El IFT ¿bajo presión?

A muchos nos preocuparon las iniciativas de reforma constitucional que envió el presidente López Obrador a la Cámara de Diputados, entre otras, aquella por la cual pretende desmantelar el andamiaje de los órganos con autonomía constitucional como el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) o el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI).

Después, a mi me preocupó la inusual conferencia de prensa convocada por el ingeniero Carlos Slim Helú, para tratar de explicar que sus casi 100 mil millones de dólares que la revista Forbes, de los Estados Unidos, reporta como su riqueza acumulada, los empezó a generar desde que era adolescente. Me preocupó por los mensajes que anteriormente hemos visto busca colocar. Como lo reportaron una gran cantidad de notas, el magnate mexicano de las telecomunicaciones trató de aprovechar ese encuentro con periodistas para quejarse de que este operador opere sin ganancias desde hace 10 años.

Según el dicho del ingeniero Slim, Telmex opera sin ganacias en virtud de la carga que -desde su óptica- le representa la regulación que le impone el IFT a este operador fijo, con apego al marco legal vigente, así como el hecho de que no ha logrado obtener la autorización para prestar el servicio de televisión restringida, por el hecho de que no se han cumplido los requisitos que estableció el Congreso de la Unión en 2014, bajo la premisa de que esa autorización en específico representa un riesgo para la competencia efectiva en el sector telecomunicaciones. En mi artículo de la semana pasada mencioné que incluso se había referido de manera crítica a la autonomía constitucional del IFT y puse sobre la mesa la interrogante sobre si su salida a medios busca allanar el camino de la 4T para desarticular a los órganos autónomos, como el IFT.

A una semana de ese evento, y después de tener la oportunidad de conocer otros hechos, aparentemente no relacionados, creo que cabe agregar otra pregunta a la que cité anteriormente: ¿no estaría intentando el ingeniero Slim subir de tono la presión sobre el IFT, de la misma forma que lo hace de manera sistemática el presidente López Obrador, para lograr un órgano regulador que, asustado, ceda a sus exigencias?

Lo anterior lo traigo a colación en el contexto de la reciente resolución del Pleno del IFT mediante la cual aprobó una solicitud de CFE Telecomunicaciones e Internet para Todos (CFE TEIT) para que le fuera modificada su concesión única de uso público, que le fue otorgada en 2019. Al respecto, el presidente se había venido quejando de manera reiterada que el IFT no le dejaba prestar servicios en todo el territorio. No se lo permitía por un aspecto central asociado con cualquier empresa de propiedad estatal, su tendencia a no operar bajo los mismos criterios bajo los que operan empresas comerciales que se desenvuelven en un mercado en competencia, lo que puede afectar a la larga justo las condiciones de competencia y terminar perjudicando a los usuarios.

No entraré al fondo de esa resolución, pero sí a detalles que generan inquietud y que hablan de una institución asustada que está dispuesta a actuar al gusto del gobierno, lo que ya debería precouparnos de por sí. La solicitud de CFE-TEIT ingresó al IFT el 9 de enero de este año, y con una celeridad que prácticamente no he visto antes, todas la unidades del IFT y el propio Pleno del órgano regulador actuaron para resolver casi con un mes de diferencia la solicitud de la empresa que el presidente López Obrador pretender convertir en el nuevo referente de telecomunicaciones de nuestro país.

La inquietud que ahora me surge, es si ese órgano regulador por el que tantos opinamos para defender su autonomía constitucional ¿no estará claudicando antes de tiempo a las presiones del gobierno? Con el antecedente de CFE-TEIT, ¿no nos estará anunciando que con un poco de presión del gobierno y del propio ingeniero Slim, podría terminar por ceder y aligerarle la carga regulatoria en perjuicio de la competencia y de todos los usuarios de telecomunicaciones?

*El autor es economista.

@GerardoFloresR