Pachuca y Toluca hicieron lo que no muchos creían: eliminaron a los dos equipos que terminaron como primer y segundo lugar en la fase regular. El conjunto escarlata, con la mayor inversión en un solo torneo de su historia (US12.6 millones), logró eliminar al América con marcador global de 3-2, que era uno de los principales candidatos para aspirar al título principal del futbol mexicano.
Nacho Ambriz pasó de las duras críticas en sus comienzos con el equipo al formar una plantilla competitiva que ahora está en la gran final. Cabe destacar que de las cinco más recientes finales de la Liga MX , Ignacio es el único mexicano que ha estado presente, primero en 2020 con León, donde logró hacerse del título, y ahora con Toluca busca romper una sequía de 12 años en primera división.
Los Tuzos vinieron de menos a más en el campeonato e hicieron del estadio Hidalgo una auténtica fortaleza. Guillermo Almada volvió a demostrar su calidad como estratega y, con apenas una inversión de 550 mil dólares en fichajes para encarar el Apertura 2022, pasaron por encima de Rayados, que llegó a la liguilla como la mejor defensiva y el equipo más valioso de la división (US89.2 millones), con un marcador global de 6-2 luego de ganar los dos partidos de semifinal.
En Pachuca destaca que tienen a cinco de los 15 jugadores más valiosos de toda la Liga MX y cuatro de ellos son formados en la institución hidalguense. Érick Sánchez, Luis Chávez, Kevin Álvarez y Víctor Guzmán destacan entre los mejor tasados de la división junto a Nicolás Ibáñez, que fue fichado por los Tuzos en 2021 y recién fue el campeón de goleo del Apertura 2022.
Rayados quedó anulado en su propio estadio
Monterrey llegó a la semifinal de vuelta con el objetivo de ganar por tres goles o más para alcanzar la gran final. Desde la apuesta más ofensiva propuesta por Víctor Manuel Vucetich se notó que buscaban el resultado, desafortunadamente se encontraron con un sólido bloque de Pachuca, que protegió la extensa ventaja que habían logrado en el encuentro de ida.
Los minutos pasaban y, pese a que la presión alta e intensidad de Rayados logró acercarlos al arco rival, las opciones de ataque no eran tan peligrosas como se esperaba, por lo que la desesperación comenzó a cobrarle factura al cuadro local, que terminó sin anotaciones a su favor en el Gigante de Acero.
El cuadro dirigido por Guillermo Almada no replegó sus líneas e intentó cortar los avances rivales desde el medio campo, situación que los llevó a manejar el trámite del encuentro por varios momentos, principalmente en el segundo tiempo donde el cansancio ya se hacía presente en el cuadro local.
Al final, Monterrey hizo hasta 24 disparos pero solo 11 fueron a portería, mismos de los que Óscar Ustari se encargó de frenar para mantener su arco en cero por primera vez en lo que va de la liguilla.
Con el partido prácticamente resuelto sobre los minutos finales, una descolgada de Pachuca concluyó en penal a su favor tras una falta sobre Avilés Hurtado. El colombiano fue el encargado de canjear la pena máxima por gol y su festejo detonó el enojo de la afición regiomontana, que comenzó a lanzarle cosas desde la grada, sin embargo no terminaría ahí, pues los jugadores también se enfrascaron en empujones por las acciones del atacante de los Tuzos, por lo que segundos después, Enrique Santander dio por concluido el encuentro.
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