Lectura 7:00 min
Multiculturalidad e inversión reinventan al futbol en Canadá
Una camada con raíces africanas, europeas y latinoamericanas impulsa el desarrollo en Canadá, además de academias y un liga premier que sueña con llevar al país a su segundo Mundial varonil.
Un total de 7.6 millones de habitantes de Canadá son inmigrantes. Se trata del 20% de la población total del país, por lo que uno de cada cinco residentes canadienses proviene de otras naciones, de las cuales destacan, dentro de su top 10 (de acuerdo con Statista) India, China, Filipinas, Nigeria, Pakistán y Eritrea.
Estas cifras convierten a Canadá en el octavo país del mundo con mayor número de inmigrantes y en el continente americano solo es superado por Estados Unidos (48.2 millones). Lo que parece ser una simple cuestión estadística es en realidad un factor que está cambiando la historia cultural y deportiva canadiense, sobre todo dentro de las canchas de futbol.
“Ser un país multicultural, con cada vez más inmigrantes de todas partes y siendo el futbol el deporte más popular del mundo, ha hecho que las familias lleguen con hijos que transmiten su pasión por el futbol y buscan introducirse a oportunidades de jugar. Esto beneficia bastante a Canadá porque se está recopilando el ADN de todas partes del mundo y lo está haciendo propio, es un fenómeno social muy interesante”, describe a El Economista, Alex Mejía, Máster en Negocios y Administración del Futbol que lleva tres años radicando en Canadá.
Los talentos del mundo se reflejan en las filas de su selección varonil: Alphonso Davies, su máxima figura, nació en Ghana y hasta los 17 años tenía la ciudadanía de Liberia por sus padres, pero en ese momento fue reconocido como canadiense por llevar más de una década viviendo en Edmonton. Apenas en verano de 2020, se convirtió en el primer futbolista de Canadá en ganar la Champions League con el Bayern Múnich.
Otros casos similares son Sam Adekugbe, nacido en Londres de padres nigerianos; Jonathan Osorio, nacido en Toronto de padres colombianos; Atiba Hutchinson, nacido en Brampton de padres trinitarios; así como Cyle Larin y Lucas Cavallini, también nacidos en Toronto con ascendencia jamaiquina y argentina, respectivamente. Todos son parte de la convocatoria actual para enfrentar a México, Jamaica y Panamá en la fecha FIFA de octubre.
“Canadá es un país enorme y muy futbolero debido a los inmigrantes que han llegado, tanto africanos como europeos y latinos que han ayudado a fomentar las raíces del futbol canadiense (...) Además, Canadá ha invertido millones de dólares en restructurar el futbol desde infantil hasta selección absoluta y cada provincia que está ligada a la asociación canadiense de futbol tiene su dinero administrado en buscar talento”, agrega a este diario, Roger Grinolds, comentarista deportivo en Canadá.
Con el desarrollo de estos y otros jugadores, Canadá busca clasificar a su segundo Mundial masculino, ya que solo lo hicieron en México 1986. Aunque entre finales de los 90 y principios de los 2000 tuvieron una generación talentosa con elementos como Craig Forrest, Jason De Vos y Paul Stalteri, la camada actual con Davies en el Bayern, Larin en el Besiktas (Turquía) y Jonathan David en el Lille (campeón de Francia) es una de las razones por las que más aficionados se están decantando por el futbol en ese país.
“Canadá estuvo en un bache por décadas por falta de distintos aspectos: talentos, estructuras, clubes, oportunidades, aficionados, interés de televisoras y patrocinadores, pero lo que sucede ahora se debe a distintos factores: uno, que ya hay una liga profesional que está en su tercer año y ha despertado interés nacional e internacional; dos, que la selección varonil al fin tiene un cuadro competitivo con jugadores en equipos importantes de Europa; tres, el interés ha aumentado porque el país va a organizar el Mundial 2026; y cuatro, por los logros de la selección femenil, en Juegos Olímpicos, ganando bronce en Londres 2012 y Río 2016, así como un oro en Tokio 2020”, evalúa Mejía, quien también ha sido voluntario en la Copa Confederaciones 2013 y el Mundial 2018.
La generación varonil actual ya hizo historia al clasificar a la última ronda de eliminatorias de Concacaf, algo que no lograban desde el Hexagonal de Francia 1998; rumbo a Qatar 2022, se ubican como el segundo mejor equipo del Octagonal después de tres partidos, con cinco puntos y solo superados por México (7).
“Todo está sucediendo a la vez, con esta nueva generación no solo de jugadores y equipos, sino también aficionados, que son distintos a hace 20 o 30 años. También se debe al futbol moderno, digital y globalizado. Es más fácil acercarte a los aficionados en redes sociales, contenido en páginas y con los atletas en sus cuentas”.
El experto en negocios deportivos describe que todas las regiones de Canadá han incrementado su número de futbolistas para aportar a las selecciones de diversas categorías, destacando regiones como Ontario, Vancouver y Edmonton. De acuerdo con una encuesta del medio Sports Zion, el ‘soccer’ ya es el sexto deporte más seguido en el país, por encima del rugby o basquetbol, y con la tasa de participación más alta con más de 2.6 millones de habitantes que lo practican, según cifras de la FIFA.
Remodelación de infraestructura, programas y ligas
El panorama futbolístico en Canadá empezó a cambiar entre 2007 y 2010, señala Mejía, gracias a la incursión de sus primeros clubes en la MLS, la máxima división de Estados Unidos. Desde entonces, Toronto FC, CF Montreal y Vancouver Whitecaps han participado, siendo los primeros los únicos que han sido campeones (2017) y también los primeros representantes del país en un final de Concachampions (subcampeones en 2018).
El desarrollo aumentó en 2019 cuando se creó la Premier League canadiense, con 10 equipos en el que cada uno de los dueños invirtió alrededor de 50 millones de dólares, según documentó Forbes en 2018. En dicha liga compiten, por ejemplo, el Atlético Ottawa, propiedad del Atlético de Madrid; el Forge FC, de Robert Young, fundador de Red Hat Inc; o el York United, propiedad de Greenpark Group, con inversión italiana.
La empresa Media Pro posee los derechos de transmisión de la Premier canadiense y eso también ha impulsado mayor exposición para el futbol, además del desarrollo de niños y adolescentes en academias privadas.
“En los noventa, los partidos de la selección de Canadá los pasaban diferidos en un canal deportivo dándole prioridad al beisbol. Con la evolución del internet y otras aplicaciones donde la gente puede ver streamings, han surgido más canales deportivos en Canadá y ahora están transmitiendo los partidos de la selección en vivo y con repeticiones en las noches”, detalla Grinolds.
“El objetivo del futbol canadiense es tener presencia en todos los torneos donde pueda participar tanto en selección como clubes, mayor presencia en torneos juveniles para que los clubes de Europa detecten talentos. El objetivo es tener una presencia con mejor rendimiento y competir con mentalidad y planteamiento contra los mejores del mundo, no solo participar. Canadá ha aprendido a identificar sus fortalezas y debilidades y, con base a eso, ha sabido construir poco a poco para llegar hasta donde está en este momento y despertar interés en su gente”, concluye Alex Mejía.