Marimba y rock triunfan en Morelia

Aunque la migración fue el tema más recurrido por los cineastas, es una historia guatemalteca a ritmo de marimba que ganó el 8 Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM).

Las marimbas del infierno de Julio Hernández es una historia sobre don Alfonso que toca la marimba en Guatemala y su amistad con un roquero. Ambos muestran la importancia del típico instrumento.

Creo que la mezcla era la oportunidad para darle mucho más significado al tema y provocar sentimientos encontrados , explicó el cineasta.

Sobre el FICM, Julio Hernández aplaudió que le dé oportunidades a las nuevas generaciones de cineastas.

Ésa es una decisión acertada pues la gente que está comenzando los necesita , dijo.

Durante 10 días se presentaron más de 100 proyectos cinematográficos entre cortos, películas mexicanas y extranjeras de las que resalto Armadillo, documental-ficción sobre la guerra en Afgansitán de Janues Metz, A tiro de piedra de Sebastián Hiriart y Nómadas de Ricardo Benet, aunque no terminada, llamó la atención por su propuesta y rompimiento con el estilo de los cineastas mexicanos.

Así como Somos lo que hay de Jorge Michel sobre una familia de caníbales y el regreso del director Alfredo Gurrola con su thriller policiaco sobre el 68 con guión de Rafa Aviña. El extremo fue la proyección de más de cinco horas de Carlos, documental-ficción sobre un mercenario.

La sorpresa la dio el cineasta Quentin Tarantino paseando por las calles de Morelia.

Los más queridos fueron Terry Gilliam y el actor Danny Trejo como el más aclamado por la gente.

La fiesta más concurrida fue la del Instituto Mexicano de Cinematografía con música de Shakira, tamales y con la ausencia de Marina Stavenhagen, su directora.

Un encuentro rebasado

El Festival Internacional de Cine de Morelia es un gran proyecto, sin embargo, está siendo rebasado por su propio éxito.

Y se nota, cuando gente con boleto pagado se queda fuera de la sala o tiene que ver la película en las escaleras; cineasta que se quejan ante la mala organización y una serie de eventos y funciones que se empalman en horarios en un problema de logística.

También se encuentra el criterio en la calidad en varias de las películas, donde varios críticos de cine aconsejaron elevar los estándares en la sección competencia.

Porque hubo dos bodrios: De día y de noche de Alejandro Molina y Vete más lejos Alicia de Elisa Miller.

También es necesario mejorar el tema de la prensa, en desorganización total y donde los periodista tiene que arreglarse por su cuenta con publicistas privados que traen una agenda diferente al departamento de prensa del FICM con la grandes figuras del festival o de plano meterse de contrabando a las funciones de cine para hacer su trabajo.

Un nuevo teatro en Morelia

Se prepara un nuevo espacio cultural en Morelia bajo la coordinación de Cuauhtémoc Cárdenas Batel, director técnico del Comité Técnico del Fideicomiso del Teatro Mariano Matamoros.

El viejo Cine Colonial da paso a el Teatro Mariano Matamoros que albergará más de 800 personas y cuenta con una inversión del Estado superior a los 150 millones de pesos.

Aunque estaba prevista su apertura para las fiestas del Bicentenario y el Centenario, no se pudo realizar por lo que será hasta la primavera del 2011 su apertura.

El espacio contará con la posibilidad de adaptar dos salas de cine; salones de eventos, conciertos y convenciones, entre otros usos.

El Festival Internacional de Cine de Morelia adoptará el Teatro Mariano Matamoros como su sede.

vgutierrez@eleconomista.com.mx