Buscar
Política

Lectura 3:00 min

El 97% de concesiones carecen de medidor

Durante la época de sequía o estiaje la oferta de agua disminuye, no obstante, la demanda se mantiene estática para todos los sectores durante el año.

Foto EE: Archivo

El Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) dio a conocer que existe una ausencia en la regulación y vigilancia sobre los volúmenes máximos de agua superficial y subterránea autorizados en México.

De acuerdo con el IMCO, la autorización del uso de agua, el cual es otorgado mediante de una concesión, no está basada en la capacidad máxima de renovación del agua de los acuíferos o de las aguas superficiales.

Lo anterior significaría que hay un riesgo latente de sobreexplotación por parte de los dueños, ya que esta capacidad máxima, también llamada disponibilidad, puede variar a través de los años, debido al cambio de temperatura y de las precipitaciones, sin embargo, estas variaciones no se reflejan en la asignación de los títulos de concesión.

En el documento elaborado por la ONG titulado “Modernizar la regulación de aguas en México” se explicó que durante la época de sequía o estiaje la oferta de agua disminuye, no obstante, la demanda se mantiene estática para todos los sectores durante el año. La agricultura y el abastecimiento público son los sectores más afectados.

“En la práctica, las decisiones relativas a los pozos individuales son ejercidas principalmente por los propietarios de la tierra y frecuentemente los gobiernos no son capaces de cuantificar, asignar y regular la extracción y el uso de las aguas subterráneas de forma eficiente, especialmente si sus recursos financieros son insuficientes”.

Datos revelan que hasta febrero pasado se tenía un registro de 525,572 títulos de concesión. De estos, un poco más de la mitad (54%) datan de los años noventa.

El año con mayor otorgamiento de concesiones es 1999 con 123,600 títulos. El sector agropecuario registra el mayor número de títulos, más de la mitad de ellos (56%).

Sin verificar

Bajo este contexto, el IMCO señaló que 97% (509,804) de los títulos de concesión registrados el Registro Público de Derechos de Agua (REPDA) no tiene medidor y también 93% (488781) no han sido verificados.

Por lo anterior, sostiene el instituto, el uso desmedido y las tomas clandestinas se hayan vuelto una práctica común en nuestro país.

La suma de la poca vigilancia y falta de medición genera malas prácticas entre los usuarios. Como ejemplo, son el uso de un volumen mayor al concesionado, el traspaso del título de concesión a otros usuarios sin aviso, o el cambio del uso sin la actualización respectiva del título, es decir, sin notificar a la autoridad.

El IMCO propone ajustar los volúmenes abiertos a concesionar para extracción de agua superficial o subterránea a través de las políticas de la Conagua y el Congreso de la Unión, de modo que se ajusten a la disponibilidad anual ambientalmente.

“Las extracciones de fuentes subterráneas no deben superar los volúmenes de recarga, mientras que para las superficiales no deben superar el agua superficial renovable neta de los requerimientos ambientales.

ivan.rodriguez@eleconomista.mx

Únete infórmate descubre

Suscríbete a nuestros
Newsletters

Ve a nuestros Newslettersregístrate aquí

Últimas noticias

Noticias Recomendadas