¿De qué trata el proyecto ecológico Lago Texcoco?

Luego de que el presidente Andrés Manuel López Obrador anunciara el pasado 22 de marzo la declaratoria del Área Natural Protegida (ANP) en el Lago de Texcoco también se dio a conocer el avance del proyecto del parque ecológico en esta misma zona. El objetivo es convertir este espacio en la pieza de infraestructura verde más importante del valle,  

Se trata del ANP número 184 y tiene una categoría de Área de Protección de los Recursos Naturales, es decir que su enfoque no solamente es de conservación, sino también de aprovechamiento sustentable, por ello el coordinador del proyecto, Iñaki Echeverría, presentó los avances de lo que ya se anunciaba desde el 2020, el Parque Ecológico del Lago de Texcoco una obra considerada “un paso para proteger y recuperar la ecología del Valle de México”. 

La doctora María del Carmen Gutiérrez Castorena, profesora investigadora del programa de Edafología del Colegio de Posgraduados, reveló que en el fondo del lago de Texcoco, se encontró una máxima profundidad de 70 metros, en los que se han acumulado ciertos sedimentos lacustres (hidrogel hipersalino).

“En su condición natural alcanzó a retener más de 500% de humedad, es decir, que el 80% de ellos es agua (63 metros) y el 20% son sólidos (7 metros) dominados por cationes y aniones que le dan una naturaleza muy especial a sus propiedades químicas, físicas y biológicas, por lo tanto se considera un suelo único en nuestro planeta”. 

Sin embargo, explica que hace 100 años, cuando se decretó el secamiento artificial del lago y comenzó un proceso continuo de pérdida de humedad, esto fue drástico, por lo que comenzaron los hundimientos, agrietamientos, problemas de tolvaneras y se incrementó la salinización, lo que trajo problemas de salud pública. 

¿Qué se está construyendo en el lago de Texcoco?   

El mítico lago de Texcoco fue testigo del nacimiento del imperio azteca y del desarrollo de la gran Tenochtitlan. Texcoco se encontraba en las orillas del lago al oriente de Nochtitlan, cuesta trabajo pensar que alguna vez fue un gran espejo de agua, en donde convivía el pasado prehispánico con la naturaleza, hoy el proyecto del parque intenta el rescate del espacio.  

Tras el reciente decreto, Iñaki Echeverría explicó parte de los usos que tendrán los 12 kilómetros de bordo y terrenos, donde para el 2023 se invertirán 4, 566 millones de pesos para beneficiar a una población de 12.5 millones con equipamiento deportivo cultural, un centro de visitantes y un vivero, sobre esto aseguró que la obra tiene un avance del 25 por ciento.   

De entrada, dijo que el vivero ya está operando y actualmente se reproducen cerca de 20 especies halófilas (organismos que viven en ambientes con presencia de gran cantidad de sales) que generarán cerca de 500 mil plantas mensuales. Los otros elementos que conformarán el proyecto son: 

• Equipamiento deportivo y cultural: Canchas para deportes y recreación: tres multiusos; una de beisbol amateur; entrenamiento; soccer americano; patinaje; basquetbol; un skatepark, una zona de picnic y la novedad será una zona de juego de pelota.  
• Centro de visitantes: Se trata de un edificio de madera que albergará un restaurante, oficinas, un centro de investigación y servicios de educación e investigación ambiental en general. 
• Jardín Central: Este espacio ha sido cubierto con 42.6 hectáreas de especies herbáceas, 3 mil metros cúbicos de especies arbustivas y 429 árboles. 
• Acceso y vialidades: Se rehabilitarán 36 kilómetros para que los visitantes puedan ingresar a las instalaciones y 48 hectáreas de estas zonas cubiertas de plantas. 
• Vivero: Fungirá también como un centro comunitario en el que se darán servicios educativos y también como centro de eventos para las poblaciones cercanas. 

Proyectos hídricos  

• Lago Nabor Carillo: Su recuperación comenzó en el año 2021 con acciones de nivelación de 11.9 kilómetros de bordo y más de 202 metros cúbicos de desazolve, el resultado fueron cerca de 34 hectáreas de islotes para el establecimiento de aves, protegidas de fauna feral de la zona. 
• Ciénega de San Juan: Son cerca de 270 hectáreas de cuerpos de agua. Destinada también a la construcción de 10 miradores de avistamiento de fauna y 10 kilómetros de bordos para la contención de agua, así como senderos para peatones y ciclistas. 
• Cuenca Superior: Con estructuras de control en las lagunas Xalapango y 10 represas para la retención de azolves. Con los locatarios se acordó construir cinco humedales de tratamiento, de los cuales dos ya están empezando su construcción, Tepetlaoxtoc y San Salvador Atenco. 
• Lagunas Xalapango y Texcoco Norte: Este año se ejecutarán obras para la alimentación de cuerpos de agua , reforzamiento y mejoramiento de terracerías. 

En el reporte denominado Ecosistema Nacional Informático, capítulo Rescate del Lago de Texcoco, se explica que en la zona hay una gran diversidad de suelos, 44 en total, cada uno con ciertas particularidades, “lo que lo hace extremadamente heterogéneo”, algunos no se han reportado a nivel internacional, por lo que determinaron que se debe conservar como un “patrimonio edáfico”.  

Gutiérrez Castorena, aseguró que los suelos son de muy mala calidad para cualquier actividad económica por lo que se deben conservar en su estado natural, pues no podemos darnos el lujo de quitarle la humedad a la zona, por ello se tiene que mantener y conservar su función reguladora hídrica, para permitir la fauna silvestre e incrementar la captura de carbono en esos sitios; también su función sería como regulador del clima, si es que el proyecto se concluye con éxito y conforme a lo planteado por los encargados del proyecto.  

nelly.toche@eleconomista.mx