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Sin novedad en el PEF: ciencia y cultura quedan con incrementos mínimos
Los legisladores optaron por dejar intacto el proyecto presupuesto presentado por la SHCP en lo que se refiere a estos rubros; pese a haberse generado grupos de trabajo y mesas de diálogo con los sectores, a modo de parlamento abierto, el resultado es un presupuesto inercial.
Tal y como lo planteó el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación 2023 (PPEF) el pasado 8 de septiembre, la ciencia, tecnología e innovación (CTI) en México recibirá un monto de 128 mil 746 millones, correspondientes al Anexo 12 y la cultura se queda con poco más de 15 mil 925 millones, distribuidos en el Ramo 48.
Así lo aprobó la mayoría parlamentaria de Morena, PVEM y PT en la Cámara de Diputados la noche del viernes, con 270 votos a favor, 219 en contra y una abstención, luego de rechazar todas y cada una de las 2 mil 264 reservas presentadas por la oposición para modificar el dictamen del Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación 2023.
El presupuesto asignado para CTI representa un 16% más respecto a 2022 en términos nominales; en términos reales es un 10.5%. Ciertamente es el mayor monto para el rubro en el sexenio del presidente Andrés Manuel López Obrador, sin embargo el aumento más significativo en el Anexo 12 es para la Secretaría de Energía, a la que se asigna un aumento de 579% respecto a 2022 que se traducen en 8 mil 183 millones de pesos y para la Secretaría de Relaciones Exteriores, que a través de la Amexid recibirá 5.3 millones de pesos, lo que presenta un aumento de 120 por ciento respecto a 2022.
En contraste, el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), que funge como cabeza de sector, recibirá 31 mil 655 millones de pesos, que significan sólo un incremento nominal del 7% respecto a los 29 mil 564 millones de pesos en 2022, pero que en términos reales sigue estando por debajo del presupuesto de 2018. En porcentaje del Producto Interno Bruto (PIB) el presupuesto 2023 para CTI sube 0.03% respecto al año anterior en recursos fiscales, muy por debajo de la meta del 1% del PIB que mandata la actual Ley de Ciencia y Tecnología.
Para el Ramo 48 Cultura, el presupuesto asignado significa un incremento nominal de 896.5 millones de pesos; en comparación con el presupuesto del 2022; sin embargo, considerando el factor inflacionario, el incremento en términos reales sería de apenas el 0.9 por ciento.
Por tercer año consecutivo el Complejo Cultural Bosque de Chapultepec tendrá el mayor presupuesto, colocándolo como el proyecto prioritario con una asignación de 3 mil 670 millones de pesos, es decir, el 24% del total del dinero destinado a la cultura para 2023. Para el sector central de la Secretaría de Cultura el paquete fiscal propone 6 mil 652.6 millones de pesos, lo que arroja un decremento real de 6.1 por ciento.
Destacan los incrementos para el Instituto Mexicano de Cinematografía (Imcine), que tendrá 293.4 millones de pesos y en términos reales crecerá su asignación en 38.8% frente al PEF 2022, y del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), con 4 mil 739.2 mdp, que significa un aumento del 12.5 por ciento. El Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL) se queda con 3 mil 460.8 millones, un decremento real de 0.9 por ciento.
De acuerdo con el Anexo 26 del dictamen aprobado, referente a los principales programas para ciencia, el gobierno dará prioridad a las becas de posgrado y apoyos a la calidad; al Sistema Nacional de Investigadores, y a los Programas Nacionales Estratégicos de ciencia, tecnología y vinculación con el sector social, público y privado. Para cultura, los programas prioritarios serán Desarrollo Cultural, Protección y conservación del Patrimonio Cultural, y Servicios educativos culturales y artísticos.
Sobre los programas sujetos a reglas de operación de acuerdo con el anexo 25 del dictamen final, están las becas de posgrado y apoyos a la calidad y el Sistema Nacional de Investigadores. En cultura: Programas del Fondo Nacional de Fomento a las Artesanías (Fonart), el Programa de Apoyos a la Cultura, el Programa Nacional de Reconstrucción, y el Programa Nacional de Becas Artísticas y Culturales.
Sin tomar en cuenta las observaciones
Ciencia, Tecnología e Innovación se analizaron en el Legislativo como parte del rubro de desarrollo económico, en dicha discusión se determinó la necesidad de aumentar el presupuesto destinado a CTI de acuerdo con el nivel establecido en el artículo 9 Bis de la Ley de Ciencia y Tecnología al 1% del PIB.
En el análisis, la doctora Brenda Valderrama Blanco, secretaria del Instituto de Biotecnología de la UNAM, señaló que en el etiquetado de este año se favorece a la Subsecretaría de Electricidad, misma que no está clasificada dentro de la función Ciencia y Tecnología. Otro ejemplo es la Dirección General de Energías Limpias, que tiene asignados 243 mdp para transferencias a fideicomisos del Poder Ejecutivo, es decir que tampoco están clasificados dentro de la función Ciencia y Tecnología. También se señala que actualmente el 50% de los recursos etiquetados al Anexo 12 se reclasifican impidiendo su seguimiento.
Por otro lado, el presupuesto para el Ramo 38 asciende a 31,298 mdp, el 98% está clasificado dentro de la subfunción investigación científica pero solamente el 4% se aplicará realmente al financiamiento de las investigaciones, la tercera parte de lo que se ejercía anualmente en la administración anterior.
Para Cultura, el grupo de trabajo estuvo asignado al rubro de Desarrollo Social. En él se determinó que a pesar de un incremento de 5.9% en el ramo 48 hay una necesidad de revisar el Proyecto Chapultepec, que recibe el 24% del presupuesto del ramo. Se propuso además retomar el programa de Bibliotecas Virtuales y apoyo para el fortalecimiento de las Casas de Cultura.
También se demandó un apoyo para proyectos que se desarrollarían en Jalisco, Nayarit y Colima y se solicitó apoyo para digitalizar el acervo de la Biblioteca Central de la UNAM, nada de lo anterior fue contemplado, pues no se percibió ningún cambio a la asignación de presupuesto por parte del legislativo.
En contraste con las observaciones del grupo de trabajo, la Comisión de Cultura y Cinematografía estimó procedente y emitió una opinión positiva para la aprobación del PPEF 2023 en materia cultural. Dicha comisión tampoco solicitó ampliaciones o reducciones a programas presupuestarios ni modificaciones de texto y aseguró que existía “un alto grado de vinculación en la mayoría de los programas presupuestarios que analizaron con los ODS”.
