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Aún con nueva tabla de enfermedades, el estrés laboral se afianzó en 2024
Sólo 11% de las personas afirma que el estrés provocado por el trabajo disminuyó el año pasado, una buena parte percibió un aumento derivado de cargas y jornadas laborales excesivas.
El estrés laboral ya es un problema crónico en las empresas, y aún con su reconocimiento como enfermedad de trabajo, casi seis de cada 10 personas afirman que en 2024 creció su nivel de estrés provocado por el entorno organizacional, de acuerdo con un estudio de OCC.
De acuerdo con el informe Impacto del estrés laboral en los colaboradores de la bolsa de trabajo en línea, el año pasado 30% de los trabajadores percibió un incremento considerable en su nivel de estrés y un 29% experimentó un aumento ligero, sólo 11% afirma que disminuyó.
El burnout que padecen los trabajadores no es fortuito, esta sensación de aumento está alineada con factores del entorno organizacional. Según el reporte de OCC, la falta de balance vida-trabajo, jornadas laborales extensas, liderazgos inadecuados y un exceso de cargas de trabajo son las principales causas de estrés reportadas por los empleados.
“El estrés laboral o burnout se han convertido en parte del día a día de la mitad de los encuestados; aun cuando el estrés que experimentan aparece y desaparece, muchos confirman que éste ha incrementado o se ha mantenido respecto a otros años”, indica la bolsa de trabajo en su estudio.
El burnout fue reconocido como enfermedad de trabajo luego de la actualización de la lista de padecimientos laborales, el 2024 fue el año de implementación de los cambios con la entrada en vigor de Cédulas de Valuación, una herramienta de apoyo para el diagnóstico de las patologías.
Según la Cédula de Valuación número 80 define el burnout como “un síndrome conceptualizado como resultado del estrés laboral crónico que no se ha manejado con éxito”.
El estrés laboral crónico tiene tres características:
- Sentimiento de agotamiento o falta de energía
- Sentimientos negativos o cínicos (despersonalización, distancia mental con las personas con las que se interactúa en el trabajo)
- Sensación de ineficiencia o falta de realización personal.
Pese al reconocimiento legal, la sensación de estrés laboral ha crecido como resultado de una mayor exposición a factores de riesgo psicosocial, especialmente por el contexto de la pandemia de Covid-19.
De acuerdo con el último Reporte de riesgo psicosocial en México de Mercer Marsh Beneficios, el 43% de las personas tiene cargas y jornadas laborales excesivas, un universo que creció cinco puntos porcentuales luego de la emergencia sanitaria.
Estos hallazgos son similares a los que identificó OCC en un estudio sobre el panorama laboral después de la pandemia. Los principales factores de estrés en el trabajo reportado por las personas fueron: liderazgos inadecuados, mala organización del trabajo, jornadas extensas y cargas laborales que exceden la capacidad.
Las facturas
El estrés que experimentan los empleados genera una merma en la productividad y otros aspectos clave para la retención de talento.
Según el último informe de OCC, los trabajadores reconocen que el burnout:
- Reduce su motivación y compromiso (45%)
- Disminuye la calidad de su trabajo (40%)
- Baja su productividad (38%)
- Incrementa la rotación de la empresa (38%)
- Aumenta la posibilidad de errores (30%).
En buena medida, estos efectos se relacionan con el impacto negativo del estrés en el bienestar de las personas. El 47% de los trabajadores atribuye al burnout su deterioro mental, tiene una influencia negativa superior a la inflación, de acuerdo con el estudio Panorama del bienestar en las empresas 2025 de Wellhub.
Al mismo tiempo, una mala salud mental genera un círculo vicioso con afectaciones como una mala calidad de sueño, un aspecto que también afecta el rendimiento en el trabajo. El 71% de los trabajadores afirma que duerme menos de siete horas al día, indica el informe de la plataforma de bienestar.
De acuerdo con los Consejos Nacionales de Seguridad (NCS por sus siglas en inglés), un empleador con una plantilla de 1,000 trabajadores puede perder hasta 1 millón de dólares al año por problemas asociados a la fatiga. Según la organización sin fines de lucro, el 78% de esta merma se asocia con el presentismo.