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Sector Financiero

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Los proyectos crypto deben generar puentes con la economía digital: Belo

Belo fue la primera compañía argentina en entrar al programa de tarjetas crypto de MasterCard. Su director ejecutivo, Manuel Beaudroit, confía en que el mercado de las criptomonedas se va a recuperar: el plan es “vivir en crypto todos los días”, dijo.

Manuel Beaudroti, CEO de Belo. Foto: Especial

Los precios de los criptoactivos no pasan su mejor momento. Aunque han recuperado terreno progresivamente, como lo han hecho otros activos considerados de riesgo, todavía siguen lejos de sus tiempos de gloria: antes de que una ola de quiebras y de escándalos mermaran el valor de este mercado.

A pesar de que tantos inversionistas —sobre todo minoristas— perdieron los ahorros de sus vidas por errores o malas gestiones en algunas empresas, los entusiastas del mercado crypto siguen creyendo en el potencial que tiene esta tecnología, que se extiende paso por paso con proyectos en todo el mundo.

Uno de estos entusiastas fieles al ideal de las criptomonedas es Manuel Beaudroit, CEO de Belo, que es reconocida por haberse convertido en la primera compañía argentina en entrar al programa de tarjetas crypto de MasterCard. Él platicó con El Economista y habló de la nueva etapa para los pagos con criptomonedas.

Soluciones crypto

Belo es una billetera digital que permite a sus usuarios moverse entre pesos argentinos y criptomonedas. Tiene el objetivo de hacer de los pagos con criptodivisas una experiencia cotidiana. Para Beaudroit este aspecto debe ser prioridad para los criptoproyectos si a lo que se aspira es a “vivir en crypto todos los días”.

Para Belo, las empresas de pagos con criptodivisas deberían aspirar a ser un puente entre los activos digitales y las necesidades de los usuarios. “Nosotros vamos desarrollando los productos para que más personas puedan resolver problemas cotidianos con este tipo de activos y con su tecnología”, explicó Beaudroit.

De la mano con Tapi (un proveedor de servicios de pago que antes sumó a su esfuerzo de brindar recargas de telefonía móvil), Belo lanzó a principios de febrero una nueva función que permite a sus usuarios realizar el pago de servicios como el agua o la electricidad. La opción ya está abierta para 40,000 usuarios.

Barreras y puentes

Aunque espera que pronto más usuarios tengan acceso a este beneficio y que los pagos de servicios con criptomonedas sean cada día más comunes en todo el mundo, reconoce que existen obstáculos para que esto suceda. Uno de los más importantes es la adopción de la tecnología y, a veces, la falta de opciones.

“El entorno de pagos con criptomonedas dista bastante de ser perfecto cuando uno piensa en un mundo ‘hiperbitcoinizado’ en el que todo el mundo pueda pagar con cripto. Para que eso suceda falta mucho. Pero, lo más importante no es la tecnología, sino cómo construir soluciones para los problemas de la gente”.

“Naturalmente, una gran porción de nuestros usuarios es de nativos cripto. Esta economía sabemos que es global y vienen avanzando de la mano de estas personas, pero hay usuarios de todos los rangos de edades. Todos ellos necesitan de un puente que permita conectar dos mundos, provocando que esto crezca”, dijo.

Vivir en crypto

Beaudroit afirmó que existe un segmento creciente de la población mundial que es nativa digital y quiere que su moneda por defecto sea una criptodivisa (o incluso ya lo es), por lo que necesita de soluciones a sus necesidades. “Por eso, al ofrecer pagos de servicios con criptomonedas estamos generando valor”.

“Los criptoactivos tienen muchas ventajas: permiten hacer pagos internacionales de una manera sencilla, económica y amigable. Por esto está creciendo su uso. Al permitir pagos de servicios los usuarios evitan enfrentarse a múltiples proveedores. De esta manera ellos pueden vivir en crypto todos los días”, dijo.

Momento Kodak

Ante rechazo que la banca tradicional suele mostrar sobre las criptomonedas, el CEO de Belo destacó que cada día es mayor la apertura de los bancos hacia el mercado cripto, lo que los ha llevado a lanzar propuestas que no cumplen con esta ideología, pero que son aportes hacia la adopción de las criptomonedas.

“En siglos de existencia los bancos no han tenido competencia, excepto por sí mismos. Recientemente esto cambio con los bancos digitales. De alguna forma, puede que esten viviendo su momento Kodak. Por eso en algunos ya puedes comprar Bitcoin o Ether, y ellos los resguardan por el usuario”, dijo.

Estas ofertas de los bancos, añadió, no cumplen con los ideales de Bitcoin y no pueden considerarse proyectos del entorno crypto en el sentido completo del término, porque el usuario no puede tener acceso a sus activos. Pero aportan a que cada vez más personas puedan integrarse a la economía digital.

Seguridad ante un mayor interés

Ante los desplomes registrados el año pasado en los precios de las criptodivisas y las quiebras de grandes compañías del sector, Beaudroit hizo hincapié en la necesidad de actuar con prudencia y en favor del usuario, y en estudiar cuidadosamente con cuáles criptomonedas va a operar cada proyecto.

En Argentina 16% de la población ha comprado criptoactivos y 34% piensa hacerlo, de acuerdo con un estudio de la compañía IMS, de Aleph. Por esto Belo se abrió al pago de más de 9,000 servicios. Beaudroit recalcó la necesidad de cuidar el que para muchas personas es su primer acercamiento a crypto.

jose.rivera@eleconomista.mx

Analista de mercados

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