España pone a prueba su estilo

Vicente del Bosque es un tipo sereno, que no acostumbra señalar culpables, aun después de una derrota histórica. El debut de España en el Mundial brasileño terminó en catástrofe, pues además de los cinco goles que logró Holanda, puso en el centro del debate la vigencia de un estilo que monopoliza la posesión del balón y tiene su mejor sustento en la constelación de pases en media cancha, pero que con el tiempo devela las carencias ofensivas del esquema.

En conferencia de prensa el técnico español defendió a sus jugadores, aunque anunció cambios para el partido frente a Chile, donde se juegan las aspiraciones de seguir en el camino de defender su campeonato mundial. La razón del anuncio: mientras más poder del balón tienen, su frecuencia goleadora disminuye.

En las eliminatorias rumbo a Brasil 2014 la Furia Roja registró su nivel goleador más bajo en los últimos cuatro años, apenas 1.4 goles por encuentro y en la tenencia del balón llegó hasta 70.8% del tiempo activo de los partidos. La pelota es propiedad de España, no hay discusión, pero el reto es ofender la portería rival.

En la eliminatoria europea los ibéricos disminuyeron su incidencia de disparos a gol. En Copa Confederaciones y Eurocopa del 2012, llegaron a 52 disparos en cada torneo. Para los últimos cuatro juegos amistosos y el primer juego del Mundial apenas crearon 29 disparos a gol y en los ocho juegos rumbo a Brasil 2014 sólo mandaron 45 disparos a portería.

Parece una contradicción que en la Eurocopa del 2012 y la Copa Confederaciones del 2013, cuando el equipo defendió con éxito su cetro y llegó a la final ante Brasil, apenas acumulaba la posesión del balón en 60% del tiempo de los partidos y tenía mayor llegada al arco rival, dos y tres goles por partido, respectivamente.

Pero en el acumulado de las eliminatorias y los últimos seis juegos el índice de la tenencia del balón supero 70%, pero con un rendimiento de apenas 1.5 goles por juego.

No sólo la selección de España, que se alimenta de siete jugadores de Barcelona y uno más del Bayern Múnich, equipos que defienden la filosofía de propiedad del balón, sufrió con los rivales veloces y defensivos. Esta temporada la filosofía que implantó Guardiola tuvo dos descalabros que también cuestionaron la efectividad del estilo.

El equipo alemán perdió en seminales de la Champions League con global de 5-0 ante Real Madrid; mientras que Barcelona se fue por primera vez en seis años sin sumar un trofeo a sus vitrinas, perdiendo ante clubes con esquemas que ceden la iniciativa, pero letales al contragolpe, el mismo Madrid y Atlético.

Vicente del Bosque ya advirtió cambios en la alineación, respecto al duelo ante Holanda, y con la misión de romper la inercia que dicta absoluto control del balón, pero poco peligró en el área rival. España pone a prueba la eficacia del estilo que lo llevó a la gloria.