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Honduras, la deuda que no quiere el Tricolor
La tarea de la Selección Mexicana el 21 de noviembre es golear a los catrachos en la Nations League, una competencia que jamás han ganado y que es el camino que define su actividad del 2024. Evitar abucheos y disminuir las dudas en el proyecto.
Foto: AFP
La relevancia de que México no pierda contra Honduras en la vuelta de cuartos de final de la Nations League es evitar que sume a una serie de desilusiones que datan desde las eliminatorias del Mundial de Qatar 2022.
La expectativa es alta en cada entrenador, soldado veterano del Tricolor y en los resultados inmediatos de los nuevos perfiles. El 2-0 en la ida ante los catrachos dificulta el panorama del equipo mexicano en varias aristas. Con su afición, que no los ha visto ganar en el estadio Azteca desde octubre de 2021. Con su historial en la Nations League, competencia que nunca han ganado y que en caso de no arrojar este martes buenos resultados tocaría la puerta del repechaje (en marzo) que asigna los últimos lugares a la Copa América 2024 en Miami y Atlanta.
A Honduras le basta un gol para meter en problemas a México en su intención de calificar al Final Four, pero si el marcador global se iguala, el Tricolor tendrá una última batalla en tiempos extra o en penales. Julián Quiñones recientemente nacionalizado mexicano tuvo su debut en la ida, pero aún se espera su descubrimiento como agente de cambio y productor de goles. Previo al partido, desde el Centro de Alto Rendimiento se manejó la posibilidad de iniciar con Henry Martin, Luis Chávez y Uriel Antuna y en algún cambio, darle su segundo partido a Quiñones. Mientras que el portero Guillermo Ochoa necesita la bandera verde que lo habilite tras su lesión.
