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Gremio cultural pide a Xóchitl Gálvez reformas fiscales y más presupuesto
Durante el encuentro de la comunidad científica, cultura y académica con la candidata, también se priorizó el rediseño de la relación del Estado con las organizaciones de la sociedad civil, los colectivos independientes y la iniciativa privada y poner atención en los derechos laborales del gremio.
Durante el encuentro con la comunidad científica, cultural y académica sostenido la tarde de este martes por la candidata presidencial de la alianza opositora, Xóchitl Gálvez, en el World Trade Center de la Ciudad de México, como voceros del sector cultural, convocados por Consuelo Sáizar de la Fuente, encargada de la mesa de Cultura de la campaña de Gálvez, participaron el escritor Rafael Pérez Gay y la periodista cultural Adriana Malvido.
Pérez Gay propuso la incorporación al proyecto de nación de la candidata mencionada la idea de la excepción cultural, y explicó:
“En los años 80, la industria editorial francesa estaba quebrada; la cinematografía, moribunda. (François) Mitterrand le pidió entonces a su ministro de Cultura, Jack Lang, que iniciara un amplio estudio para desarrollar una excepción cultural, es decir, facilidades fiscales, impulso al consumo cultural, aumento presupuestal. Un grupo de juristas, empresarios, artistas, administradores y ciudadanos se entregaron a ese trabajo que consistía en escapar de la cárcel de una cultura destruida por la incuria, el descuido y el olvido. En poco tiempo, después de mucho trabajo, la industria editorial y el cine franceses se habían recuperado”, declaró el escritor.
Por su parte, el discurso de la periodista Adriana Malvido fue conciliador. En este tenor, dijo: “creo, como escribe la feminista y facilitadora Adrienne Maree Brown, que para salir de la fatiga apocalíptica que nos abruma, hay que poner el discernimiento en el lugar de la ira, desaprender sistemas, conductas y creencias que dañan, como la normalización de la violencia, del juicio instantáneo, el escarnio público, el pensamiento binario, de buenos y malos, de víctimas y villanos; la obsesión por el castigo sin la reparación del daño, la supremacía racial, de género, de clase, de fama, de edad”.
Malvido añadió que “si la cultura tiene un lugar en la reparación de las relaciones sociales y en nuestra reconciliación con la naturaleza, sugiero poner más atención en el rediseño de la relación entre el Estado, las organizaciones de la sociedad civil, colectivos independientes y la iniciativa privada; en la formación de públicos y la educación artística; en la capacitación de docencias para contar en las escuelas con animadores apasionados de la lectura y de las artes; en la redirección de prioridades presupuestarias y una reforma fiscal que estimule mayor emprendimiento y participación de las empresas en la producción, la circulación y el acceso a expresiones artísticas; en la justicia laboral que urge a los trabajadores de la cultura y el fin de la precariedad como forma de vida, como si fuera normal, sobre todo en los jóvenes y en los freelance. Eso también se ha normalizado, es una precariedad que se agudizó después de la pandemia”.
La respuesta de Xóchitl Gálvez
Finalmente, la candidata Xóchitl Gálvez estableció diez puntos en los que, en caso de resultar electa, pondrá énfasis. Entre lo destacado de estos puntos, dijo que aumentará el presupuesto para cultura y se comprometió a impulsar un programa de educación y promoción cultural artística de alcance nacional, así como a la “construcción de la mayor infraestructura cultural de este siglo, tanto física como digital”.
Particularmente, declaró que le interesa el “desarrollo de aplicaciones digitales para hacer más eficientes los procesos de producción, comercialización en inventarios de artesanías; el otorgamiento del mayor número de becas en la historia del país para estudiantes de arte, artistas emergentes, creadores y agentes culturales; una política digital incluyente para el arte y la cultura que garantice el acceso y ejercicio universal de los derechos culturales de todos los mexicanos”.
La candidata señaló que proyecta la recuperación de “la independencia de la línea editorial de los medios públicos de radio y televisión del arte y la cultura”.
Asimismo, aseguró que pretende impulsar más estímulos fiscales para fomentar el libro, la lectura y los museos. También se comprometió a dedicar mil millones de pesos anuales para los programas de cultura en los municipios.