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Jefe de la PF, acusado de nexos con el narco
Un exenlace mexicano de alto nivel con la agencia antidrogas estadounidense es procesado en EU por -presuntamente- pasar información al cártel de las drogas de los hermanos Beltrán Leyva durante al menos siete años, a cambio de millones de dólares.
Un exenlace mexicano de alto nivel con la agencia antidrogas estadounidense (DEA, por su sigla en inglés) es procesado en EU por -presuntamente- pasar información al cártel de las drogas de los hermanos Beltrán Leyva durante al menos siete años, a cambio de millones de dólares.
Iván Reyes Arzate, quien se entregó a las autoridades estadounidenses en Chicago, EU, era el comandante de una unidad de inteligencia especial que compartía información tanto con la DEA como con el Departamento de Justicia de Estados Unidos, según la acusación revelada por una Corte de Distrito en Illinois.
Horas antes de que dicha Corte informara del proceso contra Reyes Arzate, el comisionado de la Policía Federal (PF) de México, Manelich Castilla, informó del caso pero sin especificar el nombre ni cargo del mismo.
Castilla sólo dijo que el expolicía fue separado de su cargo en noviembre y que se entregó recientemente a las autoridades estadounidenses en Chicago.
La acusación en EU va, sin embargo, mucho más allá. Detalla que Reyes Arzate, de 45 años, lideró durante varios años una unidad de investigaciones especiales de la Policía Federal y, como jefe de la misma, era el principal enlace de información con las autoridades estadounidenses.
Según un expolicía federal que pidió el anonimato, porque ya no forma parte de ese cuerpo, Reyes Arzate estaba en el tercer nivel de mando de dicha corporación.
Sin embargo, trabajó también para el cártel de los Beltrán al menos desde el 2009, ya que la acusación asegura que mantuvo encuentros directos con su líder, Arturo Beltrán, y este capo murió abatido por las fuerzas federales mexicanas en diciembre de ese año.
Las unidades especiales -sensitive investigative units (SIU)- surgieron en los años 90 para tener grupos de plena confianza con los que Estados Unidos pudiera intercambiar la información más delicada.
Por ese motivo, sus mandos eran entrenados e investigados previamente por los estadounidenses, quienes además se encargaban de los controles de confianza y exámenes del polígrafo. No obstante, según la acusación, algunos comandantes sénior de esas unidades quedaron exentos de tales pruebas.
Reyes Arzate era un funcionario con acceso a información confidencial y delicada de la lucha contra el crimen organizado que supervisó operaciones que conllevaron numerosas detenciones, incluidas las de múltiples miembros del Cártel de Sinaloa acusados en este distrito , dice la acusación en la Unión Americana, sin especificar más detalles.
Cadena perpetua al Mochomo
El narcotraficante mexicano Alfredo Beltrán Leyva, alias el Mochomo, fue sentenciado en Washington a cadena perpetua por las acusaciones de conspirar para distribuir cocaína y metanfetaminas.
En una audiencia ante la Corte Federal del Distrito de Columbia, Beltrán Leyva escuchó su sentencia sin inmutarse, luego de haber pedido misericordia al juez Richard J. León. Le pido misericordia y que me permita regresar con mi familia , imploró en español el narcotraficante.
Beltrán Leyva, de 46 años, fue arrestado en el 2008 en Culiacán, en Sinaloa, por elementos del Ejército mexicano, y extraditado por México a Estados Unidos en noviembre del 2014.
Cooperación antinarco
La situación complicada en cuestión migratoria con EU no ha afectado la cooperación en combate al narcotráfico; ahora que la Marina asuma a partir del 17 de junio la seguridad de puertos y terminales marítimas del país, se espera incrementar el decomiso de drogas procedentes de América Central, previó el secretario Vidal Francisco Soberón Sanz.
En mensaje a medios, el titular de la Secretaría de Marina recordó que el año pasado el decomiso de drogas por esa institución arrojó cifras históricas en los primeros siete meses del 2016, cuando se incautaron 1,822 kilogramos de cocaína, 41% más que los primeros tres años de la actual administración. (Con información de R. Torres)