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El 65% de los mexicanos no está listo para el futuro del trabajo
El WEF estima que gran parte de los trabajadores en el país necesitarán algún tipo de entrenamiento, ya sea para mejorar sus habilidades actuales o para desempeñar nuevos roles.

Más de la mitad de los trabajadores demandará algún tipo de capacitación frente al avance de la tecnología.
En un entorno de grandes cambios auspiciados por la sostenibilidad, los avances tecnológicos, la digitalización, la automatización y la inteligencia artificial (IA), dos terceras partes de la fuerza laboral en México requerirán algún tipo de capacitación en los próximos cinco años para enfrentar la transformación que vivirá el mundo del trabajo.
De acuerdo con el Informe sobre el futuro del empleo 2025 elaborado por el Foro Económico Mundial (WEF, por su sigla en inglés), sólo el 35% de los trabajadores no necesitará entrenamiento para el desarrollo de nuevas habilidades en el próximo lustro, seis puntos por debajo del promedio mundial.
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Además, la brecha de habilidades que se ha generado a causa de la disrupción acelerada de la tecnología en los empleos se ha convertido en la principal barrera para la transformación de los negocios para el periodo 2025-2030, así lo identifica el 63% de las empresas consultadas.
“Dada la necesidad de nuevas habilidades, la proporción de la fuerza laboral que requerirá upskilling (mejora de habilidades existentes) y reskilling (nuevas habilidades) sigue siendo significativa: si la fuerza laboral del mundo estuviera conformada por 100 personas, 59 necesitarían entrenamiento para el 2030”, se advierte en el reporte. En México, la cifra se eleva a 65 por ciento.
De dicha proporción, se estima que 31% de los trabajadores mexicanos requerirá capacitación para mejorar en su actual puesto de trabajo; 23%, para desarrollar nuevas tareas dentro de la misma organización, y 11%, porque su empleo actual está en riesgo.
Además, en promedio, se estima que el 40% de las competencias de los trabajadores en el país se transformarán para suplir las demandas del mercado o quedarán obsoletas en los próximos cinco años. De ahí la necesidad de entrenamiento en el desarrollo ya sea en actualización o desarrollo de nuevas competencias.
Ante este contexto, la mejora de habilidades es la principal estrategia laboral para las empresas que operan en el país de cara al 2030 (85%). Le siguen la aceleración de la automatización de procesos y tareas (82%), contratación de personal con nuevas competencias (72%), complementar la fuerza laboral con nuevas tecnologías (59%), reducción del personal con las habilidades menos relevantes (54%) y cambio de trabajadores en roles en declive hacia roles en crecimiento (42%).
En el terreno de los puestos de trabajo como tal, los que más se espera que crezcan en el país en los próximos cinco años son los relacionados con ciencia y análisis de datos, IA y machine learning y gerencia de operaciones. Del otro extremo, los que disminuirán en demanda serán trabajadores para maquiladoras, personal de contabilidad y funciones de asistente personal y secretariado ejecutivo.

El rol de las habilidades blandas
Y aunque el WEF hace nuevamente énfasis en el impacto de los cambios tecnológicos en las competencias con las que cuentan actualmente los trabajadores, las habilidades blandas han ganado cada vez más espacio en las necesidades de las empresas.
De hecho, el pensamiento analítico se mantiene como la competencia más valorada en la actualidad, así lo considera el 70% de los empleadores consultados. Le siguen la resiliencia, la flexibilidad y la agilidad; el liderazgo y la influencia social; el pensamiento creativo; la motivación y la autoconciencia; la empatía y la escucha activa; la curiosidad y el aprendizaje permanente; la gestión de talento y la orientación al servicio.
“Comparado con la edición 2023 del reporte, se han registrado algunos cambios significativos en las habilidades clave. Liderazgo e influencia social, IA y big data, gestión de talento y orientación al servicio han ganado relevancia. Por el contrario, habilidades como confiabilidad, atención al detalle y control de calidad han disminuido en importancia en las empresas”, detalla el WEF.
Los trabajos del futuro
En las expectativas para el mercado laboral en el mediano plazo no todo tiene que ver con tecnología, también varios empleos de primera línea se espera que crezcan notoriamente en los próximos cinco años.
Además de los empleos tecnológicos de mayor demanda, como especialistas en big data, IA, machine learning y ciberseguridad, ingenieros fintech y desarrolladores de software y aplicaciones, el WEF identificó que en volumen, entre el 2025 y el 2030 crecerán notablemente empleos de granjeros y trabajadores agrícolas, conductores de servicios de reparto, personal de enfermería, trabajadores sociales, psicólogos y cuidadores.
Tan sólo en el caso de los trabajadores agrícolas, se explica en el reporte, se espera que en los próximos cinco años se generen 35 millones de empleos adicionales en este sector a nivel mundial, en gran parte debido a los trabajos verdes y los esfuerzos por enfrentar el cambio climático.

