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Una oreja a cada torero en la México
Cada uno de los alternantes consiguió un apéndice en el décimo tercer festejo de la Temporada Grande.
Se fue por delante el centauro lusitano. Diego Ventura recibió a Notario de Los Encinos al que colocó muy a su estilo el rejón de castigo, hizo gala del dominio de monturas y no escatimó en florituras, encele y banderillas a bordo de Joselito, Chalana, Bronce y Prestigio, con el que terminó su actuación, al colocar de manera deficiente el rejón mortal y descordando al burel, situación que no demeritó el entusiasmo popular y tras la fuerte petición le otorgaron la primera oreja de la tarde.
En el segundo de su lote, Ventura puso un rejón de castigo de poder a poder montado en Joselito, toreó por la cara y banderilla a bordo de Chalana, enceló a la grupa y por todo el redondel a su enemigo sobre las ancas de Bronce y cerró su actuación con prestigio, pero se le fue la mano muy abajo y silenciaron su labor.
Cerró su participación ante Agradecido con un recibo a portagayola infructuoso luego de adelantar la montura a la suerte, con Gitano logró dos banderillas al quiebro que resultaron espectaculares por su ejecución y sobresalió la puesta de banderillas a dos manos y sin brida montado en Dólar para terminar en las ancas de Prestigio con la rosa, un adorno sobre dos patas y dos pinchazos antes del rejón mortal, muy bajo, para escuchar palmas a su labor.
Por su parte, Emiliano Gamero inició su actuación ante Buen Amigo a bordo de Dejavú, Hijo del Sol, Jaque Mate y Glamour con los que colocó un rejón de castigo, banderillas, adornos y el rejón mortal. Tuvo petición mayoritaria, que no fue concedida por el juez Jorge Ramos y dio la vuelta al ruedo.
A su segundo, Cortés, lo recibió a portagayola, realizó un par de quiebros con mucha exposición y un gran desempeño de su corcel Adame y terminó su labor montado en Glamour, pero pinchó dos veces antes de lograr meter el rejón mortal y tuvo que acudir a la espada de descabello para escuchar palmas al final.
Lo mejor vino con el cierra plaza, un burel de Julio Delgado de nombre Cerrajero, al que lidió a bordo de Mala Cara para la suerte de la garrocha, Adame, para otro espectacular quiebro, Jaque Mate para un violín y Glamour para coronar con la rosa y el rejón de muerte más un golpe de descabello que le valió la petición mayoritaria en los tendidos y conseguir el apéndice desde el palco de la autoridad.
El festejo estuvo a punto de cancelarse por la fuerte lluvia que cayó poco antes de iniciar y durante el desarrollo, fue histórica pues tiene más de 50 años que no se daba un mano a mano entre rejoneadores y la materia prima, los toros de Los Encinos y el de Julio Delgado, tuvieron buena presencia, recorrido y nobleza para el lucimiento de los rejoneadores.
Para el próximo domingo 26, habrá un encierro de la ganadería de Villacarmela para Antonio Ferrera, el regreso a los ruedos de Arturo Macías luego del fuerte percance que sufrió en Las Ventas el año pasado y Luis David.