Ahora tuvimos que negociar para ayudar: Topos Azteca

El pasado 19 de septiembre, Héctor Méndez, presidente de Topos Azteca, y su equipo estaban comiendo tacos de canasta en el Zócalo de la Ciudad de México. Ese desayuno era el premio por haber asistido al simulacro en conmemoración al sismo de 1985. Entonces sintieron que la tierra volvía a moverse.

La alerta sísmica sonó casi al mismo tiempo que la tierra se sacudió. El Chino Méndez y su equipo condujeron a quienes pudieron hacia la recién remodelada plancha del Zócalo. Ahí resistieron el temblor de 7.1 grados que otra vez sucedía un 19 de septiembre. Instantes después, se enfilaron al Colegio Enrique Rébsamen, que se había colapsado.

A diferencia de su primera incursión hace 32 años, hoy hay una nueva generación de Topos que se ha educado continuamente para responder profesional y técnicamente a la emergencia. Lo que 32 años no cambiaron fue la actitud de servicio y solidaridad de este equipo que ha recorrido el mundo enseñando a otros cómo rescatar víctimas de desastres, relata.

La otra diferencia es que ahora, para ingresar a la zona de desastre, tuvieron primero que negociar con la autoridad que ya se encontraba en el sitio a donde acudieron a ofrecer su ayuda, igual que lo hicieron otros grupos que también se denominan Topos, porque en México hay al menos tres organizaciones y no trabajan coordinados.

?¿Usted ve una distinción en la forma en que tanto autoridades como la sociedad civil trabajaron en el sismo de 1985 y cómo se está haciendo en el 2017?

?Sí, en el 85 era otra situación, otra generación, fue una devastación generalizada. Ahora son unos 40 edificios y están ahí también el Ejército, la Marina, la Policía Federal y la Gendarmería, pero al mismo tiempo la juventud

En el 85, tomamos control, en ese entonces, en el edificio Nuevo León de Tlatelolco, llegó a trabajar el Ejército con el cuerpo de Policía Militar y de Paracaidistas, pero no tenían el control, el control lo teníamos nosotros, los civiles, nosotros controlábamos las máquinas de Pemex, nosotros controlábamos el rescate, nosotros controlábamos la recuperación en Tlatelolco.

Ahora está siendo más protagónico el Ejército, la Marina, Policía Federal y Gendarmería. ¿Qué quiere decir eso? Bueno, pues que tiene una cobertura más amplia, pero me gustaría que con esa cobertura tan amplia tuvieran gente muy capacitada, porque los grupos que llevaron a Saratoga no hicieron nada.

Hoy que nosotros llegamos, pudimos negociar con la representante de la Secretaría de Gobierno que no dejaba entrar a la gente. Nos dejaron entrar a tres, posteriormente ya éramos ocho Topos adentro, pedí una hora para hacer la evaluación y recuperamos el cuerpo de una persona en dos horas y media.

?¿Cómo se preparan los Topos Azteca para trabajar en los desastres?

?En primer lugar hay que tener una actitud solidaria de voluntario; en segundo lugar, si eres paramédico ya es un plus, si eres médico o ingeniero eso ya es algo adicional.

Cuando no hay desastre, hay que acudir a tomar cursos durante varios meses. Damos cursos en varias partes de la República, de tres días o de cinco días en fines de semana, y cuando el tiempo termina, después de cinco cursos y vemos que ya tiene capacidad, le damos su uniforme, les leemos el código de los Topos que es: No hay padre, no hay madre, no hay noche, no hay día, no hay frío, no hay calor, no hay hambre, no hay sed, no hay remuneración porque hacemos el trabajo altruista a los demás en nombre de nuestro padre , y el color naranja es el color del desprendimiento a lo material, de la aceptación a la muerte y abandono del ego y del desarrollo espiritual, eso es el código de Topos, eso es lo que nos rige.

?¿Cómo se financia Topos Azteca?

?Ahorita Scientology nos está financiando; si llega mi gente de provincia y no tienen cómo regresarse, aquí van a tener cómo.

Ahorita íbamos a comprar unos colchones para que duerma la gente y hablamos a Chedraui para preguntar los precios, pero no nos los vendió, nos los regaló; el Hotel Fiesta Inn que está aquí, sobre la calle Balderas, nos dio autorización para que vayamos a bañarnos en grupos, nos va a dar desayuno, así funciona la sociedad mexicana. La cantidad de herramientas llegan de las diferentes entidades, de los organismos, de las empresas.

Nuestra organización de Topos Azteca no publica los números de cuenta, esa muletilla de que quieres ayudar, ayúdame , eso es de gente sinvergüenza que es oportunista, ahorita con este gran desastre ya empezaron a tuitear y a pedir dinero los Topos de Tlatelolco, liderados por Rafael López López, cuyo origen es de niño de la calle del 85 y nunca se quitó este estigma.

Roberto Hernández Alarcón de Topos México, que en el 85 agarró un cheque que dio el presidente Miguel de la Madrid; 50 plazas que dio el gobierno del DF para los Topos y estuvo lucrando para beneficio personal.

El que nace pa’ maceta, no pasa del corredor .

?¿En qué lugares del mundo ha apoyado Topos Azteca?

?Hemos ido a Japón, Nueva Zelanda, Italia, Egipto, Marruecos, Nepal, India, Turquía, Venezuela, Colombia, Perú, Argentina, Bolivia, Estados Unidos, Haití.

Toda esta gente que está ahora, no son de aquí, hay de otros países y de todo México, vienen de Durango, de

Oaxaca, de Coahuila, de Guanajuato, de Tamaulipas, de Jalisco, de Sonora, toda esta gente viene de todo el país a ser solidarios.

Éstos son los Topos, éste es el fruto de lo que hemos sembrado: toda esta solidaridad.

De perfil

Héctor Méndez

• Nació en la Ciudad de México, en 1947.
• Estudió Contabilidad en la Facultad de Comercio de la Universidad Nacional Autónoma de México.

Se ha desempeñado como:

• Rescatista voluntario.

Esfuerzos divididos

En México operan de manera independiente tres organizaciones que se autodenominan Topos, expertos en rescate de personas de entre edificios colapsados: ToposTlatelolco, Topos México y Topos Azteca. El primero es liderado por Rafael López López ; el segundo por Roberto Hernández Alarcón y el tercero por Héctor Méndez.

Una de las diferencias principales entre estos grupos es la forma en la que se financian para realizar su labor.

Los Topos surgió como una expresión de la organización que demostró la sociedad civil para afrontar la crisis derivada del terremoto de 1985 en México.

Actualmente no existe coordinación entre ellos.

También ayudan topos extranjeros

En los dos días posteriores al sismo del 19 de septiembre de este año, llegaron a México grupos de Topos procedentes de países como Japón, Turquía y Perú.

alejandra.ayala@eleconomista.mx