Buscar
Deportes

Lectura 8:00 min

Retiro deportivo: oportunidad más que duelo

Psicólogos enfatizan que acompañar a atletas con inteligencia emocional en su última etapa activa permite mostrarles nuevas opciones de rendimiento para evitar la depresión y otros derrumbes.

Decisión. Rafael Nadal ha manifestado que 2024 será su último año como tenista activo tras ser golpeado constamente por las lesiones. Foto: Reuters.

Decisión. Rafael Nadal ha manifestado que 2024 será su último año como tenista activo tras ser golpeado constamente por las lesiones. Foto: Reuters.

En el deporte se pueden esquivar derrotas, descensos y lesiones, pero hay algo inevitable que causa terror en varios atletas: el retiro. “Tengo miedo al final de mi carrera porque la adrenalina que siento en el campo no la voy a encontrar en ningún lado”, llegó a decir el afamado futbolista sueco, Zlatan Ibrahimovic, cuando tenía 40 años y seguía activo.

Varios deportistas élite de la actualidad están cerca de esa edad (o incluso más) y la palabra retiro empieza a asomarse con más fuerza: Rafael Nadal en el tenis (37 años), Tiger Woods en el golf (48), Fernando Alonso en el automovilismo (42) o LeBron James en el basquetbol (39).

Pero el retiro no debe ser visto como el punto final de la vida. Especialistas en psicología deportiva comparten con El Economista que, con el acompañamiento adecuado, los atletas pueden ver este proceso ineludible como una oportunidad para iniciar nuevos proyectos en ramas tan dispares como los negocios o la faceta de formar una familia.

“El deporte como alto rendimiento podrá durar como máximo el 40% de nuestra vida y, aparte, hay deportes donde esa cifra es menor, máximo un 20%, como el futbol. Es importante ver que el deporte es parte de la vida pero no es la vida como tal”, define el psicólogo Fernando González Celorio, con más de 10 años de experiencia tratando a beisbolistas, futbolistas y golfistas.

El psicólogo Adrián Miranda, con 21 años de experiencia, agrega: “En general, se trata de identificar las herramientas que tiene el deportista para ver este proceso (el retiro) como un área de oportunidad, como un nuevo proyecto, no como ‘la segunda muerte’, como le llaman algunos que mencionan que todo va a cambiar con esta decisión”.

Los atletas se acercan al retiro por diversas razones: lesiones severas o constantes, falta de recursos o estabilidad económica, pero también por cuestiones que pueden ser más de índole personal, como recientemente ocurrió con la tenista venezolana Garbiñe Muguruza, quien puso fin a su carrera apenas con 30 años para darle prioridad al ser mamá.

“A veces se nos olvida que son seres humanos. Muchos tienen mundos diferentes en cuestiones sociales o mediáticas, pareciera que viven en mundos perfectos, pero este aislamiento hace que tengan poco contacto con el mundo real. El hecho de que el deportista élite esté constantemente en competición hace que se nos olvide verlos como alguien vulnerable y eviten este tipo de pensamientos, que es donde los profesionales de la salud tienen que estar en contacto continuo para irse adaptando a la proximidad del retiro, que puede derivarse de varias aristas e incluso dependiendo del deporte”, subraya Adrián Miranda.

Respecto a los casos de atletas veteranos antes mencionados, ha surgido entre la voz popular la duda de por qué no se retiran si ya lo ganaron todo: Nadal presume 22 títulos de Grand Slams y LeBron tiene 4 trofeos de NBA.

“También recordemos que la parte del deporte tiene mucho de competencia y si nos vamos al ejemplo que es Rafa Nadal, una bestia competitiva hablando de la mejor forma posible, también está esa hambre de querer seguir ganando cosas. Lo vemos ahora con Novak Djokovic (tenista de 36 años y ganador de 24 Grand Slams)”, responde Fernando González Celorio.

Nadal es un ejemplo de cómo el acompañamiento multidisciplinario que ha tenido en su carrera, incluyendo a la psicología, le ha servido para estar consciente de la curva de su rendimiento a su edad y después de año y medio inactivo por lesiones.

“Es alguien muy realista en el sentido de que ya lo ha ganado todo, no le quedan muchas cosas más por jugar, su cuerpo lo ha tratado no tan mal y le ha permitido recuperarse de varias lesiones en rodilla, columna y otras partes. Es muy realista en que sabe hasta dónde y cómo exactamente lo puede hacer, por eso vemos que se inscribe a un torneo y unos días antes se retira. Su interés por jugar está ahí, pero él reconoce su cuerpo, sabe lo que le duele, lo que sufre, entonces sabe hasta dónde puede arriesgar o no”.

