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No todo es dinero, ayuda mucho, pero no es todo

El portero del equipo chipriota habla de su aventura al participar en el torneo de clubes más importante del mundo, de la importancia de avanzar para obtener ingresos, y la diferencia de presupuestos de los participantes.

Apoel Nicosia ha sido el único equipo que con un presupuesto bajo (10 millones de euros) alcanzó los cuartos de final de la Champions League. El multicampeón chipriota consiguió en el 2012 instalarse entre los ocho mejores equipos del continente europeo, pero desde entonces no regresa al certamen. Su caso representa la complejidad para los equipos modestos de trascender en un torneo destinado para los millonarios.

La humildad y el esfuerzo son los principales activos de un club, que en cuanto a valor de plantilla se encuentra 35 veces por debajo de los favoritos, como Real Madrid, Barcelona o Chelsea.

Para Urko Rafael Pardo, portero del Apoel desde el 2011, volver a jugar la fase de grupos de la Copa de Europa es un premio. La Champions League es el torneo más importante del continente, es una alegría y una ilusión para todos los jugadores del equipo, de intentar volver a hacer algo tan importante como en el 2012 , comentó en charla vía telefónica para El Economista.

Así pues, las historias de cenicienta no son permitidas en la competencia que reparte más de 1,300 millones de euros entre los 32 equipos que arrancan la fase de grupos. Con el actual formato, que se implementó en el 2003, sólo 16 naciones han tenido representación en los octavos de final y esa barrera la superó el equipo de Chipre cuando eliminó a Lyon.

La clave fue la unidad del grupo, que todos quería un objetivo que era común. No pensábamos tanto en lo personal, sino en lograr trascender; eso es lo más importante en un torneo como la Champions. Si piensas mucho en lo individual, muchas veces los objetivos no coinciden , mencionó el portero, que tuvo su formación juvenil en la academia de Barcelona.

Y es que Pardo, que tras no encontrar las oportunidades para jugar en el equipo español, salió en busca de minutos, se trasladó a Grecia, Rumanía y luego a Chipre, después de quedarse sin equipo por seis meses, sabe la complejidad de jugar ante los grandes clubes, que regularmente luchan por los primeros lugares.

Nos sentimos muy orgullosos de que en el futbol puedes encontrar jugadores muy buenos con un presupuesto que tal vez no sea igual al del Real Madrid o Barcelona. Con la crisis que pasa en todo el mundo, hay muchos futbolistas y poca demanda; entonces, si buscas bien, encuentras futbolistas que valen mucho más que el precio que los clubes les están poniendo , refirió Urko.

Es precisamente ahí donde han encontrado su motivación. El portero español de raíces belgas destaca la preparación física de sus compañeros, el sacrificio, y que aun sabiendo que los rivales son muy fuertes; que la diferencia con el presupuesto es abismal, no todo es el dinero. En la vida y en el deporte ayuda, pero no lo es todo .

Por eso, el que hace dos años hayan calificado en primer lugar de su grupo, superando a equipos como Porto, Zenit, Lyon, fue resultado de un equipo que en la estadística (es) de los que más corre, que trata de ayudar al compañero , agregó Pardo.

Por último, Urko aseguró que jugar la Champions siempre ayuda en el currículo de un jugador y que la atmósfera que envuelve cada juego es una motivación para todos los jugadores. Además de que tener buenos resultados, ayuda mucho al nivel de ingresos, es bueno para nosotros, para el club y para el país, que tiene su pequeño reconocimiento a través de nosotros , finalizó Urko Pardo.

eduardo.hernandez@eleconomista.mx

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