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Política

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Agroproductores padecen año más seco desde 1957; demandan seguridad y más infraestructura hidráulica

No es posible “seguir pateando el bote” que representa la inversión en infraestructura hidráulica en el sector primario, señala el presidente del CNA, Juan Cortina Gallardo, durante el lanzamiento de la iniciativa #pornuestrocampo.

Ramos Arizpe, Coahuila. Foto: Cuartoscuro

Es urgente incrementar la inversión en infraestructura hidráulica para el campo y atacar la inseguridad que padecen los productores del sector rural en el país, plantearon dirigentes de productores agropecuarios, durante el lanzamiento del movimiento #pornuestrocampo.

Juan Cortina Gallardo, presidente del Consejo Nacional Agropecuario (CNA), dijo que no podemos “seguir pateando el bote” que representa la inversión en infraestructura hidráulica en el sector primario, porque se trata de un elemento vital para garantizar la producción de alimentos que el país requiere, para su consumo y para continuar siendo un exportador importante en el sector.

México padece el año más seco, desde 1957, lo que ha ocasionado que el nivel promedio de almacenamiento de las principales presas se encuentre en alrededor de 42%, mientras que 78% de los municipios rurales presenten algún nivel de sequía o sequía grave.

Sin embargo, dijo que, con todo y que México se está volviendo más seco, en el país existe suficiente agua como para mantener la producción de alimentos. El problema, recalcó, es que no se han realizado las inversiones necesarias en la infraestructura hidráulica.

“Desgraciadamente postergamos este tipo de decisiones, como sucedió en Nuevo León, donde hace algunos meses la zona metropolitana de Monterrey vivió un severo problema de desabasto de agua y, hasta que explotó la crisis, fue cuando se decidió comenzar a realizar las obras necesarias”.

Insistió en que, a pesar de que se trata de un problema crítico en muchas zonas del país, 85% de las plantas tratadoras de aguas negras no funcionan, lo cual no permite aprovechar volúmenes importantes de agua tratada en el campo y en ciudades.

En este tenor, recalcó que uno de los sectores que está resintiendo el problema es el subsector azucarero, de producción de maíz, entre otros.

“Es un problema que no podemos estar postergando; se le tiene que entrar de frente; se le tiene que dedicar presupuestos, tanto de los productores, como del gobierno federal y de los estados, para ir solucionando el problema”, mencionó.

Inseguridad, pone en riesgo traslado de alimentos 

Gerardo García, presidente de la Confederación Nacional de Productores de Papa (Conapapa), pidió poner atención a los graves problemas de inseguridad que padecen los productores primarios del país y que hoy ponen en riesgo el traslado de los productos del campo a los centros de consumo.

Ejemplificó la situación que enfrentan los productores de aguacate y limón en Michoacán, quienes son extorsionados por grupos de la delincuencia organizada, para poder sacar sus productos al mercado.

“Esto es algo que aqueja a todo el sector agroalimentario mexicano, el cual se ha venido incrementando. Los productores están temerosos de circular a ciertos horarios por las terracerías y brechas de los lugares donde sembramos y si se manda por camión, la preocupación es que padezcan robos en el camino”.

Dijo que se trata de un problema que requiere de un apoyo integral en el que intervengan la sociedad y las distintas instancias de Gobierno.

Al respecto, Juan Cortina Collado dijo que, si bien el Gobierno federal opera diferentes programas sociales en el sector rural, el problema es que no se sabe cuál es su impacto real. 

Sostuvo que el programa Sembrando Vida, a pesar de los miles de millones de pesos que se han dedicado a ese instrumento, no ha presentado un análisis que refleje cuáles son sus impactos.

“Como sociedad le estamos invirtiendo una gran cantidad de dinero a ciertas políticas públicas, a las que se les debe dar seguimiento, como se hace en cualquier empresa, para saber si la inversión que se está haciendo tiene el retorno y el resultado que se esperaba y, si no, enmendar el camino”, comentó.

A su vez, Margoth Hernández, gerente de la Asociación de Plataneros del Soconusco, en Chiapas, se manifestó por diseñar e implementar políticas públicas que fortalezcan el sector primario en su conjunto, como explorar formas de transporte que pudieran ser más eficientes en ciertos mercados, como transporte por vía marítima.

En tanto, Georgina Gutiérrez, integrante de la fundación Global Farmer Network y productora de lácteos, se manifestó por colocar a los productores agropecuarios en el centro de la discusión de políticas públicas que permitan garantizar la producción de los alimentos que México requiere.

Comentó que hay quienes dicen que los zapatos en la alfombra no le pueden decir a las botas en la tierra, lo que tenemos que hacer en el campo. Sin embargo, lo que tendríamos que hacer es que quienes calzan zapatos y quienes calzan botas, trabajen juntos para buscar un futuro mejor para la producción de alimento.

Periodista mexicano, originario de Amealco, Hidalgo. Editor del suplemento Los Políticos de El Economista. Estudié Sociología Política en la Universidad Autónoma Metropolitana. En tres ocasiones he ganado el Premio Nacional de Periodismo La Pluma de Plata que entrega el gobierno federal. También fui reconocido con el Premio Canadá a Voces que otorga la Comisión Canadiense de Turismo, así como otros que otorgan los gobiernos de Estados Unidos y Perú.

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