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La educación en línea es tendencia, reúne credibilidad y viabilidad
Las plataformas de e–learning han revolucionado la forma de acceder a oportunidades educativas complementarias y continuas. De acuerdo con el estudio "Descifrando las nuevas formas de aprender en línea", el porcentaje de recomendación de usuarios digitales para estudiar en línea es de 82% y 97% de los internautas en México que se encuentra estudiando o interesado en alguna oferta académica.
La globalización, los avances tecnológicos y la creciente demanda de habilidades especializadas han impulsado la necesidad de una educación en línea más accesible y eficiente. Según un informe de 2022 de la Asociación de Educación Superior Online, el número de estudiantes que se inscriben en este formato ha aumentado 25% en los últimos 5 años.
De acuerdo con Elena Benitez, directora general de la agencia Gerundio, después de la pandemia el sector educativo sufrió una aceleración en el uso de nuevas tendencias tecnológicas, “se nos obligó a buscar nuevas formas de no estar en un espacio físico, por lo que probamos cosas que ya existían pero no las considerábamos formalmente”. Con ello se abren muchas posibilidades, la primera es la aceptación a probar nuevas ideas, y segundo, la credibilidad y lo viable que vemos estas opciones.
La especialista en innovación, comunicación y diseño estratégico asegura que si bien ya existían muchas plataformas, éstas no tenían el mismo nivel de credibilidad y adopción como lo tienen ahora. Otra macrotendencia es la democratización, pues todos estos componentes digitales nos permiten llegar de una forma más sencilla a servicios a los cuales antes no teníamos acceso y que hoy en día se globalizan. “Hoy de forma muy accesible podemos hacer una certificación en una escuela internacional a través de una plataforma digital”.
Bajo este contexto, Gerundio, agencia especializada en servicios de tecnología, generó el estudio Descifrando las nuevas formas de aprender en línea. Ellos estudiaron el cambio constante en la educación, y con ello poder conocer los desafíos del e-learning en México, además entender cómo su futuro está intrínsecamente ligado a la innovación tecnológica y la necesidad de nuevas competencias. Se enfoca en educación continua especializada, indagando en las plataformas que están utilizando los mexicanos para seguir aprendiendo durante la universidad con alternativas a sus carreras, o cuando terminan y buscan seguir especializándose.
Algunos de sus resultados revelan que el 62% de los usuarios de Internet en México cuentan con una carrera profesional concluida, en curso o trunca, lo que brinda un amplio panorama para seguir preparándose profesionalmente. El porcentaje de recomendación de usuarios digitales para estudiar en línea es de 82% y 97% de los internautas en México que se encuentra estudiando o está interesado en alguna oferta académica.
En cuanto a costos, el 66% de quienes están interesados en estudiar, pagarían menos de 5,000 pesos al mes; y 58% de quienes estudian pagarían hasta 20,000 pesos mensuales. Por otro lado, 7 de cada 10 usuarios de internet tiene empleo y 57% gana entre 5,000 y 15,000 pesos. A partir de estos datos, el estudio concluye que la educación en línea en México representa una alternativa muy atractiva para las personas que necesitan comodidad a la hora de satisfacer sus necesidades académicas. La limitada oferta de universidades públicas, también representa un factor relevante a la hora de decantarse por educación digital, puesto que los costos de ésta suelen ser más reducidos que los de una escuela tradicional.
El estudio también concluye que hay un alto abandono en los cursos pregrabados, por lo que las sesiones en vivo son la mejor opción para aprender, que la educación en línea fortalece la responsabilidad y la organización para los trabajadores; finalmente la educación en línea abre un mundo de posibilidades en donde antes había restricciones.
El nuevo mundo de la educación complementaria
La flexibilidad de la educación en línea es esencial. Las tendencias aseguran que hoy se privilegia poder aprender al ritmo de cada quien y en horarios adaptados a sus agendas personales y profesionales. “Lo que encontramos es que hay dos detonadores para adquirir este tipo de educación. Primero, uno que va muy enfocado a intereses personales, incluso sólo por curiosidad y no necesariamente requieren de un valor curricular para tomarlo, la certificación no es lo más importante en este caso, sino el contenido. Para estos fines hay plataformas como Platzi, Crehana o Domestika.
Pero hay otra área que sí requiere de valor curricular y requiere de una certificación y aval que pueda compartir con pares y superiores. Aquí se buscan más plataformas que son más agregadores de contenidos como Talisis o Coursera.
La metodología utilizada por Gerundio para el estudio, fue el Diseño Centrado en la Persona, es decir, cualitativa. Con ello se pudieron también investigar aspectos como el tiempo de duración en las plataformas, hoy una persona invierte entre cinco y quince minutos al estudio, “son tiempos breves, pero esto se mezcla con el tema de portabilidad, pues la gente aprovecha sus teléfonos inteligentes para estudiar la mayor cantidad de veces en lugar de estar sentados frente a una computadora. Esto tiene el beneficio de ser muy accesible para los usuarios y se ve como una ventaja”.
Sin embargo, nuevamente, en el complemento de este punto, los usuarios valoran mucho que las sesiones no sean pregrabadas, sino que realmente puedan tener una interacción, esto se tendrá que valorar a la hora de la creación de educación en línea.
Benítez concluye que es difícil pensar que todos los negocios de educación tendrán que volverse basados en tecnología, pero todos se tienen que adaptar. “Después de acompañar a muchos clientes y categorías en ese proceso de transformación digital, definitivamente el nivel de inversión y expertise que se necesita para competir con empresas que nacieron en digital y cuyos procesos de modelo de negocio está estructurado así, es difícil que una academia tradicional logre estar 100% a ese nivel, hoy no es necesario que todo mundo cree su propia tecnología, simplemente se requiere del expertise de cada uno, cuál es la propuesta o el valor diferenciado y hacer las sinergias que hagan más sentido”.
Desde la experiencia de la experta, coexistirán ambos modelos y será trabajo del usuario entender cuál es nuestra mejor opción, para ello hay que preguntarnos para qué lo estamos haciendo y qué es lo que realmente necesitamos, validez de los estudios, reconocimiento laboral o es un objetivo mucho más personal y de curiosidad.
Tendencias educativas
- Demandas laborales: las necesidades cambiantes del mercado laboral y cómo estas afectan la demanda de ciertos tipos de habilidades y conocimientos.
- Cambios en las preferencias de aprendizaje: La evolución de las formas de aprender para las generaciones más digitales
- Globalización de la economía: podría generar una mayor demanda de educación internacional.
- Aprendizaje adaptativo: Plataformas y sistemas de aprendizaje que se adaptan al ritmo y estilo de aprendizaje individual del estudiante, proporcionando contenido personalizado.
- Microaprendizaje: Ofrece contenido de aprendizaje en pequeñas unidades, generalmente de corta duración, para facilitar la asimilación rápida de información.
- Colaboración en línea y aprendizaje social: Promueve el aprendizaje activo y la construcción de conocimiento a través de la interacción social.
- Realidad virtual (VR) y realidad aumentada (AR): Integración de tecnologías inmersivas para proporcionar experiencias de aprendizaje más interactivas y prácticas.
- Enfoque en habilidades blandas: Mayor atención a la enseñanza y evaluación de habilidades blandas como la comunicación, la resolución de problemas y el pensamiento crítico.
- Desarrollo de contenido móvil: Crecimiento de plataformas y contenido diseñado específicamente para dispositivos móviles.
nelly.toche@eleconomista.mx