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Arte e Ideas

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Comparten experiencias para contrarrestar el tráfico ilícito de bienes culturales

Nuestro país es sede de un encuentro regional para compartir casos paradigmáticos sobre acciones contra la especulación del patrimonio cultural y artístico. En México existe una prohibición del siglo XIX que puede ser una herramienta primordial para la recuperación, señalan desde la SRE.

Foto EE: Eric Lugo

Foto EE: Eric Lugo

El tráfico de bienes culturales, arqueológicos o de arte moderno y contemporáneo, es un fenómeno multifacético que tiene implicaciones en los aspectos nacional, penal y cultural.

De acuerdo con reportes de la Unión Europea, el tráfico ilícito de bienes culturales representa el tercer mercado negro más productivo sólo después de las armas y las drogas. El interés del tráfico ilícito de piezas patrimoniales, en particular las arqueológicas, no es por su valor histórico, sino que pondera en el valor monetario y, por lo tanto, es factible que, durante su paso por este mercado soterrado, las piezas pierdan su contexto histórico e incluso sean mutiladas para facilitar su transportación y su venta. Desde esta perspectiva, incluso los acuerdos internacionales en la materia pueden resultar estériles.

Esta es una dimensión del problema al que se enfrenta el mundo y ha sido históricamente solapado por las reminiscencias colonialistas desde ambos lados del Atlántico.

El anterior es el motor central que, del 9 al 11 de mayo, reúne a personas expertas e involucradas en el tema patrimonial de toda América Latina, convocadas en la Ciudad de México para tomar parte de la conferencia regional “El uso de la Lucha contra el lavado de Activos y la Financiación de Terrorismo (ALA/CTF) en la Investigación de la Criminalidad del Arte y las Antigüedades”, organizada por la oficina en la Unión Europea del Sistema Internacional Antilavado de Activos y Contra la Financiación del Terrorismo (EU AML/CFT), en colaboración con la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público y el Grupo de Acción Financiera de Latinoamérica (Gafilat).

Es de destacar la mesa de esta primera jornada: “Experiencia nacional sobre tráfico ilegal de obras de arte relacionado con el BC/FT”, de la que tomó parte Salvador Tinajero Esquivel, consultor jurídico adjunto de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).

“Se suele ocultar el origen verdadero de la pieza y se construye una historia falsa para justificar la adquisición”, señaló el representante de la cancillería. “Para poner un ejemplo, muchas legislaciones europeas establecen la prohibición de vender objetos que entraron en la jurisdicción de esos países posterior a la entrada en vigor de la Convención de la UNESCO de 1970, pero mágicamente aparecen certificados de compra de 1969 en muchas de las casas (de subastas) y nosotros no tenemos forma de rastrear la autenticidad o no de ese certificado”.

México tiene dientes desde 1827

Desde 2019, México ha recuperado 11,505 bienes culturales del extranjero. Los países que más han colaborado en la repatriación de patrimonio mexicano son Estados Unidos, Países Bajos y, paradójicamente, Francia.

Como se ha dado a conocer en diversos foros y a través de este diario, Francia es uno de los países en los que se han dado más casos de subastas de patrimonio extraído de manera ilícita. Esta nación y la nuestra tienen legislaciones dispares en la materia, dado que en esta nación europea basta con demostrar la posesión de un bien por dos años en adelante para que se le reconozca la propiedad. Es decir, la legislación francesa confiere la “buena fe” sobre la posesión de una pieza.

En octubre de 2021, México suscribió el convenio UNIDROIT sobre los Bienes Culturales Robados y Exportados Ilícitamente, firmado en Roma, en junio de 1995. Una de las fortalezas de este instrumento es que faculta al país que requiera la restitución de un patrimonio a actuar con sustento en sus propias leyes y no supeditado a la legislación del país al que se le requiere información sobre el bien.

Al respecto, Salvador Tinajero señaló que, para el caso de México, existe una prohibición que data de 1827 (la Ley para las Aduanas Marítimas y de Fronteras) para la exportación de bienes culturales, lo que, en teoría, debería facilitar la petición de incautación y repatriación de cualquier pieza, prácticamente sin importar la fecha de su certificado.

“Lo que nosotros argumentamos sobre el objeto que se anuncia como de origen mexicano, es que es el propio vendedor el que está señalando el origen de la pieza y, por lo tanto, al haber una prohibición desde 1827, es él quien debe demostrar que la pieza salió legalmente o, en su caso, previo a 1827, donde ya entramos en una discusión histórica”, indicó.

Datos de VAP

11,505 piezas patrimoniales sean recuperado desde 2019

Acciones contra la puja de bienes

En el caso mexicano, las pequeñas piezas de las tumbas de tiro en las zonas arqueológicas suelen ser las más traficadas. En su gran mayoría, son estas piezas las que aparecen en las subastas de las casas especializadas. Hoy en día, según anunció la Cancillería, se logra detener una de cada tres pujas en el extranjero.

Las tres vías de acción desde la SRE

  • Lograr la entrega voluntaria mediante la sensibilización
  • A través de los decomisos por las autoridades aduanales
  • Trabajo para lograr de cancelación de subastas

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