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Marchesín le da una final al América
Un grave error hizo que Santos cayera 1-0 ante las Águilas. El portero argentino había tenido una noche esplendorosa, pero...
La mirada llena de seguridad y la actitud que asumía Agustín Marchesín, portero de Santos, como el héroe del compromiso, cambió radicalmente pasados los 100 minutos de partido, cuando el guardameta argentino se comió un gol tras un tiro libre cobrado por Michael Arroyo que no llevaba nada y que de manera increíble se le escapó de las manos, abriendo la puerta a la anotación que definió la serie 1-0 en favor de América, que con 10 hombres desde el minuto 86 logró convertirse en finalista de la Concachampions, instancia en la que se medirá con Tigres.
Marchesín había sido el hombre más destacado de la noche, atajando, desde el minuto dos, varias pelotas con etiqueta de gol. Justo en ese momento, tras un amague y disparo de Oribe Peralta, el portero achicó su área y con las piernas evitó la anotación. Después, a los 16, tras un riflazo de Paul Aguilar, con reflejos felinos Agustín desvió el intento del americanista, mismo que tras su gran atajada se impactó en el poste.
En el segundo tiempo, luego de que Santos sólo pudiera inquietar en la primera etapa con un disparo de Martín Bravo al travesaño, el guardameta argentino volvió a responder, primero tras un tiro de Andrés Andrade, a pesar de que lo habían tomado a contrapié, y después a un intento de Darwin Quintero de media distancia.
En el tiempo extra, con un jugador menos tras la expulsión de Quintero, parecía cuestión de tiempo para que Santos se metiera a la final, pero anoche el destino y el futbol le tenían deparado un final más que amargo a quien había sido el héroe de la eliminatoria.
La jugada que definió el partido se gestó en una falta, en la que ya no había pelota de por medio, de Jesús Molina sobre Andrade. Al 101 Michael Arroyo pidió la pelota unos cuantos metros fuera del área, en el pico derecho.
Sin ángulo, Michael Arroyo mandó disparo por encima de la barrera, sin fuerza ni colocación, a las manos de Marchesín, quien ante la incredulidad de todo el estadio terminó por dejar escapar la pelota, que terminó en las redes tras cometer un oso que lo convirtió de héroe en villano.
Gignac fue el héroe
Con dos anotaciones del delantero francés André-Pierre Gignac, Tigres de la UANL venció 2-0 (idéntico global) a Gallos Blancos de Querétaro y así consiguió su pase a la final de la Liga de Campeones de la Concacaf.
El atacante galo definió el encuentro con su doblete a los 83 y 88 minutos, en tanto su coequipero Jesús Dueñas fue expulsado con roja directa al 71.
Los de la UANL fueron los dueños del medio campo desde los primeros instantes y Javier Aquino estuvo cerca de abrir el marcador a los cinco minutos, al rematar de cabeza en el área en un centro de Dueñas, pero falló y el balón se fue por un costado.
Después de ello, la historia no cambió mucho y Querétaro buscó hacer daño al anfitrión mediante contragolpes, pero simplemente no logró inquietar en demasía al portero argentino Nahuel Guzmán.
Sin embargo, fue a los 83 minutos cuando Rafael Sóbis tomó la pelota por el sector derecho tras un error de la defensiva rival, centró, Damián Álvarez alargó y llegó André-Pierre Gignac para sacar tiro y poner el 1-0.
Gallos Blancos quiso reaccionar, pero una vez más Gignac apareció, a los 88 minutos, cuando tomó la pelota fuera del área, se acercó para tirar y poner el 2-0.