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Política

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Quitan el poder del DF a Bejarano

Tras su consejo estatal, las corrientes hegemónicas del PRD se quedaron con más de la mitad de las candidaturas a las delegaciones y diputaciones.

Por segunda ocasión, la corriente Izquierda Democrática Nacional (de René Bejarano) quedó desdibujada de las candidaturas a las jefaturas delegacionales y diputaciones locales. Las corrientes que mantienen la fuerza en el partido son Nueva Izquierda (Chuchos) y Vanguardia Progresista (Miguel Ángel Mancera),ya que entre ambas se quedaron con más de la mitad de las candidaturas a las delegaciones.

En la realización del consejo estatal, estas corrientes se quedaron con la mayoría de las candidaturas a diputaciones locales: 24 entre las dos corrientes de expresión.

Izquierda Democrática Nacional (IDN) pretendía cinco candidaturas, en igual cantidad de delegaciones, sin embargo, sólo le otorgaron tres, dos de ellas en donde el partido es competitivo (Alvaro Obregón y Azcapotzalco) y una considerada de riesgo (Benito Juárez).

Desde el sábado, IDN sufrió los embates, pues Alejandro Fernández, jefe delegacional en Cuauhtémoc con licencia, se sumó a Vanguardia Progresista y sus consejeros dejaron a IDN y se sumaron al bloque de Mancera.

Bejarano acusó al jefe de Gobierno de entrometerse -sin ser militante del partido- en el proceso electivo, pues el único objetivo que lo motivó fue fortalecer su corriente.

La madrugada del domingo, las especulaciones eran diversas, pues incluían y descartaban nombres. Las especulaciones fortalecían al bloque del jefe de Gobierno, pues se dijo, ofrecían hasta la coordinación de la Comisión de Gobierno y ésta la querían Leonel Luna y Víctor Hugo Lobo.

Se acusó que las corrientes de Nueva Izquierda, Vanguardia Progresista, ADN y Foro Nuevo Sol se reunieron para acodar las listas de candidatos, dejando fuera a IDN.

La corriente bejaranista bajó de la candidatura a Laura Velázquez y en su lugar colocó a Antonio Padierna, hermano de Dolores Padierna.

El dato

El INE debe ser capaz de contener los intereses particulares o de grupo y los partidos tienen que ser catalizadores de la participación ciudadana y no máquinas controladas por burocracias, consideró el presidente del Senado, Miguel Barbosa.

En medio de la confrontación que tiene el INE con los partidos, Barbosa opinó que este órgano debe ser independiente y capaz de garantizar los principios que establece la Constitución mientras que los partidos no deben debilitar aún más a las instituciones mexicanas, pues los candidatos (...) serán sólo el rostro de la grave crisis que atraviesan los partidos.

Los candidatos que lleguen a puestos de elección popular, sin importar (...) partido contarán con poca legitimidad para llevar a cabo los cambios legales tan necesarios para restablecer la confianza de la ciudadanía , dijo. (Con información de Tania Rosas)

jose.reyes@eleconomista.mx

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