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Tecnologías de mejora de la privacidad
A medida que avanza la tecnología y nos volvemos más dependientes de los dispositivos y servicios digitales, la cantidad de datos personales recopilados y procesados crece exponencialmente. Las tecnologías de mejora de la privacidad (PET, en inglés) permiten extraer y compartir información al tiempo que garantizan la seguridad y la confidencialidad de los datos personales.
Como autoridades de protección de datos personales tenemos un doble papel respecto a la implementación de las PET. Por un lado, debemos acompañar a las empresas que deseen promover su uso para manejar la información personal de manera responsable, obtener el consentimiento necesario y brindar a las personas garantías en el ejercicio de sus derechos de conformidad con la ley. Por otro lado, las autoridades de protección de datos personales deben comprender la importancia del desarrollo de estas tecnologías y orientar a las personas por las implicaciones que generan.
Al igual que el resto del mundo, México y la región latinoamericana han vivido el crecimiento exponencial de las tecnologías digitales. Si bien estos avances brindan numerosos beneficios, también plantean graves desafíos para nuestra privacidad. La región ha sido testigo de cinco riesgos latentes que afectan a las personas, las empresas y la seguridad nacional.
1. La principal amenaza son las brechas de datos y el cibercrimen, ya que la región ha experimentado un aumento significativo de incidentes, colocando a México y a Brasil como los países más atacados de la región.
2. Vigilancia gubernamental y falta de transparencia: los países latinoamericanos tienen un historial de regímenes autoritarios, México no ha sido la excepción, y se han generado preocupaciones sobre la vigilancia gubernamental y la violación de los derechos de privacidad de los ciudadanos.
3. Incumplimiento de las Leyes de protección de datos: varios países latinoamericanos han promulgado leyes de protección de datos, incluido México que cuenta con la Ley Federal de Protección de Datos Personales en Posesión de Particulares (LFPDPPP) que regula el sector privado y la Ley General de Protección de Datos Personales en Posesión de Sujetos Obligados (LGPDPPSO) que regula el sector público. No obstante, en la actualidad, cinco de veinte países de la región carecen de una ley de protección de datos, y la efectividad y el cumplimiento de estas regulaciones pueden diferir.
4. Falta de concientización y alfabetización digital: muchas personas en América Latina deben ser conscientes de los riesgos asociados con compartir información personal en línea y necesitan las habilidades de alfabetización digital necesarias para protegerse de manera efectiva.
5. Falta de privacidad por diseño: Las consideraciones de privacidad a veces se pasan por alto en el diseño y desarrollo de nuevas tecnologías y servicios, no solo en México, sino en América Latina.
Abordar estos riesgos y desafíos requiere un enfoque multifacético. Estas tecnologías de mejora de la privacidad se encuentran en las primeras etapas de desarrollo en nuestra región, por lo que es crítico promover medidas preventivas para erradicar los abusos del derecho a la privacidad en la actualidad.
Las PET juegan un papel fundamental en la protección de los datos personales que se han convertido en un activo valioso en la era digital. Por ejemplo, las tecnologías de encriptación pueden proteger la confidencialidad y la integridad de las comunicaciones y permitir que las personas tomen el control de su información personal. La privacidad diferencial y las técnicas de anonimización de datos permiten a las organizaciones obtener información sin comprometer la identidad de las personas.
Como autoridades encargadas de la protección de datos personales y la privacidad, debemos ser conscientes que la implementación de estas tecnologías puede crear una falsa sensación de seguridad, lo que lleva a las personas y organizaciones a creer que su privacidad está completamente protegida. Confiar solo en PET sin considerar otros aspectos de la privacidad, como la gobernanza de datos y las políticas organizacionales, podría provocar vulneraciones a la privacidad.
En conclusión, las tecnologías de mejora de la privacidad pueden potencialmente remodelar el panorama digital no solo de México sino de América Latina. Adoptando estas tecnologías, invirtiendo en infraestructura de ciberseguridad, creando conciencia sobre las amenazas en línea, promoviendo la alfabetización digital y fomentando una cultura de privacidad y seguridad para empoderar a los ciudadanos para que tomen decisiones informadas y exijan soluciones centradas en la privacidad.