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La intención de cancelar las NOM en salud, entender la relevancia de la normatividad
La Ley de Infraestructura de la Calidad en materia de las Normas Oficiales Mexicanas (NOM) establece que estas normas son un instrumento fundamental para promover la calidad y la seguridad de los productos y servicios en México. Reconoce la importancia de las NOM como referentes técnicos para establecer requisitos y estándares mínimos que deben cumplir los productos, procesos y servicios en diferentes sectores. Adicionalmente establece la obligatoriedad de su observancia.
En el ámbito de la salud en México, la implementación de normas y regulaciones efectivas es fundamental para garantizar la seguridad y el bienestar de la población. Por ello las NOM desempeñan un papel crucial en la protección de la salud de las personas. El artículo de la Ley General de Salud en México que hace referencia a las NOM es el artículo 32, dicho artículo establece la definición de la atención médica como el conjunto de servicios que deben de ser ofrecidos para proteger, promover y restaurar la salud; estableciendo, además, que los servicios de salud podrán apoyarse en las Guías de Práctica Clínica de acuerdo con lo definido por las NOM.
El origen de las NOM se remonta a la necesidad de contar con lineamientos claros y específicos que garanticen la calidad, eficiencia y seguridad en todos los ámbitos y sectores, pero esta columna se enfocará en las relativas a la atención de la salud. A través de un marco establecido el proceso de creación y actualización de las NOM debe de ser implementado asegurando que estén alineadas con los avances científicos y tecnológicos, así como con las necesidades de la sociedad, es decir, las NOM deben de ser revisadas y actualizadas cada 5 años para que estas reflejen los avances técnicos, científicos y consideren la disponibilidad de nuevas tecnologías.
El proceso de creación de las NOM es riguroso y transparente. Se lleva a cabo a través de la participación de expertos clínicos, investigadores, académicos y representantes de la industria y la sociedad civil. Estos actores aportan su conocimiento y experiencia para desarrollar normas que sean sólidas y pertinentes. Además, se promueve la consulta pública, permitiendo que los ciudadanos interesados presenten comentarios y sugerencias sobre las propuestas de normas. Esto garantiza que las NOM reflejen el consenso y los intereses de todos los sectores involucrados. En la página del Gobierno Federal la Secretaría de Economía publicó en Julio de 2021 un articulo que detalla el impacto y beneficio de las NOM y destaca que: “Las NOM tienen valor a nivel internacional porque son el producto del trabajo interdisciplinario de los diferentes sectores involucrados, ya que están construidas por especialistas en los diferentes temas que abarcan.” Esto es contradice a los argumentos esgrimidos por las autoridades de salud las semanas pasadas que intentan minimizar el verdadero impacto de las NOM en la prestación de servicios y tratamientos estandarizados para la población que requiere atención.
La importancia de actualizar regularmente las NOM es vital para mantenerlas al día con los avances en el campo de la salud. Los conocimientos científicos y tecnológicos evolucionan constantemente, y es necesario adaptar las normas existentes para garantizar la calidad y seguridad de los productos y servicios relacionados con la salud. De ahí que se desprenda el cuestionamiento de las organizaciones de la sociedad civil, comisiones en la Cámara de Diputados Federal para que las autoridades de la Secretaría de Salud comparezcan para que se detalle las razones de intentar derogar las referidas NOM en lugar de trabajar en la actualización de estas; un ejercicio que claramente es deseable y preferible a la intención de derogarlas.
La actualización de las NOM no solo beneficia a los ciudadanos, sino también a la industria y al sistema de salud en su conjunto. Al establecer requisitos claros y específicos, se fomenta la calidad y la competencia justa entre los proveedores de productos y servicios de salud. Además, las NOM contribuyen a la prevención de riesgos y enfermedades, promoviendo un ambiente más seguro y saludable para todos. Las Normas Oficiales Mexicanas (NOM) son un pilar fundamental en la protección de la salud en México, promover y hacer respetar las NOM es un compromiso compartido que debemos asumir como sociedad.
Es responsabilidad de todos los actores involucrados, desde las autoridades gubernamentales hasta las empresas y los ciudadanos, cumplir y velar por el cumplimiento de las NOM. Esto implica garantizar la calidad de los productos y servicios relacionados con la salud, así como promover la educación y la conciencia sobre la importancia de seguir estas normas. Al mantenernos informados, respetar y promover estas normas, estamos fortaleciendo la protección de nuestra salud y construyendo un futuro más saludable para todos.
La salud es un bien preciado que debemos cuidar y proteger. Las NOM nos brindan un marco sólido para lograrlo. Esto es algo que debemos de reconocer de las organizaciones de la sociedad civil, particularmente de aquellas dedicadas al cuidado y acompañamiento de pacientes y sus cuidadores que nos han enseñado la importancia de la unidad al crear un frente común; lo mismo podemos ver en la comunidad médica, que empieza a manifestar el interés de posicionarse de forma conjunta para promover la actualización de las NOM (algunas no han sido actualizadas desde hace 10 años o más) en lugar de su desaparición.
Hoy cierro con una frase que se atribuye a Maya Angelou: “Hazlo lo mejor que puedas hasta que sepas más. Cuando sepas más, hazlo mejor.”
Oscar Flores cuenta con 25 años de experiencia en el sector de la salud en México y Latinoamérica, actualmente es socio director de una consultoría enfocada en el análisis de las políticas públicas en salud, salud digital y sostenibilidad.