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La CELAC hacia 2023
La Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) es un mecanismo de integración cuya membresía es exclusiva de los 33 países de la región. La CELAC no estuvo exenta de la crisis que ha sufrido el multilateralismo en los últimos tiempos, pues la duplicación de agendas y la polarización ideológica la habían orillado a un impasse desde 2018.
No fue hasta 2020 que México vio en la CELAC una oportunidad para hacer escuchar la voz de la región y demostrar que el diálogo es la mejor estrategia. Para ello, durante su presidencia, que comprendió el bienio 2020-2021 ponderó los temas de cooperación sobre los políticos, además, la coyuntura de la pandemia por Covid-19 exacerbó la necesidad de que las naciones cooperaran ante amenazas comunes.
Con el paso de los meses y tomando todo su capital diplomático, la CELAC retomó escena en el concierto de las naciones, reuniéndose con sus principales socios extra regionales, realizando pronunciamientos conjuntos y teniendo un diálogo constante. Todo lo anterior, se vio plasmado en la VI Cumbre de Jefas y Jefes de Estado y de Gobierno, celebrada en la Ciudad de México, sin embargo, era tiempo de pasar la estafeta a un miembro que continuara los esfuerzos mexicanos; Argentina resultó electa para ostentar la PPT en 2022.
La Argentina identificó continuidades dentro del trabajo mexicano, como la consolidación de la Agencia Latinoamericana y Caribeña del Espacio y los retos de la educación en la región, además de agregar temas de energía atómica y la consolidación del diálogo con los socios del bloque. El mayor logro de su gestión es la reunión de Ministros de Relaciones Exteriores CELAC-UE, donde Josep Borrell, Alto Representante para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad se reunirá con la membresía en aras de consolidar una cumbre CELAC-UE para 2023 y relanzar la asociación estratégica birregional.
No obstante, el mandato argentino está por terminar y la incertidumbre de la continuidad de las actividades de la CELAC vuelve a salir a flote, pues a diferencia de la OEA, la CELAC no cuenta con un secretariado que atienda los trabajos del foro, por lo que su operación depende de los recursos humanos y financieros del país que ostente la presidencia.
El escenario regional vislumbra varias personalidades que pudieran tomar la estafeta de este mecanismo: Xiomara Castro por parte de Honduras, Gustavo Petro y una Colombia con nuevos horizontes, o Lula Da Silva que retornaría a Brasil a la membresía activa para tener a la CELAC reunida de nuevo se prospectan como los mandatarios que pudieran levantar la mano para presidir el mecanismo en 2023.
Sin embargo, durante el último periodo de sesiones de la AGONU no se celebró la habitual reunión de cancilleres donde se esperaba saber los nombres de los candidatos a la presidencia, pues la curva de aprendizaje, las limitantes humanas y un periodo tan corto al frente del mecanismo pudieran entorpecer los trabajos del siguiente presidente.
Tendremos que estar atentos para ver quien será el país encargado de cosechar estos tres años de revitalización del mecanismo, o quizás deberíamos de reconsiderar la propuesta del presidente Maduro de hacer de la CELAC una organización internacional con sede en México, si bien el principal problema son las cuotas que le significarían a la membresía, es cierto que México ha reconocido su naturaleza latinoamericanista y caribeña y pudiera ser pionero para la financiación del proyecto de integración regional.
Brandon Pérez es asociado del Consejo Mexicano de Asuntos Internacionales.