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Villarreal y su capacidad para renacer tras el descenso
Luego de vivir la decadencia de un proyecto económico, hoy el equipo ha logrado salir avante gracias al control del gasto, el desarrollo de su cantera y sus éxitos deportivos.
Villarreal vivió en el 2012 su peor momento deportivo. El descenso a Segunda División en la misma temporada en la que disputó la Champions League fue el signo más evidente de la decadencia del proyecto económico del club. Al iniciar el ciclo, el Submarino Amarillo registró un déficit en las cuentas de 16 millones de euros, como la mayoría de los clubes ibéricos, que gastaban más de lo que ingresaban.
Paradójicamente, lo que pudo significar el derrumbe de una franquicia que ha pasado 80% de sus temporadas (69) en categorías inferiores -sólo suma 15 torneos en la Liga de las Estrellas-, se convirtió en el renacer de un equipo modelo para el futbol español.
Ayer confirmó su pase a los octavos de final de la Europa League, al superar 5-2 en el marcador global a Salzburgo. Villarreal continúa en su reestructuración, haciendo sus mejores aliados a la juventud, a su cantera y al control del gasto y el éxito deportivo.
Pagar primero ?para planear después
Fernando Roig enfrentó el costo del descenso de su equipo mediante la inyección de capital de Pamesa, empresa de su propiedad, a Villarreal. Además de la venta de jugadores, reducción de salarios y fichajes, parte de la estrategia del dueño fue arrancar el nuevo proyecto sin deudas.
El descenso debe servirle a Villarreal para reestructurarse otra vez, tomar fuerzas y debe ser para bien , reflexionó el presidente del club.
Para empezar vendió a Nilmar, Giuseppe Rossi, Borja Valero y Marco Ruben. Por los futbolistas recibió 36 millones de euros, pero sobre todo redujo la nómina de la plantilla; además, comenzó un plan que contemplaba invertir en el desarrollo de futbolistas jóvenes, para lo que destina desde entonces 7 millones de euros del presupuesto para el futbol base.
De ahí surgieron jugadores que hoy son importantes en el equipo, nombres como Moisés Gómez, Mateo Musacchio y Manuel Trigueros, que llegaron al club desde la adolescencia y hoy son titulares del equipo de Marcelino García Toral.
Actualmente, la plantilla del Submarino Amarillo es la tercera más joven del futbol español (25.5 años en promedio) y 36% del equipo se formó en la academia de Villarreal, lo que lo convierte en uno de los clubes que mejor trabaja en ese rubro, sólo detrás de Athletic de Bilbao, Barcelona y Real Sociedad.
Luego de su regreso inmediato a Primera División, la política de fichajes determinó comprar a jóvenes promesas extranjeras. Así llegaron Giovani y Jonathan Dos Santos, Gabriel Paulista y, sobre todo, Luciano Vietto, la actual figura y goleador del equipo.
El proyecto amarillo cumple una nueva meta ahora que se encuentra entre los mejores 16 equipos de la Europa League. Villarreal asegura recibir, al menos, 8.5 millones de euros por premios económicos, aunque la cifra podría incrementarse si avanza en el torneo para así consolidar la nueva época del club, justo ahora que el Submarino sube de nuevo a la superficie.