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Tancítaro, territorio sin ley otra vez
El municipio del que hace 10 meses huyeron todas las autoridades por amenazas del crimen organizado, otra vez está en medio de la incertidumbre por el asesinato de Gustavo Sánchez.
La extraña muerte del presidente municipal de Tancítaro, Michoacán, Gustavo Sánchez Cervantes y su consejero ciudadano de asuntos agropecuarios, Rafael Equihua, elevó ayer a 11 el número de alcaldes asesinados este año; sin embargo, hay que sumar la agresión al munícipe electo de Gran Morelos, Chihuahua, Ricardo Solís Martínez, quien tras sufrir un atentado el viernes pasado se debate entre la vida y la muerte.
Gustavo Sánchez fue asesinado ayer alrededor de las 10:30 de la mañana. Él y su acompañante fueron asesinados aparentemente con sendas rocas de más de 25 kilogramos; sin embargo, aún faltan las autopsias para determinar si fue ésa u otra la causa de su muerte.
Si se contabiliza a los presidentes municipales asesinados con huellas del crimen organizado o narcotráfico del 2008, dos años después que asumiera el cargo como Presidente de la República Felipe Calderón, a la fecha son 18, según los reportes de las Procuradurías General de la República (PGR) y Generales de Justicia.
El último es Sánchez Cervantes, quien apenas tenía nueve meses en el cargo que asumió tras la renuncia de su antecesor Trinidad Meza Sánchez, el Síndico, siete regidores y la policía municipal, ante amenazas del crimen organizado.
Hasta el momento la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) de Michoacán no justifica el crimen de Sánchez Cervantes como obra del crimen organizado, empero, no se descarta esto luego del hallazgo de los cuerpos ayer.
Las primeras pesquisas exponen que Sánchez Cervantes fue localizado en la carretera Uruapan-Los Reyes junto a Equihua, dentro de su camioneta Ford placas MZ0-3578, con los ojos vendados y golpes contusos provocados con rocas.
El difícil entorno
El 4 de diciembre del 2009, renunciaron todas las autoridades municipales de Tancítaro ante la falta de condiciones para desarrollar su trabajo. Durante más de una semana el municipio vivió acéfalo. Se habló entonces de tomar una decisión que no ha ocurrido en México en su época moderna: declarar la desaparición de poderes, pues ningún otro funcionario aceptaba asumir el cargo.
Después de 10 días de incertidumbre, el Congreso del estado nombró el 11 de diciembre un Consejo Municipal encabezado por Gustavo Sánchez, y fue instalado sin la presencia del gobernador Leonel Godoy; en su representación fue el secretario de Gobierno Fidel Calderón, que a nombre del gobierno dijo que el gobierno del estado lo apoyaría para recuperar el municipio y garantizar su seguridad. Ayer, 10 meses después, Gustavo Sánchez fue asesinado.
Éste es el tercer ataque contra presidentes municipales del jueves a la fecha. El jueves pasado por la noche fue asesinado Prisciliano Rodríguez Salinas, quien estaba a cargo del municipio de Doctor González, en Nuevo León.
El viernes se registró el atentado que mantiene entre la vida y la muerte al alcalde electo del municipio Gran Morelos en Chihuahua, Ricardo Solís Martínez, quien precisamente ayer fue trasladado del hospital donde era atendido, a un sitio resguardado por fuerzas federales, estatales y municipales.
Gustavo Sánchez Cervantes, Alcalde de Tancítaro, Michoacán
Era maestro de artes marciales y tenía una vida dedicada al deporte hasta el pasado 11 de diciembre cuando fue nombrado alcalde de Tancítaro. Antes fungía como síndico suplente.
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