Esta semana, el mítico tenista balear anunció su participación en la Laver Cup, que será a finales de temporada y que no cumple con la misma exigencia que el ATP Tour, pues consiste en enfrentar a jugadores estelares de Europa contra una selección del resto del mundo. Es un evento que cumple más con objetivos de exhibición y espectáculo.

Otra cuestión en la que Nadal es visto como ejemplo, al igual que Michael Jordan, Lionel Messi y Roger Federer, es en cuanto a gestionar su nombre como marca para abrir negocios de otros giros incluso antes del retiro, describe Adrián Miranda, que cuenta con un posgrado en Psicología Clínica en la Universidad de Barcelona.

“Cambiar de giro es un área de oportunidad. Rafa Nadal es alguien que ya lleva un proceso de muchos años en ese sentido y en diversas entrevistas ha expresado un proceso que lleva ya trabajado por sus lesiones constantes, eso lo ha tenido muy cercano con su familia, su proceso es muy evidente para cuando llegue a tomar esa decisión y es algo que llegué a escuchar también con la golfista (mexicana) Lorena Ochoa.

“Es ahí donde el psicólogo tiene mucha injerencia. Un profesional de psicología en cuanto al deporte debe hacer un acompañamiento continuo y previo a la toma de decisión. Un manual único de psicología es muy difícil de encontrar, porque algo muy bello de la ciencia psicológica es que cada humano es diferente, indistintamente al deporte. Es ahí donde el psicólogo tiene que conocer cuáles son las herramientas que tiene la persona para poder potenciarlas o ver el área de oportunidad”.

En días recientes, Nadal hizo oficial su participación como empresario del pádel, otra disciplina deportiva, a través de su academia (Rafa Nadal Academy). Inauguró su propia liga, apoyado en patrocinadores como NDL Pro-Health y Adeco Group. El tenista también tiene negocios en áreas como energías renovables y turismo, incluyendo sociedades con sus padres, Sebastià Nadal y Ana María Parera.

“La parte empresarial, siempre y cuando esté bien asesorado y lo haga de buena forma, favorece muchísimo (…) El tema de negocios es fundamental para que ese impacto del retiro no sea tan abrupto, porque entonces sí puedes favorecer la depresión. Ahorita Rafa se puede dedicar al tema deportivo, después tendrá que ver cosas muy técnicas con la academia o patrocinadores, pero ese es un colchón en el que su vida ya no cambia tanto. Con un buen acompañamiento eso se puede sobrellevar”, dice González Celorio.

—¿Cómo cambia el acompañamiento psicológico en un atleta al acercarse al retiro?

“Antes lo pudieras tener desde una parte deportiva al 100% y luego desde una parte clínica, con enfoque más personal. Es más como un aspecto preventivo para no irse a temas de depresión o suicidios, que son situaciones muy bruscas; el acompañamiento psicológico sí es recomendable. Sí cambia el enfoque, pero se trata de entender que el deporte sigue siendo muy hermoso. Lo importante es que seamos lo suficientemente conscientes y flexibles para verlo desde otra perspectiva”.

No obstante, no todos los atletas cuentan con las condiciones económicas o el acompañamiento necesario para que su retiro sea enfocado hacia un desarrollo empresarial u otra condición positiva. Ha habido casos en disciplinas como en el boxeo o futbol en el que los deportistas terminan en depresión o hundidos en algún otro contexto negativo.

Ante eso, reflexiona el psicólogo Adrián Miranda: “Lo primero sería sensibilizarnos a la necesidad de tomar algún tipo de proceso psicológico siempre. Hablando del deporte, la aceptación también de que, siendo de élite o no, los atletas noten que ya no pueden hacer lo mismo que antes. Hay deportes que se acaban muy temprano y otros que son más longevos. En segundo lugar, aceptar que en algún momento van a tener que tomar otros proyectos y áreas de oportunidad. No todo es eterno, el cuerpo tampoco, entonces, no hay que ver estas oportunidades como un término, sino como una redirección a nuevos proyectos”.

Únete infórmate descubre

Suscríbete a nuestros
Newsletters

Ve a nuestros Newslettersregístrate aquí
tracking reference image

Últimas noticias

Noticias Recomendadas

Suscríbete