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Galería ucraniana que se convirtió en refugio presenta obra en Material

Hace 16 años, los fundadores de Voloshyn acondicionaron un viejo espacio antibombas de la Segunda Guerra Mundial. Lamentablemente, este sitio ha vuelto a ser un lugar de resguardo para sus artistas y sus familias, mientras los galeristas se quedaron varados en Estados Unidos

Galería Voloshyn presenta obras de Lesia Khomenko, Anastasiia Podervianska y Kateryna Lysovenko

viernes 29 de abril de 2022 - 03:38

En diciembre del año pasado, Julia y Max Voloshyn, fundadores 16 años atrás de la Galería Voloshyn, con sede en Kiev, Ucrania, viajaron a Estados Unidos con algunas de sus piezas para participar en un par de ferias de arte, NADA y Untitled Art Fair, ambas en Miami.

En ese contexto, dieron positivo a Covid-19 y tuvieron que permanecer más tiempo de lo previsto en territorio estadounidense, convalecientes y aislados. Desafortunadamente, la invasión de Rusia a Ucrania inició cuando ellos aún se recuperaban y quedaron varados al otro lado del mundo por tiempo indefinido.

Desde entonces no han podido salir de territorio estadounidense y, con el peso de la incertidumbre, han tenido que renunciar, al menos temporalmente, a su vida profesional y personal en Ucrania.

“Curiosamente, la sede de la Galería Voloshyn es un espacio que ellos adaptaron a partir de un refugio contra bombas de la Segunda Guerra Mundial. Ahora la galería volvió a utilizarse como un centro de resguardo, tanto para el equipo que se encuentra en Kiev como para las familias de algunos de los artistas”, relata a este diario Nuria Richards, en el contexto de la Feria de Arte Material que, desde este jueves y hasta el próximo domingo, presenta su octava edición en una nueva sede, el esqueleto de una antigua fábrica textil en la calle de Sabino 369, en la colonia Atlampa.

La Galería Voloshyn fue invitada por la dirección de Material para integrarse sin costo a la selección de 60 galerías nacionales e internacionales de la feria. Fueron tres piezas de Voloshyn las que viajaron a México para presentarse en la feria, las tres, de mujeres: Lesia Khomenko, Anastasiia Podervianska y Kateryna Lysovenko, las tres, con representaciones del cuerpo femenino, dos en acrílico sobre tela y una, la de Podervianska, en arte textil.

“Las tres artistas exploran el tema de la representación hasta el nivel político. Una de las cosas más importantes del booth es seguir apoyando a artistas ucranianos, sobre todo mujeres”, comparte Richards y amplía: “la galería está tratando de enviar la mayor cantidad de recursos a los artistas que están siendo evacuados y a quienes se quedaron en la ciudad. Ahora mismo, las operaciones están dedicadas totalmente a ese respaldo. La venta de las obras va a permitir que los artistas puedan continuar no sólo con su producción, sino que tengan una manera de sustento para sus familias. Entonces, estas piezas se encuentran en un momento curatorial importante no sólo para sí mismas”.

Ahora mismo, en Kiev hay una cantidad de obra considerable resguardada en la Galería Voloshyn, “pero no sabemos por cuánto tiempo va a ser posible garantizar su resguardo”, lamenta Richards.

Las mujeres ganan terreno

Así como la Galería Voloshyn, entre las 60 galerías que este año integran la octava edición de la Feria de Arte Material, destacan los trabajos pictóricos, en acuarela, óleo y carbón sobre lienzo, papel, tela o un pedazo de cartón, y textiles, desde bordado tradicional con motivos contestatarios, hasta la elaboración de piezas escultóricos o de bajorrelieve que sustituyen la piedra por la lana.

Muchos de estos trabajos se desmarcan del canon académico, como si la realidad de hoy ya no fuera esa zona segura y tangible que reprodujo el figurativismo formal. Y aunque el arte que hay en Material retoma el culto al cuerpo, las mujeres de arte han decidido eliminar la figura del genio masculino que por siglos ha capitalizado la interpretación de lo femenino. La edición es una muestra de cómo el arte de las mujeres, al mismo tiempo que explora la corporalidad, se muestra profundamente político.

Un par de ejemplos destacados

La galería Instituto de Visión, con sede en Bogotá y Nueva York, y enfocada principalmente al trabajo de las mujeres, presenta obra de la artista mexicana Aurora Pellizzi elaborada con lana teñida naturalmente con grana cochinilla y fijada sobre fieltro industrial. La artista presenta una serie de nueve obras en este formato con bellas representaciones del cuerpo femenino: las piernas, los glúteos, los senos, el pubis, moldeados con lana teñida en distintos colores.

“La temporalidad suspendida de tejer y teñir la aleja de las fuerzas de la cultura consumista contemporánea y del culto moderno a la eficiencia y la velocidad”, menciona el catálogo de presentación de las piezas, facilitado por la galería.

Por su parte, la galería Bombón Projects, con sede en Barcelona, presenta una serie de trabajos al óleo sobre tela en pequeño formato con obra de la artista estadounidense Mari Eastman, quien realiza una serie de representaciones de imágenes femeninas de animales que aparecen en las revistas de moda, pero les arrebata el canon de la pulcritud y restituye un sentido de realidad más crudo e imperfecto.

“Me parece que sí hay una apertura hacia el trabajo de las mujeres, y ya va siendo hora”, comparte Joana Roda Calvet, directora de Bombón Projects. “El arte textil, por ejemplo, no es menor, sino que se convierte en un medio indispensable para poner en tensión muchos temas que hoy son necesarios de visibilizar”.