Lectura 4:00 min
América y Monterrey, finalistas en problemas
El entrenamiento físico antes de iniciar un torneo requiere de 15 a 20 días y de juegos de preparación.
América y Monterrey fueron los mejores equipos en el Apertura 2019, pero llegarán con menos tiempo de pretemporada, comparado con el resto de los clubes de la Liga MX. La final se jugó los días 26 y 29 de diciembre porque Rayados disputó el Mundial de Clubes de la FIFA, desarrollado del 11 al 21 del mismo mes.
El 7 y 8 de diciembre ambos equipos se encontraban disputando la semifinal del torneo, mientras que los clubes que no clasificaron, en esas mismas fechas comenzaron a prepararse rumbo al actual torneo.
Un ejemplo fue Chivas, que empezó su pretemporada el 9 de diciembre con un viaje a Cancún para trabajar en el aspecto físico, además de contar con cinco partidos amistosos previos al inicio del torneo, mientras que las Águilas y el actual campeón tuvieron una breve preparación de cinco días.
En el caso del América, comenzaron desde el viernes 10 de enero, realizaron pruebas médicas ese día y los otros cinco fueron jornadas dobles de entrenamiento por la mañana y la tarde. A partir de este jueves comenzarán su trabajo regular con una sola práctica por la mañana, previo al partido de la jornada dos contra Tigres el próximo sábado en el Estadio Azteca. Por su parte, Rayados utilizó el mismo esquema, sólo que comenzaron hasta el domingo 12 de enero.
¿Cómo afrontar un torneo sin tener pretemporada?
“En el entrenamiento moderno existe una planificación para preparar los equipos en plazos cortos. Se le da mayor importancia al aspecto táctico, para que desde los primeros días de trabajo el futbolista se encuentre listo para jugar, con un tiempo de entre 15 y 20 días para llegar a la jornada 7 u 8 en su mejor estado de forma”, comenta a El Economista el preparador físico Daniel Ipata, quien fungió en el cuerpo técnico de Pumas del 2018 al 2019.
La reducción de un mes de preparación a una semana puede significar riesgo de lesiones para los futbolistas. Ipata explica que, a lo largo del torneo, los jugadores tendrán que realizar ejercicios preventivos de lesiones antes de entrenar, a causa de las agresivas cargas de trabajo previas a la competición liguera.
El América aún tiene lesionado a Renato Ibarra (quien se lesionó en la final contra Monterrey) y al regresar a los entrenamientos volvió a sufrir de problemas en el tendón. La estimación del tiempo que Ibarra estará fuera de las canchas es de tres meses, cerca de medio torneo.
Otro tema a considerar son los refuerzos. Rayados no realizó incorporaciones y enfrentará el torneo con una plantilla muy similar; el América fichó al uruguayo Leo Suárez y tiene el lugar que dejó Guido Rodríguez, jugador del Real Betis.
“Tienes que darle continuidad a lo que estabas realizando, porque grandes cambios con poco tiempo son muy complicados. Entonces, uno de los principales problemas son los jugadores que llegan, porque se tienen que adaptar a temas como la altura, además de que no conocen el esquema de trabajo”, expresa a este diario el auxiliar técnico Rodrigo Roque, quien estuvo con los Lobos BUAP y con los Gallos Blanco del Querétaro.
En el Apertura 2016 hay un antecedente. El América llegó a la final de la Liga MX y también disputó el Mundial de Clubes. El juego de vuelta fue el 25 de diciembre contra Tigres, el campeón. Para el Clausura 2017, las Águilas quedaron eliminadas en el noveno lugar y los felinos acabaron séptimos y en la final cayeron con Chivas.