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Big Papi y una dieta que lo hace mejor pelotero

Una recomendación para su salud resultó también un beneficio para su calidad en el juego.

La temporada no había sido buena para Red Sox en el 2011 tras concluir antepenúltimos en su división. Es septiembre del mismo año. En su tierra, su apelativo de todos conocidos en el rey de los deportes puede hacer estremecer a la conductora que con sensualidad presenta a David Ortiz, el ídolo, el orgullo de República Dominicana, por quien varios lugares disputan su derecho de nacimiento.

Big Papi es originario de Cristo Rey, un barrio con marginación. También es estadounidense desde el 2008. Ahí, en la base donde se juega el mejor beisbol del mundo es un pelotero respetado por su físico, por su bateo y en la comunidad de Boston tiene un sitio entrañable por ser parte de aquella franquicia que en el 2004 quebró las penurias por un título que no llegaba en casi 90 años.

Ortiz Arias no podía pedirle más al beisbol: fama, premios, campeonatos, All-Star games y una fortuna que en ese tiempo era de 84 millones de dólares por su paso en Minnesota Twins y Sox para el integrante de una familia de clase media.

Para un competitivo pelotero no es suficiente con lo que se disfruta y gana después de escuchar el Play ball. Ortiz es uno de ellos y sabía que debía hacer algo más por él, por su salud, lo que se reflejaría sobre el campo.

Apasionado por comer mariscos, a David Américo le fue detectado colesterol alto, arriba de 300, para ser más claros. Los tratamientos para la reducción de dicho tipo de grasa son diversos, pero el primera base desechó cualquier posibilidad que tuviera que ver con fármacos.

Big Papi optó por mejorar su nutrición a través de un estricto régimen natural que le privaría de los alimentos a los que estaba habituado y para el que no habría flexibilidad para degustar si quiera un bocado de la comida prohibida.

El tratamiento a seguir fue a partir de la prueba ALCAT. Examen con 25 años de actividad a través del cual se mide la sensibilidad del organismo en más de 350 alimentos, la reacción celular y química de éstos, según explica ALCAT CSS en su sitio.

ESPN difundió que David desembolsó 17,000 dólares en exámenes, a partir de ahí estuvo bajo supervisión de una clínica en República Dominicana en la que empleó el procedimiento de obstrucción bioeléctrica.

Ortiz tenía permitido comer yemas, salmón, langosta, carne de res, ensaladas y verduras. Cero pan, dulces y alcohol, entre algunas medidas.

Su disciplina arrojaría los primeros resultados en dos meses: 9 kilogramos menos en la primavera del 2012 y mejor aún, más habilidad. Estoy corriendo las bases mejor y más fuerte , mencionó en abril del año pasado.

El progreso en lo físico no fue tan perceptible en sus números de la temporada pasada, en parte porque Big Papi?disputó 90 partidos, produjo 60 anotaciones, pegó 103 hits, se voló la barda 23 veces y su average con la madera fe de .318.

Ya en esta campaña, Ortiz Arias, de 37 años, elevó su actividad en 137 partidos, impulsó 103 carreras, asestó 30 cuadrangulares y dio 160 imparables. Estar a tono sirvió para que su equipo fuera la artillería más explosiva en el calendario regular.

Al ex de Minnesota hoy puede vérsele con menos grasa abdominal y mayor velocidad para correr los senderos en un doblete. El efecto de esa transformación de quien llegó a tener 11.25 kilogramos de sobrepeso también le dejó como principal líder de Boston.

Por ende, Big Papi -ahora de 112.5 kilogramos y 1.93 metros- no defrauda a sus seguidores. Es el mando en la ofensiva de Red Sox en la etapa cumbre. Sus estadísticas en cinco partidos de la World Series 2013 son extraordinarias gracias a 11 hits en 15 turnos, dos cuadrangulares, seis promovidas e imponente .733 de average y no le han cantado ponches.

Ortiz es un conflicto para Cardinals cada que se para en la caja de bateo y un ejemplo para mermar una amenaza cardiovascular.

rgs

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