Abierto de Mérida: en construcción de nuevo mercado

Mérida, Yuc.- En 2023 Mérida recibió la encomienda de albergar un torneo del WTA Tour, el circuito de tenis femenil más importante del mundo, por primera vez. Heredó la categoría WTA 250, tercera en jerarquía detrás de los 500 y 1000.

Mérida reemplazó a Zapopan, que durante 2021 y 2022 fue una parada WTA 250 y recibió a jugadoras de la talla de Emma Raducanu, Zheng Qinwen y Sloane Stephens.

Aunque el tenis no es desconocido en la capital de Yucatán, sobre todo por su tradición de 37 años albergando una Copa del Mundo Juvenil y su larga lista de academias, lo que sí está en proceso de construcción es una base de aficionados a un evento con reflectores de la WTA (Asociación de Tenis Femenil).

“Cuando hablamos del cambio de plaza hablamos de buscar una afición totalmente nueva”, comenta a El Economista, Gustavo Santoscoy García, codirector del Abierto de Mérida y cabeza de GS Sports Management, la promotora responsable del torneo desde que estaba en Zapopan.

“La verdad es que Guadalajara (colindante con Zapopan) está prácticamente a dos horas y media en avión, está un poco lejos, así que nos estamos enfocando en atraer a gente de alrededor de Mérida y de todo el sureste del país. La realidad es que este es el mejor evento deportivo en la península de Yucatán, es un evento muy especial y buscamos una base de aficionados totalmente nueva”.

El directivo recalca que Mérida no heredó la base de aficionados que iniciaron en Zapopan. Después de todo, dicha ciudad jalisciense sigue teniendo torneos de la WTA con el Abierto 500 de Guadalajara y un Challenger 125.

En Mérida buscan establecer un nuevo mercado que conecte con el sureste, una región poco explorada en cuanto a eventos profesionales de tenis. México tiene torneos en ciudades como Acapulco, Guadalajara, Monterrey y Los Cabos entre el WTA y ATP Tour desde hace años; son localidades que se ubican en otros extremos del país.

“Lo que hemos visto en Mérida a diferencia de Guadalajara es que la gente no llega durante el día, es algo que distingue mucho al aficionado yucateco, están acostumbrados a salir de noche dadas las condiciones climáticas”, describe Santoscoy García.

“Por otro lado es una afición que tiene mucho conocimiento de tenis. En Guadalajara a veces se convierte en un evento muy social, donde la gente va a convivir, y aquí en Mérida la gente no se pierde un solo punto y eso es muy bueno para las tenistas”.

Inversión y oferta

Bajo esa perspectiva, los directivos de Mérida diseñan nuevas estrategias para captar aficionados no sólo en Yucatán, sino en sus alrededores.

Una de ellas es la expansión de su zona comercial, saltando de 5 a 15 restaurantes y 7 a 15 patrocinadores de 2023 a 2024. En la edición actual tienen stands de marcas como Mazda, Coca Cola, Country Lakes, Akron, Caliente, Amstel Ultra, Genelite Power Solutions, Campus Country Mayab, Mexcovery, Oliva, Inmobilia y Valtra Eyewear.

El restaurante Oliva, por ejemplo, ofrece una zona de hospitality con capacidad estimada para 90 personas dentro del Yucatán Country Club, sede del Abierto de Mérida. Cuenta con variada oferta gastronómica, pantallas y un DJ en vivo.

“Noto que hay más diversidad de restaurantes, más espacios de esparcimiento y el estadio lo veo más cómodo. Veo más patrocinadores y asistencia, en términos generales, creo que sí dieron un brinco”, menciona a este diario un aficionado llamado Óscar, originario de Mérida y que acudió al torneo en compañía de su esposa y dos hijas.

“Este año, antes de que supiéramos que estaba confirmada la fecha, ya esperábamos el torn porque venimos el año pasado. Nos ilusionamos y la verdad es que ya vamos a ser frecuentes al torneo, nos encanta la idea de que vengan a Mérida”.

Sin embargo, el cartel de jugadoras de 2023 fue más atractivo que el de 2024 por contar con ocho jugadoras dentro del top 60 del ranking mundial, como Magda Linette, Sloane Stephens y Katerina Siniakova; este año la mejor rankeada es la mexicana Renata Zarazúa (62).

Otra petición de los aficionados es reformar los precios: “Está caro, pero normal para este tipo de evento. Lo que sí siento es que como el evento está creciendo tal vez podrían democratizar un poco más algunas cosas para que venga más de gente. No todo, como en todos los eventos, deben tener cosas exclusivas, pero siento que deberían democratizar un poco más (los precios), entendiendo que estamos en Mérida y para que se llene más”, dice Manuel, un aficionado originario de Ciudad de México pero radicado en Mérida.

—¿Cuál es la expectativa de captación de aficionados fuera de Mérida?

—“Para esta edición me ha tocado ver a mucha gente de Ciudad de México, Campeche y ciudades colindantes a Mérida. Esperaría que para esta edición al menos el 20% de las personas sean de fuera, eso es lo que buscamos a largo plazo con la Secretaría de Turismo y gobierno (de Yucatán), que sea un evento donde todo el sureste del país pueda venir. El año pasado fue el 10% de gente de fuera (de la asistencia total)”, responde Santoscoy García.

_¿Qué diferencias de ofertas presentan al público en comparación de Guadalajara?

“Empezando por los establecimientos, aquí se siente una vibra muy similar a algo de playa y en Guadalajara es algo más de ciudad, eso hace que la gente venga un poco más cómoda, disfrute y se quede más tarde. La gente por acá también es muy social, los stands se prestan para atraer a muchos niños, es como una fiesta compacta porque el sitio es bastante pequeño y hace que toda la gente pueda convivir”.

Gustavo Santoscoy Arriaga, el otro director del Abierto de Mérida, señala a El Economista que para este año invirtieron 10 millones de pesos para agrandar la infraestructura del venue no sólo con la zona comercial, sino aumentando 1,500 butacas en el estadio principal.

“Hay muchos retos que se tienen que ir tratando de dar lo más rápido posible, pero siempre lo comento: un torneo requiere años para su consolidación. Conforme se vaya desarrollando y dando a conocer, cada vez más gente va a viajar a Mérida. Es parte de un proceso, no en el primer año se tiene éxito, como cualquier otro negocio o proyecto”, agrega Santoscoy Arriaga.

La segunda edición del Abierto de Mérida inició el 28 de octubre y concluirá el 3 de noviembre, siendo la última semana de actividad del WTA Tour antes de las Finals 2024. La bolsa económica en Yucatán consiste en 267,082 dólares.