El amaño te llevará a prisión... pero no importa

El amaño te llevará a prisión es además de una advertencia para los futbolistas, el título del video que el Departamento de Integridad de la Liga Profesional de Futbol de España (LFP) difunde desde la temporada pasada a los jugadores de la liga de las estrellas, aunque también para los clubes de divisiones inferiores, juveniles y hasta el futbol femenil.

En los 10 minutos del material, se describen las consecuencias de participar en fraude deportivo, los castigos y consecuencias, así como algunos relatos de involucrados, como Cliff Mardulier, un portero belga al que obligaron a recibir cinco goles en contra. El de un empresario chino, accionista del club Lierse, que pretendía hacerse del control total del equipo, y amenazó con un revolver en la sien al arquero, que algún día fue parte de selecciones juveniles en su país y a los 29 años, tras año y medio de suspensión, abandonó el futbol profesional.

Fue durante la temporada 2013-2014, que los directivos del futbol español iniciaron la campaña de información para clubes de Primera y Segunda División, sobre las consecuencias del amaño de partidos, un problema que, ellos dicen, no llega a los niveles de Europa del Este.

No obstante, el 2013 fue el año cuando más partidos sospechosos o investigados registró el futbol español, con ocho casos, de un total de 16 partidos que presentan indicios o han requerido de la intervención de la justicia española del 2010 a la fecha, según un recuento realizado por El Economista.

El fraude deportivo o amaño de partidos es considerado un delito en España. Las sanciones para los involucrados van de seis meses a cuatro años de prisión; hasta seis años de inhabilitación en el futbol y multas por el triple del beneficio económico recibido por la simulación del juego.

El partido Levante vs Zaragoza, celebrado en mayo del 2011, es apenas el primer proceso judicial que llega a los tribunales españoles por motivos de amaño en el futbol. Javier Aguirre, que comparecerá el próximo viernes ante el juez por el juego que salvó del descenso a su entonces equipo, formará parte de un caso histórico en el futbol ibérico, aunque no el único en una de las mejores ligas del mundo.

Los clubes recurren al amaño para salvar la categoría

La mitad de los partidos donde se han presentado indicios o sospechas de amaño en España pertenecen a la Primera División. Los 13 clubes de la liga de las estrellas involucrados, en su totalidad, tenían comprometida su permanencia en la máxima categoría a la hora en que se desarrolló el partido señalado por fraude deportivo.

Levante, Espanyol, Zaragoza y Granada están involucrados en dos partidos con indicios de amaño, y sólo el equipo maño bajó a Segunda División. Los ocho encuentros en los que se sospecha cometieron fraude deportivo se realizaron entre las últimas tres jornadas de la temporada, justo cuando se decide quién dejará de participar en el torneo estelar del futbol español.

Levante, por ejemplo, perdió los dos juegos que en su momento fueron investigados por las autoridades españolas (2-0 ante Zaragoza y 4-0 ante Deportivo La Coruña). El cuadro Valenciano llegó a las últimas jornadas con la salvación matemática y enfrentaba a rivales que buscaban salvarse del descenso, por lo que un resultado negativo no comprometía su posición.

Las investigaciones hasta el momento indican que Zaragoza destinó 1.3 millones de euros para los pagos a jugadores de Levante; mientras que directivos de Osasuna dicen desconocer el destino de 3.7 millones de euros de sus cuentas y que habrían servido para amañar su partido ante Espanyol y pagar a jugadores de Betis por ganarle a Valladolid y dejarse ganar en la última jornada ante los navarros.

El fraude también amenaza divisiones inferiores

Las apuestas ilegales encontraron en las divisiones inferiores del futbol español la oportunidad de generar dinero ilícito. Desde el 2010 se han presentado al menos cinco partidos sospechosos de amaño en la Segunda División; un juego de la Segunda B; uno en el futbol femenil, y un partido fantasma entre Ponferradina y Freamunde, que nunca se realizó y benefició a una casa de apuestas ilegal.

Manuel Quintanar, director de la Unidad de Integridad de la LFP, explicó a El País que los juegos de divisiones de desarrollo se vuelven atractivos para las casas de apuestas por la poca difusión y cobertura que tienen,y la mínima vigilancia de las autoridades.

El directivo calcula que 80% de las casas de apuestas son ilegales en España y que los montos de sobornos en Segunda División pueden llegar a 100,000 euros.

Según cifras de la LFP, cada jornada, en todas las categorías, son analizados 21 partidos en condiciones de peligro o presión del crimen organizado para incurrir en amaño; hasta el momento el único caso llevado a tribunales es el Levante vs Zaragoza del 2011, desde entonces se ha presentado un caso de fraude en el futbol cada 2.8 meses. Es un mal que ya preocupa en el futbol español.