Buenrostro.
Este 8 de mayo del 2023 se anuncia el inicio de las licitaciones de 10 polos de desarrollo del CIIT, que comenzará con 6, en una primera etapa.
Es una apuesta gubernamental para desarrollar el sur de México y aprovechar el fenómeno de la relocalización de las empresas de la región asiática a norteamérica.
Se trata de una plataforma logística que incluye los puertos de Coatzacoalcos, Veracruz y Salina Cruz, Oaxaca, el ferrocarril interoceánico, un gasoducto e infraestructura carretera.
Pero lo más importante es que México busca convertirse en una nueva fábrica de producción para el mundo, con un centro logístico y de manufactura.
Los inversionistas que lleguen al CIIT, no partirán de cero –asegura la funcionaria–; dispondrán de infraestructura, conectividad, servicios, sistemas de apoyo e incentivos para facilitar la producción, el comercio y el transporte.
México tiene una enorme e histórica oportunidad. Y la ubicación geográfica privilegiada del Istmo de Tehuantepec, podría detonar el interés de las inversiones que permitan la integración al desarrollo de la región sur-sureste, al resto del país.
El CIIT es un centro geográfico estratégico a nivel global que comunica a los más importantes puntos del mundo. Es la primera vez que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador iniciará una campaña abierta para atraer inversiones privadas internacionales y nacionales para desarrollar el Corredor Interoceánico.
Viene de una etapa en la que ha hecho todo lo contrario. En particular las inversiones en energías limpias. Buenrostro tiene planeado realizar una gira internacional, para promover el CIIT. De entrada acudirá a Estados Unidos, Canadá y Alemania. Adicionalmente está prevista la visita de misiones de Taiwán y otros países.
La intención es atraer inversiones sostenibles que generen empleos dignos y bien remunerados y que se ubiquen en aquella región del país en la que sí hay agua. Ya no se otorgarán concesiones, en las entidades en las que ya no hay agua, salvo por decisión y asignación presidencial.
Las concesiones de los Polos de Desarrollo tendrán una vigencia inicial de dos años, con la posibilidad de extenderla por 5 años más.
Para evitar la especulación, si transcurren dos años y no se ha invertido un solo peso, perderán la concesión, advirtió la funcionaria.
Una vez que termine el proyecto hasta la fase de no retorno, dejará de ser inmueble federal para ser propiedad del concesionario.
En los próximos días la Secretaría de Hacienda de Rogelio Ramírez de la O, publicará los incentivos fiscales que concederá a los concesionarios de los polos de desarrollo del CIIT.
Entre tales incentivos están la depreciación acelerada en los primeros 6 años; la exención del IVA en transacciones al interior de los polos y entre estos durante los primeros 4 años; la exención al 100% del Impuesto Sobre la Renta durante los primeros 3 años, con posibilidad de extenderse por 3 años adicionales, con una reducción de hasta el 90%, en función de variables como número de puestos de trabajo creados.
Los polos estarán orientados a 11 vocaciones productivas: Eléctrica y electrónica; Semiconductores; Automotriz (electromovilidad, autopartes y equipo de transporte); Dispositivos médicos; Farmacéutica; Agroindustria; Equipo de generación y distribución de energía eléctrica (energías limpias); Maquinaria y equipo; Tecnologías de la Información y la Comunicación; Metales y; Petroquímica.
Sin duda se trata de un megaproyecto gubernamental. Hasta ahora, registra un 80% en la restauración de las vías ferroviarias de la Línea Z de 308 kilómetros, para interconectar a Oaxaca y Veracruz, según el vicealmirante Raymundo Morales Ángeles, director general del Corredor Interoceánico y será concluirá en agosto de este año.
Es un megaproyecto muy ambicioso que tiene retos importantes: la atracción de inversiones internacionales; la proveeduría de energía (de todo tipo) en particular limpia; la seguridad en la región y sobre todo, el tiempo que se extingue para la actual administración. A ver.