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Este sería el panorama del deporte de ganar Joe Biden
De ganar la presidencia, buscaría reforzar proyectos ‘verdes’ en los estadios y la disminución de aranceles que han afectado a la industria deportiva por la pandemia.
U.S. Democratic presidential candidate Joe Biden delivers remarks during a voter mobilization event, at Miramar Regional Park in Miramar, Florida, U.S., October 13, 2020. REUTERS/Tom Brenner
Estadios más ecológicos, oportunidades comerciales para atletas universitarios y reducción de aranceles para productos como calzado y ropa serían las principales líneas de trabajo de Joe Biden en el escenario deportivo de Estados Unidos si gana la presidencia este 3 de noviembre.
El candidato demócrata se ha manifestado a favor de una política ambiental libre de emisiones de carbono netas, así como con reducciones en el uso del petróleo y el gas natural. Esta postura impactaría el deporte en el tema de construcción de estadios e instalaciones deportivas, ya que bajo el mando de Biden buscarían la reducción de contaminación y del desperdicio de energía.
Por su perfil empresarial, el tema ambiental no ha sido prioridad para Trump durante su gestión, quien ha rescindido diversas iniciativas ambientales del ex presidente Obama para priorizar la construcción y generación de fuentes de trabajo.
Otro objetivo de Joe Biden es la reducción de aranceles (impuestos sobre bienes importados o exportados), ya que en el último año Donald Trump encareció este impuesto a los productos procedentes de China, lo que provocó gastos extras por más de 7, 000 millones de dólares anuales a 173 empresas de calzado y ropa deportiva, entre las que se encuentran Adidas y Nike.
El candidato demócrata ha considerado dichos aranceles como “imprudentes” y “desastrosos” para la industria deportiva y para la economía general de su país, sin contar los efectos del Covid-19 que, en el caso específico de Nike, ha provocado el recorte de más de 500 personas en sus oficinas centrales en Oregon.
En el área de deporte universitario, Biden se ha pronunciado a favor del reconocimiento explícito de los derechos laborales de los atletas universitarios, la formación de sus sindicatos y la oportunidad e que puedan firmar acuerdos comerciales como los atletas profesionales, una propuesta que ha estado en la mesa desde 2019 y que resulta muy redituable para las instituciones pero no para los deportistas. Solo en 2018, la NCAA facturó más de mil millones de dólares.
Respecto a otros temas deportivos, Biden se encuentra en contra de las restricciones en las apuestas deportivas y juegos de azar, mientras que ha mostrado una postura a favor en temas como la legalización de la marihuana con uso medicinal y su posible explotación comercial en el mercado deportivo (la NFL y la MLB han reducido sus restricciones en este tema) y, en un punto en el que coincide con Donald Trump, mejorar y facilitar la atención médica a atletas jubilados y ex atletas universitarios.
Cabe recalcar que en el portal oficial de Joe Biden (joebiden.com) hay más de 40 planes de trabajo detallados y ninguno tiene el título de deporte. Como estudiante de preparatoria, Biden fue jugador de futbol americano (corredor y receptor abierto) y como fanático es seguidor de Eagles (NFL), Phillies y Yankees (MLB), además de ser impulsor de la lucha por homologar salarios entre hombres y mujeres en el futbol.
