Buscar
Arte e Ideas

Lectura 6:00 min

El calor sí mata gente, y las ciudades son un foco de atención

El escritor Jeff Goodell promueve el diálogo sobre los efectos del calor. “El calor es la amenaza de primer orden que impulsa todos los demás impactos de la crisis climática. Y a medida que aumenta la temperatura, se revelan fallas en nuestros gobiernos, nuestra política, nuestra economía y nuestros valores”, dice en charla con El Economista, a propósito de su libro The Heat Will Kill You First (El calor te matará primero), presentado en la Cumbre California-México 2030.

Foto EE: Cortesía

Foto EE: Cortesía

“Cuando llega el calor, es invisible. No dobla las ramas de los árboles ni te sopla el pelo en la cara para hacerte saber que ha llegado... El sol se siente como el cañón de un arma apuntándote”,

Jeff Goodell, escritor y periodista.

Una ola de calor, explica Jeff Goodell, es un evento depredador que elimina a las personas más vulnerables, pero eso está cambiando, pues a medida que las olas de calor se vuelvan más intensas y comunes, se volverán más democráticas. Este fue uno de los temas que se tocaron durante la celebración del bicentenario de las relaciones diplomáticas entre Estados Unidos y México, donde expertos de los sectores gubernamental, empresarial, académico y organizaciones sin fines de lucro se reunieron en la primera Cumbre California-México 2030; aquí se analizaron los desafíos emergentes en las políticas públicas para diseñar soluciones innovadoras, sostenibles y resistentes al clima.

En este evento presentado por la UC Alianza MX, se exhibieron los proyectos de investigación más actuales que los expertos de la Universidad de California están desarrollando en conjunto con sus colegas mexicanos para ayudar a identificar las brechas de conocimiento ya existentes, también se dieron amplios debates sobre los posibles escenarios.

En este sentido, Jeff Goodell, escritor y periodista que ha cubierto el cambio climático durante más de una década, hoy promueve el diálogo sobre los efectos del calor. Explica que el mundo está despertando a una nueva realidad: los incendios forestales ahora son estacionales en California, el noreste recibe cada vez menos nieve cada invierno y las capas de hielo en el Ártico y la Antártida se están derritiendo rápidamente. “El calor es la amenaza de primer orden que impulsa todos los demás impactos de la crisis climática. Y a medida que aumenta la temperatura, se revelan fallas en nuestros gobiernos, nuestra política, nuestra economía y nuestros valores”.

En entrevista para El Economista, el autor del libro The Heat Will Kill You First (El calor te matará primero) es contundente: “Una de las cosas que tenemos que entender cuando hablamos del calor y del cambio climático, es que estos cambios verdaderamente matan personas, y más de lo que pensamos”. Comparte que ha escrito otros libros sobre el aumento de agua en los océanos, energía, huracanes y en todos esos temas hay grandes implicaciones para las ciudades, la comunidad, las economías, pero aquí estamos hablando de que “el calor mata gente, y todo muere debido al calor”.

Las ciudades como foco de atención

Goodell explica que hoy la mayoría de las personas viven en las ciudades y la emergencia de la que estamos hablando pasa justo ahí, en las grandes urbes, “y esa es la historia, hoy la gente muere más por calor que por otras razones”.

Durante el verano de 2021 en España, por ejemplo, murieron 1,447 personas por causas atribuibles al exceso de temperatura, para 2022 fueron 4,700 personas las que fallecieron por causas relacionadas con el calor. En Estados Unidos, el calor excesivo es la principal causa de muertes relacionadas con el clima, de hecho, las muertes por calor han superado las muertes por huracanes en más de 15 a 1 durante la última década, según los datos del Servicio Meteorológico Nacional.

En México la temperatura en algunos estados llega a rondar los 40 grados centígrados en el horario y temporadas más calurosas, como el verano. En julio de 2022 esta situación de acuerdo con la Secretaría de Salud, registraba 810 casos de golpes de calor, deshidratación y quemaduras. Aunque en México, las cifras mortales no son tan alarmantes como en los países de Europa o el norte del continente, lo cierto es que el clima caluroso en aquel momento ya había cobrado la vida de nueve personas.

Ante este escenario, Goodell asegura que es importante reflexionar sobre la forma en que estamos construyendo las ciudades, especialmente las ciudades modernas, pues “estos lugares vivirán calores mucho más fuertes que los alrededores”.

Comparte que históricamente en muchas ciudades como México habíamos entendido cómo construir casas y mantenerlas frescas de formas naturales, gracias a los materiales que se utilizaban, el número de habitaciones que se construían, el tipo de ventilación y paso del aire, muros de adobe anchos para mantener el calor afuera, la construcción de los pisos frescos, en fin, “la arquitectura tradicional entendía todo eso, pero cuando llegó el aire acondicionado, eso hizo que las ciudades olvidaran los conocimientos ancestrales sobre cómo mantener un lugar urbano fresco”.

Y más allá de eso, la modernidad y específicamente el aire acondicionado, también trajo desigualdad, pues este es un servicio que no todo el mundo puede pagar y no lo tiene para sus casas, entonces las ciudades traen más problemas, las condiciones son adversas, por un lado, ya no se cuenta con formas tradicionales de solventar el problema y tampoco con las nuevas formas de poder estar fresco. “Esto divide a toda sociedad”.

¿Cómo vamos a construir las ciudades del futuro?

¿Cómo solucionar este problema? De acuerdo con Goodell, es algo que no tiene una respuesta absoluta y que se podría estar debatiendo por muchos días, “es un tema muy complicado”, sin embargo, tenemos que empezar a pensar cómo vamos a construir las ciudades del futuro, mitigando el calor y lidiando con la desigualdad. Por ejemplo, cambiando las formas en que construimos las ciudades, plantando más árboles, lugares de sombra, dejando más áreas verdes, menos pavimentadas, es decir, espacios comunitarios donde uno pueda escapar del calor, además de crear esquemas de acceso para los que menos dinero tienen.

Para cerrar la entrevista, enfatiza que el calor es una situación de vida o muerte, pero también tiene implicaciones económicas, “cuando la gente trabaja al aire libre y hace demasiado calor, trabaja más lento o sufre de golpes de calor que los dejan imposibilitados, los accidentes también aumentan, este es solo un ejemplo del impacto económico que se asocia con este fenómeno climático. En Houston, Texas, donde yo vivo, han tenido que modificar ciertos horarios de todos los proyectos de construcción, estos se han tenido que mover a turnos nocturnos debido al calor y eso tiene un alto impacto a nivel social y económico, pues las cosas se adaptan debido al calor, eso ya está sucediendo en nuestro día a día”.

The Heat Will Kill You First estará disponible próximamente en plataformas virtuales.

Únete infórmate descubre

Suscríbete a nuestros
Newsletters

Ve a nuestros Newslettersregístrate aquí

Últimas noticias

Noticias Recomendadas

Suscríbete