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Artesanos en Cumbre Tajín venden muy poco
A pesar de la vasta oferta de artículos de distintas procedencias y de los más variados precios, los visitantes no se animan a comprar.
Papantla, Ver. Desde las regiones indígenas de Chile, como Maule, Aymará y Mapuche, llegaron al Encuentro de Artesanos del Parque Takilhsukut de la cumbre Tajín 2015 cinco mujeres (Mónica, Gabriela, María, Miriam y Rogela) para demostrar sus técnicas artesanales y vender sus creaciones.
Ellas trabajan con la lana, el crin (cabello de la cola del caballo), reda (barro) y madera.
Su presencia en Cumbre Tajín forma parte del intercambio cultural de este festival con otros países de Latinoamérica que tienen comunidades indígenas. En el caso de Chile, fue a través de la División de Asuntos Culturales del Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile, que junto con el gobierno de Veracruz hicieron posible su presencia, pues ellas no pagaron nada de transportación ni hospedaje. Sin embargo, aseguran que las ventas han sido muy bajas y que afortunadamente al menos no han perdido dinero.
Por el intercambio cultural y la experiencia de conocer otras culturas es que estamos muy contentas, es muy bonito conocer otras técnicas, pero en la cuestión económica no nos ha ido muy bien , aseguró Gabriela García, alfarera.
Junto a su compañera Mónica compartió sus técnicas con las artesanas totonacas de Veracruz para pintar de rojo a negro el barro. El proceso de cocimiento de sus piezas tarda entre cuatro y cinco horas (algo que no varía mucho con la técnica totonaca mexicana), pero los elementos que utilizan sí, como la bosta de caballo molida seca para que el color se fije.
Las piezas más buscadas de las artesanas chilenas fueron las que están elaboradas con el crin, cuyo color original es el negro, pero que las artesanas cambian a tonos verdes, azules, cafés e incluso rosas para hacer figuras de animales, aretes, collares, separadores... que iban desde los 100 pesos hasta los 400, por eso pocos visitantes se animaban a adquirirlas.
Las otras artesanías de las chilenas eran cobijas, rebozos y chamarras en el caso de la lana; fruteros, vasijas y vasos hechos en madera y floreros, jarras y platos de barro.
A los nacionales ?tampoco les sale la cuenta
El encuentro artesanal de Cumbre Tajín se nutre además con la presencia de artistas locales o estatales que provienen de estados como Jalisco (huicholes), Guerrero y Estado de México, quienes traen sus hermosas piezas para llegar a más público.
Algunos vienen por primera vez, otros ya tienen una trayectoria, pero coinciden en que las ventas de este 2015 han sido muy flojas.
La gente se conduce por los pasillos del encuentro y pregunta, pero son los menos los que se deciden a comprar.
En un recorrido realizado por esta reportera, los productos que se pueden encontrar van desde las blusas tejidas a mano con seda o de otros tipos de hilos; zapatos o bolsas artesanales, productos de belleza orgánicos, macetas a base de jícaras, lámparas con maderas regionales, adornos de papel que cambian de color con el movimiento; aretes, pulseras, collares, portarretratos, piezas a base de chaquira o hilos muy vistosos; café orgánico; vasijas de madera pintadas a mano con colores que se extraen de distintos tipos de árboles, raíces y hojas, entre otros.
Los precios van, en un amplio abanico, desde los 30 pesos hasta los 4,000.
Los artesanos comentaron que no pagan una cuota por estar en el encuentro, lo que por una parte les favorece porque no han perdido su inversión, pero no han obtenido ganancias.
De acuerdo con ellos, la idea era vender en una semana (del 19 al 23 de marzo) lo que normalmente venden en un mes o más, pero no se ha logrado esa meta. Sin embargo confían que para el cierre del evento, el lunes 23 de marzo, con la presentación de La Maldita Vecindad, Carlos Santana y El Tri las ventas se levanten un poco.
