Pacto topará con temas energético y fiscal

Durante el proceso electoral de las elecciones del 7 de julio, los partidos Acción Nacional y de la Revolución Democrática pusieron en duda la continuidad del Pacto por México, debido a que argumentaban irregularidades; sin embargo, el Centro de Investigación para el Desarrollo AC (CIDAC) afirma que la agenda de reformas que contempla este acuerdo continuará en la misma línea hasta que se presenten las iniciativas que potencialmente dividirán a parte de los miembros, es decir, la energética y fiscal.

Durante la campaña de las elecciones estatales, los partidos políticos se acusaban mutuamente de cometer diversos actos ilícitos; desde la compra del voto hasta ataques contra candidatos. A decir de esta organización dirigida por Luis Rubio, este tipo de irregularidades evidencian la poca disposición que mostraron los partidos para cumplir la adenda del Pacto por México, donde se habían comprometido a tener unas elecciones con limpieza, sin que se usaran programas sociales o se desviaran recursos públicos a las campañas proselitistas.

Lo sucedido durante las elecciones y sus resultados no determinará la continuidad del Pacto por México, pero tampoco este acuerdo decidirá la aprobación de las reformas que faltan. Ello, a decir de CIDAC, se explica debido a que el Pacto por México es un instrumento diseñado por el gobierno federal para facilitar la negociación de varias reformas con los partidos de oposición, pero que no existiría si los dirigentes de estos últimos no obtuvieran beneficios en él .

En este sentido, este think thank agrega que debido a la afinidad entre el tricolor y el blanquiazul, la ruptura eventual del Pacto no sería el factor que impedirá que se saquen adelante estas reformas.

Sumado a ello, los comicios del 7 de julio no revelaron un saldo negativo para las fuerzas políticas. Hasta el momento, ningún partido puede clamar un triunfo absoluto y nadie salió absolutamente derrotado, condiciones ideales para que el acuerdo prosiga, según este conglomerado de investigadores.

Destaca que, las elecciones locales renovaron las legislaturas locales y un Gobernador, pero no cambiaron el Congreso federal, donde se discuten las grandes reformas.

ana.langner@eleconomista.mx