Presentan primeros resultados del Registro Nacional de Hipertensión Arterial

El problema de la hipertensión arterial (HTA) en México no es sencillo, el 32% de los mexicanos tienen un diagnóstico establecido, de ese porcentaje casi el 12% tienen menos de 35 años y hasta el 75% tiene menos de 54 años. Esto se debe fundamentalmente a los factores de riesgo con los que cohabita la enfermedad.

Esta situación es alarmante, aseguran los especialistas, porque además de eso sabemos que el 28% de los mexicanos viven con hipertensión y no lo saben, el 22% no tienen la posibilidad de recibir tratamientos por diversas razones y el 29% de esta población que recibe tratamiento, no se encuentra en cifras meta, por lo tanto, la hipertensión sigue favoreciendo las enfermedades cardiovasculares en el país.

Por eso y otras razones nació Grehta (El Grupo de Expertos en Hipertensión Arterial), este se organizó formalmente en el 2018 y el objetivo fundamental es contribuir a disminuir los costos de la hipertensión arterial y sus complicaciones. Está conformado por profesionales de la salud de diferentes disciplinas que desean mejorar estadísticas como las anteriores. “La idea es dar una cobertura amplia a todos los aspectos esenciales de la hipertensión, tales como educación médica continua, investigación, formación de recursos humanos y atención al público”, asegura la doctora Silvia Palomo, especialista en nefrología, directora general de RITHA y miembro fundador de GREHTA.

Una de las acciones fundamentales de esta asociación fue la creación del Registro Nacional de Hipertensión (RIHTA), el cual inició el 4 de diciembre del 2021, con el objetivo de saber el comportamiento de los factores de riesgo de los mexicanos que viven con HTA y con ello apoyar a los profesionales de la salud para que conozcan el nivel de riesgo cardiovascular de sus pacientes y les ofrezcan el mejor tratamiento, que por lo general es con terapias combinadas.

“Creamos RIHTA con el racional de incrementar el conocimiento de los factores y complicaciones cardiovasculares de los mexicanos, los cuales cambian constantemente; además de explorar el comportamiento epidemiológico de la enfermedad y el sentir de las personas respecto a cómo viven su padecimiento y su adherencia al tratamiento, todo esto desde la experiencia del día a día en el consultorio por parte de los médicos que participan.

A un año de operaciones de dicha plataforma electrónica, en la que los profesionales de la salud registran voluntariamente y de manera confidencial los casos de sus pacientes con HTA, que abarca desde la historia clínica del paciente, hasta la estratificación del riesgo, su tratamiento, seguimiento e información personal, tenemos los primeros resultados.

Después de 17 meses activa se tiene un total de 5,590 individuos localizados en la Ciudad de México y Estado de México, de los cuales 61% son mujeres y 39% hombres y en ambos géneros el riesgo cardiovascular es alto. De ese total de registros se conoció también que 87% tienen concentraciones elevadas de colesterol, triglicéridos o ambos (dislipidemias), mientras que 83% sufre de sobrepeso u obesidad, 39% padece diabetes y 35% ya cuenta con evidencia de daño a órgano blanco (alteraciones en cerebro, ojos, corazón riñón o sistema vascular periférico).

“Estos datos iniciales son realmente alarmantes, plantean la urgente necesidad de tener acciones precisas y concretas para poder mejorar la salud cardiovascular de estos pacientes, por lo tanto, RIHTA con su primer reporte ayuda y contribuye a poder tener en mente cuáles son las acciones fundamentales y pendientes”, dijo la especialista.

Agrega que RIHTA es una película en tiempo real para que los profesionales de la salud registren gratuitamente a sus pacientes, de esa manera conozcan más de ellos y cuenten con herramientas para mejorar su salud cardiovascular. “Es un esfuerzo conjunto en beneficio al paciente para que su calidad de vida sea óptima”, concluye la doctora Palomo.

Acciones fundamentales

El doctor Martín Rosas Peralta, miembro fundador de GREHTA, asegura que la HTA es un problema grave de salud pública, pues la prevalencia no ha cambiado en lo que va del siglo y 30% de la población adulta en México es portadora de hipertensión, “sabemos que la mitad no lo sabe porque es el asesino silencioso, es asintomática”.

Hoy el porcentaje de detectados, bien tratados y controlados es muy pequeño. El problema fundamental es que la HTA no vive sola, como lo demuestran los detalles de RITHA, “casi siempre un paciente tiene otra comorbilidad asociada, el contexto de un paciente es de polifarmacia y eso hace que los pacientes sean difíciles o renuentes a tomar tantas pastillas, incluso a veces se confunden. Aun cuando se han hecho esfuerzos por mejorar la adherencia al tratamiento, siguen los problemas”.

“En una encuesta de pacientes en todo el mundo, donde Latinoamérica participó con 400,000 pacientes pudimos darnos cuenta de que la prescripción de los medicamentos es a través de pastillas individualizadas, el problema es que más del 75% de la población va a requerir de al menos dos fármacos para poder controlar su presión arterial”.

Hoy las industrias de medicamentos han logrado medicamentos combinados que dan ventajas a pacientes con hipertensión, esto mejora la adherencia. “Hoy el tratamiento de la hipertensión debe ser con terapia combinada”, asegura Rosas Peralta, hoy laboratorios como Silanes cuentan con combinaciones a dosis fija, de una sola toma con dos antihipertensivos (amlodipino y losartán) y una estatina (rosuvastatina) bajo prescripción médica, para multiplicar las soluciones de control del RCV.

nelly.toche@eleconomista.mx