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Planear las relaciones puede mejorar la salud sexual
Una encuesta ?global sobre hábitos? sexuales en hombres con disfunción eréctil? publicado en The Journal of Urology dio pie al debate en el que especialistas? platicaron sobre? diversos mitos.
El doctor Eusebio Rubio-Aurioles, fundador y director de la Asociación Mexicana para la Salud Sexual AC, aseguró que la cultura nos presenta un panorama de idealización de la sexualidad lleno de cosas hollywoodescas, como la expectativa de espontaneidad y de deseo al mismo tiempo que tu pareja. El mito de que ése es el acto que más vale es más común de lo que se piensa. Si se le pregunta a cualquier persona, seguramente afirmará este hecho; sin embargo, con la experiencia médica sabemos que ésta es una percepción errónea , dijo.
El experto hizo hincapié en que la realidad es que la vida sexual con una frecuencia muy grande y espontánea no es real.
Entonces ¿qué pasa con la afirmación de que si no es espontáneo no es válido?
El doctor Rubio asegura que esta hipótesis de la espontaneidad puede ser válida para las parejas recién formadas: Cuando las personas se acaban de encontrar, buscan mucho más los momentos, organizan su día y tienen mayores encuentros .
Sin embargo, cuando las personas logran consolidar su relación y encontrar un proyecto de vida en conjunto, siguen esperando lo que parecía una cosa venida de la nada.
Aseguró que si no se organiza la existencia cotidiana para tener los encuentros sexuales, la frecuencia de los encuentros empieza a bajar, a diferencia de las parejas que tienen la virtud de organizar su existencia para conservar estos tiempos .
Pero la planeación hace que el sexo sea poco interesante, ¿no? El especialista asegura que, por el contrario, anticipar el encuentro puede llenarlo de intensidad, si uno lo acomoda, esa espera puede funcionar a favor y el deseo puede ser la consecuencia y no el motor de un encuentro sexual con algo planeado .
La historia de Pedro, ?más común de lo que parece
Rubio-Aurioles ejemplificó con la historia de Pedro el reflejo de una generalidad en las familias mexicanas.
Con 50 años, Pedro es ejecutivo de mercadotecnia en una compañía trasnacional, lo que ha provocado el descuido de su salud y de su familia.
Casado desde hace 15 años, con tres hijas de ocho, cinco y dos años de edad, desde hace cinco años fue diagnosticado con hipertensión y hace seis meses comenzó con problemas de erección. Se le recomendó un tratamiento oral.
A las tres semanas regresó y aunque el tratamiento funcionó, la queja es que nunca hubo tiempo para poder tener relaciones sexuales.
Al revisar la rutina diaria de la pareja, quedó claro que entre los tiempos necesarios para los hijos, el trabajo, viajes, familia y amistades, el tiempo para la sexualidad era inexistente. Aunado a esto, él y su pareja pensaban que eso debía ocurrir de manera espontánea.
Lo que se le recomendó fue replantear la organización de sus tiempos y dedicar un espacio exclusivo para ellos solos. A los cuatro meses, su vida retomó su curso.
En conclusión, en este ejemplo se ve la necesidad, al revés de como dice la cultura, de planear nuestra vida sexual , dijo.
En México como en el mundo
El doctor Mariano Sotomayor de ?Zavaleta, expresidente de la Sociedad Mexicana de Urología, presentó los resultados de un estudio publicado en The Journal of Urology, el cual se realizó a 1,500 personas de siete países alrededor del mundo, con una edad promedio de 48 años.
Éstos indican que la espontaneidad no es la realidad de las relaciones sexuales; los pacientes planean cuándo, qué día y hora de la semana: la media de relaciones sexuales son seis al mes y 85% está complacido con su tratamiento de disfunción eréctil .
Aunque México no estuvo incluido en este estudio, los especialistas aseguran que esta realidad también aplica para nuestro país, pues la encuesta también revela que la mayoría de los sujetos de estudio presentaban enfermedades asociadas como los factores de riesgo más importantes para su disfunción eréctil. Estas son presión alta, colesterol alto, diabetes, problemas de próstata, depresión o artritis.
En México, en un estudio representativo de tres ciudades en el 2002 se explicaba que la tasa de disfunción eréctil entre personas de 40 a 70 años era de 55%; es decir, un poco más de la mitad de las personas en nuestro país tenía algún grado de disfunción y conforme aumenta la edad, aumenta esta frecuencia y severidad , dijo Sotomayor.
La razón es que se van añadiendo patologías con la edad que hace que la frecuencia aumente. Cabe destacar que la disfunción no es una enfermedad como tal, sino una consecuencia de algo que está funcionando mal en el cuerpo y con las cifras de diabetes y obesidad que estamos viviendo seguramente éstas estarán en aumento y van de acuerdo a los resultados del estudio , concluyó.