Las brigadas que se organizan en Twitter y Facebook

Miguel Ángel, Arturo y Fabricio son tres amigos de preparatoria que atendieron una convocatoria en Facebook para crear sus propias brigadas de voluntarios.

Con una pala y algo de comida en sus mochilas, desde las 8 de la mañana recorrieron tres de las 45 zonas de derrumbes de edificios en la Ciudad de México, pero en ninguno pudieron participar en las labores de rescate de víctimas, su principal objetivo.

Dinero no tenemos, pero queremos ayudar a quitar todos esos escombros. Fuimos a Álvaro Obregón y ya están completos; luego fuimos a Petén y nos pidieron que esperáramos dos horas para hacer el relevo, pero hay mucha gente , cuenta Arturo, quien junto con sus amigos acudió también al edificio de la colonia Lindavista donde trataron de ayudar, pero ni siquiera pudieron pasar el primer filtro que instalaron vecinos y personal de la delegación Gustavo A. Madero.

Como estos tres chicos, cientos de jóvenes más crearon en Facebook y Twitter sus propias brigadas. Fijaron un punto de encuentro muy temprano, y de ahí partieron a alguna de las 45 zonas de afectación. Fue recurrente ver a grupos de chicos de entre 15 y 25 años tratando de ayudar en las cadenas humanas para recibir víveres y medicinas donados.

Tenía muchas ganas de ayudar. Vi en televisión todos esos edificios demolidos y pensé: ¡pudieron ser mi familia! En mi casa me dijeron que me quedara. Lo más que pudimos hacer fue integrarnos a las vallas humanas, pero ya hay mucha gente , relató Fabricio, de 22 años.

En las calles aledañas a Coquimbo y Sierra Vista en la colonia Lindavista, donde un edificio colapsó por el sismo, cientos de personas, niños, jóvenes y familias enteras se volcaron a entregar ayuda: tamales, tortas, agua, fruta, medicinas, galletas, atún y comida preparada.

Con 200 pesos que tenía previsto destinar para sus traslados de esta semana al colegio, el joven Alexis Morales compró en una farmacia de la periferia algunos medicamentos, y los entrego en el módulo de coordinación que instaló la delegación. Ojalá que ayuden a alguien a aliviar su cuerpo y también su corazón , dijo.