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2.2 millones de dólares por traer a Roger Federer a México
La Monumental Plaza de Toros México fue el mejor recinto para recibir el duelo entre el suizo y Zverev.
Roger Federer cobró 2.2 millones de dólares para su partido de exhibición en la Plaza de Toros México contra Alexander Zverev, dijo a El Economista, Raúl Zurutuza, director de Mextenis. Esta cifra coincide con el precio que manejó con los distintos países que integran su gira por el continente americano.
“Los formatos de exhibición son más caros con cualquier jugador, desde el más barato hasta el más costoso. No es lo mismo que en torneo, porque ahí cuentan con una base de ganancia económica y según su desarrollo en las rondas clasificatorias van generando según la bolsa de premios que disponemos”, explicó Zurutuza.
Lo que determinó elegir como recinto para el evento a la Plaza México fue su capacidad de albergar 41,000 personas, 72.5% más aforo que el Arthur Ashe, estadio principal del US Open, que cuenta con 23,771 asientos; el de mayor capacidad entre los cuatro Grand Slams.
“La Plaza México era el mejor lugar para que fuera un buen negocio. Uno de los objetivos era permitir que mucha gente pudiera asistir al partido con un precio relativamente accesible. Con los boletos que manejamos nos daban los números para estar tranquilos. En lugares como la Arena Ciudad de México o el Palacio de los Deportes, los números no nos daban”, dijo Raúl.
De los 41,000 lugares, 20,000 representan la sección general, zona que tiene un precio de 450 pesos. Dentro de la plaza no se realizó ningún tipo de modificación, ya que es un recinto histórico, además del poco margen de maniobra en cuanto al tiempo.
Sin embargo, al ser un evento distinto a una corrida de toros, los responsables de la plaza tuvieron que encargarse de temas de organización junto a Mextenis, como la visibilidad del público.
“Hubo alrededor de cinco pruebas distintas de alumbrado, ya que era complicado para la televisión, el jugador, que se viera la bola y algunas cosas más; pero finalmente el escenario que se definió quedó muy bien y creo que agradará mucho a los asistentes” comentó a este diario, Mario Zulaica, director de la TauroPlaza México.
La encargada de convertir el ruedo en una cancha de tenis fue la empresa mexicana Flexytap, que realiza pisos amortiguadores desde 1976. La superficie para el evento fue fabricada a base de hule reciclado de llanta.
Roger Federer es apodado “su majestad” por la calidad que muestra en su forma de jugar y los 20 Grand Slams que lo ubican como el más ganador en la historia, pero en gran parte, también por su cortés trato con aficionados y medios de comunicación. Personalidad que no deja de lado en las peticiones para asistir a un partido.
“A Federer lo definiría como asequible. Existen jugadores dentro de la ATP que son muy duros en el tema de la organización, pero Roger es bastante sencillo” comentó Raúl.