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Nace el primer observatorio mexicano en cambio climático

Este esfuerzo surge desde las juventudes a través de la asociación civil 'Reacciona' y busca crear una plataforma web de acceso abierto que permita monitorear las acciones del Poder Legislativo federal sobre el cambio climático y colaborar con la ciudadanía en la reflexión, creación de propuestas legislativas en torno al cambio climático desde una visión de justicia climática inter e intrageneracional.

Foto EE: Nelly Toche

Foto EE: Nelly Toche

La crisis climática es uno de los desafíos más apremiantes que enfrenta nuestro planeta en la actualidad. Para abordar esta problemática es fundamental contar con información precisa, análisis rigurosos y políticas bien fundamentadas. Con esta premisa es que este miércoles 12 de julio se presentó el Observatorio Mexicano de Política en Cambio Climático.

“'Reacciona' es un colectivo que busca trabajar con las juventudes en la creación de un espacio inclusivo, donde puedan participar de manera significativa en la lucha contra el cambio climático”, explica Rogelio Barrios Rosas, miembro del observatorio. Sus ejes de acción son: La educación, la concientización y la acción colectiva a través del ojo público. “No queremos ser una cuota más en los procesos de política pública, necesitamos ser verdaderos agentes de cambio que trabajen en conjunto con los demás actores de la sociedad”.

Explica que hoy a diferencia de hace cinco años o más, ya estamos viendo la factura del cambio climático en nuestra realidad, “la gente ya está muriendo por las olas de calor, ya está perdiendo su forma de vida por las inundaciones y ya hay pérdidas importantes en la economía por la inacción”.

De acuerdo con diversas instituciones, como la Organización Mundial para la Salud, o la Organización de las Naciones Unidas, las juventudes son uno de los grupos más vulnerables ante la emergencia climática, pues se vive en una desigualdad social pronunciada, con menos acceso a servicios de salud, oportunidades laborales, educativas y de representación y participación económica y política. El cambio climático actúa como un extremador de desigualdades.

En contraparte hay reportes que señalan a las juventudes como un excelente motor de cambio para aumentar la acción y ambición climática, por su capacidad para convocar a la comunidad a través de las redes sociales, contribuir desde las universidades y combinarlas como agentes del sector público, privado y la sociedad civil.

Por ello Barrios reitera: “Queremos transformar la forma en que se genera la política pública en cambio climático, con mayor gobernanza climática, transparencia, rendición de cuentas, participación ciudadana y sobre todo resultados, porque ya no hay tiempo para estarnos peleando, solo hay tiempo para actuar”.

La información pública, no es tan pública

Este proyecto surgió de una pregunta, ¿cómo accedemos hoy a la información climática a nivel legislativo, revisarla es fácil?

Arabel Alí. miembro de la organización explica “como juventudes asumimos que nos están heredando una crisis en cambio climático y la inacción, por eso nosotros queremos cambiar las cosas y asumir un rol líder en la construcción colectiva de las soluciones para enfrentar el cambio climático”.

El equipo de  'Reacciona'  tiene cuatro años trabajando para incentivar la participación de las juventudes a nivel nacional, luego de presenciar las actividades de la COP24 y de un largo análisis para entender cómo podían tener incidencia política, entendieron que podían hacerlo por medio de un observatorio ciudadano, una lupa sobre las acciones y omisiones de las autoridades, principalmente.

Para tratar de tener un primer acercamiento a lo que se estaba haciendo en el tema, hicieron una búsqueda de lo que se hacía en el legislativo, esa curiosidad los llevó a darse cuenta de que acceder a la información que debería ser pública no solo es difícil, sino que es un problema, pues la forma en que se comparte la información es un desaliento para las personas que quisieran conocer sobre el tema.

Además,la información está desactualizada, pues cada que se cambia la legislatura o desaparece la información o no se renueva. También al entrar a las páginas, no es accesible. Basta un ejemplo, cuando desapareció el Fondo para Cambio Climático, la votación fue a mano alzada, no hay registro en páginas web y el video desapareció también. “La información pública no es tan pública”.

El lenguaje es otro problema, hay muchos términos que no se entienden, nadie explica de qué va la iniciativa o el decreto, “esto también es parte del acceso a la información y no se está cuidando. Por último, la invisibilidad legislativa, pues si no son tiempos electorales y de campañas, no tenemos idea de lo que los legisladores realizan”.

La solución, una plataforma web de acceso abierto

Alicia Cortes y EIyari Balderas Cruz explican que la idea es que todos podamos conocer la actividad legislativa federal sobre temas de cambio climático, para ello el proyecto cuenta con diversos elementos.

En la página del grupo ya se pueden observar tres grandes ejes: Las reformas legislativas del periodo 2018-2024, las actividades de la COP27 y un apartado de justicia social y climática, que incluye un glosario sobre el tema.

Sobre la COP se destacan los compromisos y los planes en los cuales está México integrado, también los actores clave del gobierno, de empresas privadas y sociedad civil, además de las alianzas. Se pone énfasis en el sentido del voto desde México para cada uno de los compromisos.

Por otro lado, se analizan las propuestas de reforma que hay, los procesos legislativos que obedecen a estos temas, los puntos clave de las propuestas que darán un sentido al voto de los legisladores, datos relevantes alternos a estos procesos aislados dentro de la Cámara y lo que dijeron los expertos, es decir, una compilación de la experiencia social ante las acciones legislativas. También se revisan las comisiones de trabajo y legisladores por bancada y su sentido del voto.

Hasta ahora se han analizado un total de 56 asuntos legislativos en Cámara de Diputados, y 220 en el Senado, en total suman 276 asuntos entre reformas, puntos de acuerdo, días festivos, entre otros. De esos casos se analizaron a profundidad 20 iniciativas, el problema es que de ellas, solo 8 fueron aprobadas, lo más grave es que solo están enfocadas en plásticos, “hay una crisis en el pensamiento legislativo que cree que cambio climático solo es eso”. Otra conclusión relevante es que parece que todo lo que se aprueba no necesita presupuesto, pues nada se acompaña de recursos.

Los involucrados en la iniciativa concluyen que este trabajo es un esfuerzo por la transparencia climática y por la inclusión de la sociedad en temas clave, aseguran que no pueden seguir siendo una cuota más por lo que hay que reaccionar.

nelly.toche@eleconomista.mx

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