Lectura 4:00 min
¿Qué es el MIR? La polémica de la negociación del salario mínimo de 2025
Especialistas coinciden en que el MIR ya cumplió su propósito y en el contexto actual, está frenando el crecimiento de remuneraciones ajenas al salario mínimo.
El MIR se aplicó por primera vez en 2016.
La polémica durante las negociaciones del salario mínimo para el 2025 entre el gobierno, sector patronal y sindical, fue la posibilidad de eliminar el Monto Independiente de Recuperación (MIR).
El salario mínimo general para el 2025 será de 278.80 pesos diarios y en la Zona Libre de la Frontera Norte (ZLFN), de 419.88 pesos. En ambos casos, el aumento aprobado por el Consejo de Representantes de la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos (Conasami), fue de 12 por ciento. De este incremento, 12.85 pesos corresponden al MIR para la referencia salarial general.
El MIR se aplicó por primera vez en 2016, y es un mecanismo cuya finalidad es la recuperación del poder adquisitivo de la remuneración básica, mismo que no debe ser utilizada como referente para fijar otros salarios, como los contractuales, federales, estatales o municipales.
Durante las negociaciones el sector sindical propuso eliminar el MIR, acción que, para Rosa Albina Garavito, del Departamento de Economía de la UAM, tendría beneficios para los trabajadores de México.
“Ya es momento de que se elimine el MIR, que no es otra cosa que se elimine los topes salariales. Los beneficios serían la recuperación del mercado interno. Si un país tiene la capacidad de recuperar su mercado interno entonces eso va a significar un aliciente para la inversión, y si hay un aliciente para la inversión, habrá crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB), dice en entrevista con El Economista.
La especialista agrega que existiría un impacto directo del aumento del salario para el trabajador, lo cual sería un incentivo para el incremento de su productividad y que repercutirá en la mejora de la competitividad internacional de México.
“Se genera un círculo virtuoso alrededor del aumento salarial generalizado, indiscriminado, quiere decir, no se haga la diferencia entre trabajadores de salario mínimo y el resto de los trabajadores”, resalta.
Sin embargo, Albina Garavito comenta que, la aparición del MIR es un “artilugio” que mantiene los topes salariales.
“Para que en 2024 tengamos un salario mínimo de 248.93 pesos, el aumento se descompuso así: se aplican 27.40 pesos como MIR, y un 6% de aumento. Entonces los 27.40 pesos significan un aumento del 13.2% en relación con el 2023. Pero el resto de los salarios va a girar en torno al 6%”, indica la experta.
Al ser cuestionada sobre si existe algún riesgo al eliminar el MIR, la especialista señala que no, ya que no habría temas inflacionarios que dañen la economía del país.
“La inflación en el sexenio que terminó, debió haber sido de alrededor del 7%, pero vuelve a bajar y estamos alrededor del 4%, eso te demuestra que el salario no es inflacionario”, expone.
Indica que para eliminar el MIR como lo propone el sector sindical, debe existir una voluntad política de relanzar el crecimiento del país en un modelo inclusivo.
“El gobierno no se le ve hasta ahora, la voluntad de efectivamente empujar para eliminar esa diferencia, ojalá que empiecen a tomar consciencia, lo mismo los empresarios, porque insisto, este es un juego de ganar-ganar, o sea, nadie pierde, nadie pierde, sino que todos ganan”, afirma.
El MIR ya cumplió su objetivo
Andrés Peñaloza, presidente de Bialii, Asesoría e Investigación, coincide en que no existen riesgos en materia económica si se elimina el MIR.
“No, no veo riesgo alguno, o sea, se puede seguir por la ruta de la recuperación del poder adquisitivo sin el MIR. De hecho, el MIR ya casi a ocho años de existencia, ha generado algunas tensiones gremiales. Yo veo pertinente que se elimine, porque ya se agotó en todo caso ese dispositivo. En realidad, a ocho años en que ha habido incrementos sostenidos e incluso significativos, no veo mayor riesgo, de hecho, hoy se visualiza como un pretexto para romper con el tope salarial aplicado a los contractuales”, afirma.
Dice que los incrementos deben ser efectuados de manera directa al salario mínimo sin el MIR, mismo que genera interpretaciones equivocas en diversos sectores.
“Al factor inflacionario se le suma este monto, pues no es necesario, si realmente la pretensión es alcanzar determinado monto que debe de estar previsto para el cierre de este sexenio en alrededor de 850 pesos hasta 1,000 pesos en algunas zonas, y aún estaríamos muy por abajo del salario mínimo de Estados Unidos”, destaca.
