Persuadir a empresarios e inversionistas, el reto: CS

En unas horas más, la Presidenta de México, Claudia Sheinbaum tendrá su primer encuentro formal con empresarios de Estados Unidos y México. 

En el marco del USA-Mexico CEO Dialogue, el nuevo gobierno de México presentará su plan de atracción de inversiones, su política industrial, de energía, de infraestructura y de digitalización.

Este 14 y 15 de octubre, México será anfitrión de la 14ª Edición del US-Mexico CEO Dialogue, que reunirá a alrededor de 60 líderes del sector privado de ambos países para dialogar sobre los retos y oportunidades en materia comercial y de inversión.

El U.S.-Mexico CEO Dialogue fue creado en 2013 por la Cámara de Comercio de Estados Unidos (U.S. Chamber of Commerce), presidido por Suzanne P. Clark y el Consejo Coordinador Empresarial (CCE), encabezado por Francisco Cervantes, paralelamente a la creación del Diálogo Económico de Alto Nivel (DEAN), como su contraparte empresarial.

Por parte de la iniciativa privada, es muy probable que se hagan anuncios de inversión, para mostrar apoyo al nuevo gobierno.

En este evento, la presidenta de México, planteará la ruta que seguirá para alcanzar la Prosperidad Compartida, como define al eje central de su política para avanzar hacia un mayor desarrollo económico.

Explicará que su propósito es lograr un desarrollo sustentable que se refleje en bienestar para todos los mexicanos y no sólo en los indicadores macroeconómicos.

Planteará a los empresarios de México y Estados Unidos la forma en que desea que la iniciativa privada se coordine con el gobierno de México.

Les presentará su proyecto de Nación, en el que incluye el Plan Nacional de Energía, un Plan Nacional Hídrico, un Plan de Desarrollo Profesional y Técnico; un Plan Nacional de Infraestructura que incluye la construcción de carreteras, aeropuertos y el doble de los kilómetros de trenes de pasajeros, construídos en el sexenio anterior; además de la creación de la Agencia de Transformación Digital y Telecomunicaciones.

Además, esbozará el propósito de crear 100 parques industriales vinculados a la visión de desarrollo, bienestar y sustentabilidad, considerando los recursos naturales y que se definan reglas para operar.

Recalcará su intención de avanzar en el sector automotriz, hacia la electromovilidad y el impulso de la creación y fortalecimiento de proveedores nacionales y la digitalización del comercio exterior y la educación dual.

En ésta reunión, el secretario de Economía, Marcelo Ebrard y la coordinadora del Consejo Empresarial, Altagracia Gómez, expondrán los planes del gobierno y buscarán “tejer fino” con los empresarios.

También participarán por parte del gobierno de México, los secretarios de Relaciones Exteriores, Juan Ramón de la Fuente; de Energía, Luz Elena González; de Hacienda, Rogelio Ramírez; de Salud, David Kershenobich; y de Agricultura, Julio Berdegué.

El evento será copresidido por Guillermo Vogel, vicepresidente del Consejo Global de Tenaris y Sara Baiestow, directora general de Mexico Pacific.

El USA-Mexico CEO Dialogue, sin duda, es una gran oportunidad para que el gobierno de Sheinbaum defina su política económica, industrial y de infraestructura y disipe las dudas que hasta ahora persisten, por el cambio de gobierno.

La misión de persuasión del gobierno no será fácil, dado el contexto previo.

Hasta ahora los hechos contrastan con los dichos.

Comenzando con el proceso acelerado y tropezado para la aprobación de la Reforma Judicial y el resto de las reformas para concretarla.

La contra reforma energética, con la que se elimina el concepto de empresas productivas del Estado para devolverles el carácter de empresas públicas y darles prioridad, sobre los privados.

Y la reforma, todavía pendiente, que busca desaparecer a los órganos autónomos.

El nuevo sexenio heredó un elevado déficit fiscal del 6% y tendrá que realizar un severo ajuste fiscal de entre el 3 y 3.5%.

Y para lograrlo, necesita aumentar la tasa de crecimiento económico.

Este objetivo se ve más difícil, por la desaceleración económica con la que está cerrando el año y la que se proyecta para el siguiente 2025.

El sector público no puede solo y la iniciativa privada necesita reglas claras de parte del gobierno.

La incertidumbre existente ha provocado que un número importante de inversiones estén en lo que se puede entender como “modo pausa” hasta conocer las nuevas reglas.

Con el cambio de gobierno que lleva apenas unos días desde el pasado 1 de octubre, México está frente a una gran oportunidad. Veremos si el nuevo camino ofrece mayor apertura a la inversión privada nacional e internacional. Al tiempo.