Fue demasiado fácil, humillante y cruel

Demasiado fácil resultó para América remontar la eliminatoria ante Herediano en la semifinal de vuelta de la Concachampions. La noche de Águilas, más que épica, resultó surrealista, porque en 32 minutos resolvió el dilema, remontó los tres goles que había recibido en Costa Rica y encajó en ese lapso cinco tantos a los ticos, que no mostraron ni la mínima expresión de coraje con la que ahogaron a los azulcremas en el partido de ida.

Así llegó América a la final del torneo, donde un club mexicano no ha faltado desde hace 11 años. Darío Benedetto fue la figura en la victoria 6-0 sobre Herediano (6-3 global), anotó cuatro goles, algo que en la Concachampions sólo Javier Orozco había logrado en un encuentro de fase de grupos entre Cruz Azul y Real Salt Lake, en el 2008. Águilas buscará la corona cuando se mida con Montreal Impact de Canadá; el ganador accederá al Mundial de Clubes de finales de año.

Y es que, aunque los ticos mostraron valentía apenas en el primer minuto de juego, cuando Hugo González atajó un remate de Cristhian Lagos, el equipo colapsó con los primeros ataques de América y ante la afición que casi llenó las gradas del Estadio Azteca.

Darwin Quintero abrió el marcador en la primera ofensiva azulcrema y luego de un rechace de Daniel Cambronero, tras un disparo de Benedetto. Fue entonces que comenzó el festín de Darío Benedetto, anotando cuatro goles en apenas 24 minutos.

El gol que empató el marcador global de la serie fue la muestra más evidente del desorden defensivo y nerviosismo de los costarricenses. Entre Keyner Brown y Verny Scott se estorbaron al momento de querer controlar un despeje, situación que aprovechó Darwin para ceder a Benedetto y vencer al portero. La efectividad de América frente a la portería en el primer tiempo alcanzó niveles casi perfectos; los delanteros amarillos anotaron dos de cada tres disparos a gol.

La segunda parte fue tiempo muerto, porque los futbolistas de Herediano se fueron al descanso con la mirada clavada en el césped y así mismo regresaron. América falló al menos media docena de oportunidades claras de gol, hasta que Alejandro Díaz sentenció el marcador con el último gol de la noche.

Tras el sufrimiento del partido de ida, Gustavo Matosas celebró con rabia el tanto de Díaz, luego de la humillación en el vuelta, el técnico azulcrema reventó de emoción en el gol, pero se mantuvo ecuánime al final del partido, en una noche que fue más tranquila de lo que en el inicio parecía.

Tigres perdió ventaja de dos goles

El conjunto argentino River Plate rescató un empate de 2-2 con Tigres de la UANL en el Estadio Universitario, con lo cual mantuvo la esperanza de llegar a la segunda ronda de la Copa Libertadores 2015.

Los goles del encuentro fueron conseguidos por Egidio Arévalo a los 12 minutos y Damián Álvarez a los 69, por Tigres; Teófilo Gutiérrez (86) y Rodrigo Mora (89) igualaron por los argentinos. Con este resultado, los felinos llegaron a 11 puntos en el Grupo Seis, mientras el conjunto millonario llegó a cuatro.